Magio envía enseñanzas del Rosario Agosto 27 de 2015

María Virgen

Mis hijitos queridos

muy buenas noches yo soy María Virgen madre de Dios y madre vuestra, reciban mis hijos amados mi bendición, la de Dios Padre Todopoderoso.

Desde nuestra condición espiritual mis hijos cualquier brote de violencia, de maldad, supera los conceptos terrenos de quién es la víctima o de quienes el victimario para que puedan entender que esas manifestaciones de diferencias sociales, raciales, étnicas han hecho durante el proceso de la vida del hombre, de esas luchas de poderes y de tiene tierras algo que ha impedido que el ser humano pueda evolucionar en la hermandad que Dios ha querido para ustedes.

No solamente es importante orar por aquellas víctimas de esos actos violentos, de esos actos deplorables de divisiones raciales y étnicas, es importante también que lo hagan para despertar a aquellos que están actuando bajo esos conceptos de división, bajo esos conceptos de odios y de maldad; que puedan despertar a la compasión, que puedan despertar  a la comprensión del otro porque algo que debe aprender el ser humano es a nunca hacerle al otro lo que no quieren para sí mismos y por eso es importante que de la misma manera obren en la compasión para hacer por otros exactamente lo que en esa condición vulnerable ustedes esperarían que los demás hicieran por ustedes.  ¡Es tan sencillo mis hijos como hacer un segundo de reflexión sobre ello! ponerse en el lugar del victimario para poder comprender las razones que un día lo llenaron de odio, lo llenaron de división así eso sea absurdo, como de la misma manera ponerse al lado de la víctima para poder entender qué de su fragilidad les hizo asumir un papel tan difícil y dolido y de qué manera a través de ese dolor y sufrimiento éstas víctimas están intentando cambiar el mundo y están intentando cambiar sus propias vidas.

Llénense mis hijos de una oración que les lleve a portar ese tricolor no con un ánimo de división y de guerra sino con un ánimo de amor y compasión frente a quienes sufren y de elevación de una oración frente a una hermandad donde las diferencias hoy en día que puedan haber se pueden solucionar de formas diferentes, de unas formas más amistosas, de forma donde aparecen los juegos, las competencias y formas más agradables de poder sentir que pueden establecer esas diferencias para sentir que pueden ganar.

Quiero mis hijos llevarlos hacia la oración, hacia la paz, hacia que puedan entender que la paz se obra desde ustedes y que la paz se establece en sus propios caminos; tómense un momento para darse cuenta en qué circunstancias ustedes están actuando como los victimarios, miren a quién le están queriendo enseñar en forma difícil y en forma dura: a un hijo?, a un padre?, a una madre? a un jefe o un empleado?, a un amigo?, un vecino? y esta reflexión les debe llevar mis hijos a que sus actos sean compasivos, sean amorosos y sean respetuosos al momento de establecer ustedes el poder que tienen para poder convencer a otros en forma amorosa y en forma compasiva. A través de la guerra, el poder del más fuerte, a través de la posición más dura el que tiene ese poder dentro de una casa, un padre, una mamá puede actuar de forma arbitraria y difícil frente aa un hijo, puede actuar de forma indolente frente a los demás. Pídanle a Dios que les de la sabiduría para en cualquiera de los actos ser ustedes buenos líderes, ser ustedes personas que asumen el poder de su vida y el poder de la vida de quienes les rodean desde ese servicio y respeto y de ese valor por los seres humanos a su alrededor, porque si Dios les concede mis hijos avanzar, evolucionar, tener el dinero, la posición económica, tener las condiciones de familia, las condiciones sociales, materiales que ustedes han pedido no es para discriminar a otros, no es para abusar de esa condición y despreciar a los demás sino precisamente para acogerlos y mostrarle al mundo que si ustedes pudieron y Dios los bendijo ellos también van a poder lograr aquello que han visto como un acto de milagro, como un acto misericordioso de Dios, como un acto de sanación en la vida de ustedes porque cuando ustedes son bendecidos, son sanados deben contar esa historia para decirles a los demás “Dios hizo ese milagro en mi camino, me mostró que podía lograr estas cosas que veía distantes y tanto le he pedido y ustedes pueden lograr lo mismo”.

Les entrego niños de mi alma, mi Manto Sagrado para que lo porten siempre para que lo porten siempre, en todo lugar, el Espíritu Santo de Dios que desciende sobre ustedes, sobre su familia, sobre lo que consumirán en esta noche, sobre sus proyectos de vida, sobre su ser desde el espíritu hasta el cuerpo físico. Reciban mis niños mi bendición y la de Dios Padre Todopoderoso con mi amor y mi alegría de poder acompañarlos en el camino de la paz, yo soy María virgen muy buenas noches mis hijos.  Hasta siempre.

