Magio
envía enseñanzas del Rosario Septiembre 3 de 2015
María Virgen
Mis
hijitos y mis hijitas muy buenas noches yo soy María Virgen madre de Dios y
madre vuestra, reciban mis hijos amados mi bendición, la de Dios Padre
Todopoderoso.
Hay
que ir aprendiendo mis hijos a poder hacer esos momentos de silencio. No solamente el silencio que
viene del no hablar sino que viene del acostumbrar la mente a callar.
Cuando se acostumbran a callar pueden
recibir con mayor percepción y claridad las señales que Dios establece en el
firmamento para ustedes; el silencio, hace que ustedes puedan escuchar su voz
interna, la más profunda, para poder entender lo que les sucede y para poder
escuchar la voz angelical del cielo, la voz de sus ángeles.
Quiero
mis hijos que puedan ir entendiendo que hay días donde es necesario permitirse
ejecutar hay otros donde es necesario permitirse hacer un alto y no hacer nada
y permitirse un real descanso.
Saben
que cuando la enfermedad aparece, la enfermedad les está mostrando la necesidad
que están teniendo de hacer un alto. La sobrecarga que han tenido muchas veces
en forma mental, emocional y espiritual los lleva a ese momento crítico donde
su cuerpo, donde su percepción de la vida es necesaria que sea modificada a partir
de ese alto en el camino. Y se han dado cuenta mis hijos que después de una
enfermedad cuando salen de ella pueden recuperar una energía particular que es
la que les permite nuevamente montarse en el tren de la vida y volver a
disfrutar las cosas básicas y sencillas que no pueden disfrutar en medio de la
preocupación.
Queremos
seguirles insistiendo en la
importancia de confiar y creer en Dios, de creer en las promesas del cielo,
de creer en lo que Dios en forma buena tiene para ustedes; sé que el ser humano
trabaja bajo el concepto del “ver para creer” y nosotros les hemos venido a
enseñar mis hijos que es necesario creer
para ver. Cuando ustedes han creído en algo, cuando han soñado con algo,
cuando han procurado algo en su vida ha sido desde ese orden como se ha logrado
las cosas que en un momento parecían imposibles en su camino, las cosas que
estaban enredadas para ustedes; yo sé que en medio de las dificultades ustedes
quisiera que todo se organizara en forma inmediata, que las cosas se dieran en ese
orden bajo el cual necesitan un acto del cielo totalmente desesperado en un
momento, totalmente rescatante pero también queremos decirles mis hijos que siempre estamos haciendo algo y algo
por ustedes, que aunque no sepan vernos o no puedan vernos nosotros siempre estamos actuando su
favor, si ustedes pudieran ver hay a su alrededor cortes de ángeles y
arcángeles obrando por cada uno de los momentos de su vida en hacer ese camino
más fácil por eso muchas veces escuchan después de un desespero en su ser una
voz que les dice “tranquilos”, una
fuerza interna que les dice “confíen”
y una esperanza frente a que todo se va a solucionar. Cuando estén en medio de
la crisis, de la preocupación mis hijos permítanse envolverse en la luz de
Dios, pídanle a Dios que les de la fuerza del Espíritu Santo, envuélvanse en mi
Manto Sagrado porque yo los acogeré como
mis hijos, los arrullaré y les ayudaré a
que puedan dormir, a que puedan descansar, a que a pesar de que haya unos