Jesús de Nazaret

Hermanos muy buenas noches,  con ustedes Jesús de Nazaret al habla.

Hoy quiero conversar con ustedes sobre los apegos. Que puedan entender con mucha más claridad a qué nos hemos referido sobre la liberación de apegos.

Cuando ustedes llegan a un proceso espiritual sienten que deben abandonar el ego, que deben abandonar sus casas, puede parecer que es hacer a un lado todas aquellas cosas o aquellos seres que son importantes en su vida y que significa dejar de tener cierto tipo de arraigo hacia la vida; el desapego es la conciencia que ustedes deben tener queridos hermanos sobre su paso espiritual por la Tierra donde todo se queda acá, desde su cuerpo en adelante.

Al tener esa conciencia lo que logran inmediatamente es disfrutar más la vida, entender que al ser todo prestado en este mundo, lo deben disfrutar, lo deben cuidar, lo deben valorar y deben entender que en ese camino hay que dejar una obra, una tarea, el haber preservado su vida con cariño, el haber hecho todo lo que humanamente estuvo de su parte para que su trabajo se convirtiera en su misión dadora de vida.

Muchas veces los seres humanos han desvirtuado el concepto de la misión de vida al concepto de un trabajo. El trabajo necesariamente debe ser una misión y debe ser una misión agradable en sus vidas donde el componente natural de hacer esa voluntad de una misión que les debe hacer vibrar el corazón y hacerlos felices redundará en muchas bendiciones en sus vidas, entre otras una condición económica clara.

Pero en el momento en que la prioridad de la supervivencia le hizo crecer creer al ser humano que tenían que hacer cantidad de cosas para poder ser agradables a otros, ser agradables a Dios y poder sobrevivir y tener la paga,se perdió el concepto de la libertad, de qué es lo que un ser humano realmente debe hacer. Y el ser humano lo que debe hacer en la vida queridos hermanos es lo que quiere.

Ya dejen de preguntarse “¿qué es lo que tienen que hacer?” Porque cuando se preguntan ¿qué tienen que hacer? están tratando de que alguien les dé órdenes y les diga hacia dónde deben ir y siempre cualquier persona o incluso el propio Dios que te diga qué puedes hacer, es algo que tú elegirás tomar o no en el camino de tu vida. Pero siempre desde la posición de Dios no te estaremos diciendo qué tienes que hacer, vinimos a hacer su voluntad y vinimos a decirles ¿qué es lo que quieren?.

Asegúrense de mirarse de ahora en adelante a ustedes y preguntarse ¿yo qué quiero?.

Renuncien a esos teneres para empezar a abrazar los quereres.

Cuando la vida se empieza a hacer lo que se quiere, la vida empieza a fluir de una forma más fácil y créanme que tienen el derecho queridos hermanos a ¡no hacer nada! y nunca los estaríamos obligando a hacer algo diferente porque ¡son libres!, porque los entendemos, porque entendemos que el regalo de la vida que Dios les Dios les dio es para que ustedes hagan con ella lo que quieran incluso desperdiciarla. Pueden quitarse la vida, incluso pueden creerse con el derecho de quitarle la vida de alguien más porque créanme que si Dios fuera ese ser arbitrario del que ustedes han hablado durante tanto tiempo en la humanidad para Él hacer esa condición dura para ser humano pues sería muy fácil condenarlos, sería muy fácil castigarlos y sería muy fácil suprimir y obligarlos a que pudieron actuar de X o Y manera. La posibilidad de manipulación puede ser muy grande pero las reglas siempre han estado claras sobre el respeto y el valor.

Hemos trabajado en que seres iluminados como ustedes puedan entender el valor del ser humano; en un momento, se pudo lograr la declaración de los Derechos Humanos en pos de ese valor de la vida y del respeto a la vida y de unas cantidades de condiciones que favorecen hoy la calidad de vida de ustedes y que va a seguir teniendo modificaciones en un futuro frente a lo que significa la libertad de la opresión por temor, la opresión del pensamiento y la pluralidad de los conceptos de una sociedad.

Por eso hoy quiero queridos hermanos que puedan hacer esa declaración de libertad en su propia vida. Declárense libres de todos aquellos que piensan mal de ustedes o de todos aquellos que creen que tienen un poder sobre ustedes para manipularlos a actuar o vivir de una forma que no quieren. Tienen toda la potestad queridos hermanos de renunciar, de irse, de que si una forma de vida está siendo muy dolorosa para ustedes, elijan cambiarla pero a veces se someten tanto lo que no quieren que creen que así es la vida y que la única salida para que la vida cambie es morir, renunciar a la vida misma, y resulta que renunciar a la vida misma sin haber logrado el concepto de una vida maravillosa donde el paraíso se pueda vivir en la Tierra es seguir en la Rueda de la Vida estableciendo oportunidades o pidiendo oportunidades para poder llegar a enamorarse de ella.

¡Enamórense de la vida queridos hermanos!, enamórense del ser humano que es otra de las obras perfectas y magníficas de Dios sobre la cual Dios hizo la supremacía sobre esta Tierra. Ustedes son los reyes de esta creación y ser los reyes de esta creación significa que tienen la libertad de actuar como reyes y creérselo o de actuar como esclavos y seguirlo creyendo como la humanidad lo lleva creyendo desde hace tanto tiempo.

Les entrego mi amor infinito mis queridos hermanos, mi deseo de que puedan empezar a renunciar a esa vida difícil sin renunciar a la vida como tal y que puedan comenzar un nuevo papel en el cual puedan realmente sentirse soberanos, sentir que están eligiendo el camino que quieren.

Pregunta: buenas noches. Quiero esta noche entregarte como vi en mi terapia mi espíritu egocentrista que no me permite avanzar ni ver qué es lo que tengo que hacer para mejorar…

Jesús: que es lo que quiero que hacer para mejorar…

P: qué es lo que quiero hacer, no logré ver lo que no me deja avanzar, yo concluí que si uno no sabe, que le den luz, entendimiento y aprenda a dejar ese ego espiritual que me pone en controversia  en todos los roles de vida.

Jesús: obedecer a Dios es entender que las señales ya te fueron dadas y te están llevando una serie de cambios necesarios en tu vida sobre todo lo que te hace daño; cuando hacemos una lista de todo lo que te hace daño, tú la conoces y sabes que debes renunciar a todas esas cosas y a todas esas personas que te hacen daño.

El apego del que he hablado hoy es nocivo, es seguir en algo que ustedes saben que no es lo que los hace felices. no se hagan daño queridos hermanos teniendo relaciones, teniendo formas de vida, de trabajo, de experiencias duras en la vida, tienen todo el derecho de probarse a ustedes mismos cuánto dolor pueden aguantar, cuánta presión pueden aguantar, cuánto reto difícil pueden aguantar, están en el derecho de hacerlo pero los únicos que pueden llegar a poner un límite sobre todo esto son ustedes; el límite de “hasta aquí llegué, ya me aburrí de vivir de esta manera y elijo Señor que realmente me cambies la vida y me abras la puerta hacia esos nuevos caminos”, quiero que sean lo suficientemente valientes como para enfrentar ese miedo que les impide dar ese paso.  Créanme que cuando dan ese paso ya están en el vacío y estaremos asegurándonos que no caigan porque si en un momento llegan a caer es porque no has podido soltarte del todo y lo que usualmente en forma instintiva harás es querer retroceder y estar en las mismas circunstancias de las que te has estado quejando por tanto tiempo sintiendo que no hay una salida, sintiendo que no hay una oportunidad.

Ámense, apréciense, ustedes son  un tesoro de Dios, y queremos que se vean ustedes de esa manera porque cuando ustedes se aman y se ven ustedes mismos con los ojos del amor y de la grandeza con que Dios los mira ustedes lo único que tienen que hacer es seguir adelante en ese amorpara que el mundo los reconozca y vea su grandeza. Dejen de tratar de probarle algo a alguien, dejen de tratar que el mundo los acepte o que el mundo no les haga daño.

El mundo es como ustedes lo ven y se porta con ustedes de la manera como ustedes contemplan el mundo y se ven a ustedes mismos, CREAN EN USTEDES porque cuando creen en ustedes, creen en Dios y cuando creen en Dios, creen en ustedes. Por eso la vida empieza a evolucionar a partir de ese CREER y de ese valor propio que deben tener y del aval en que nosotros estaremos guiando sus caminos para que puedan ser respetados en ese intento en su vida, valorados y dignificados de la manera como ustedes lo merecen.

Los acompaño a cada uno de ustedes queridos hermanos en sus sueños, en sus ideales, en sus momentos de luz, en sus momentos de agobio, en cada circunstancia de su vida porque ustedes son inmensamente valiosos para Dios, cada uno de ustedes es inmenso y para cada uno de ustedes hay cortes y cortes de Ángeles, de Maestros, de Arcángeles acompañándolos porque lo que es importante para ustedes lo es para nosotros y nunca los abandonamos.

En la gracia de Dios queridos hermanos Jesús de Nazaret al habla, muy buenas noches.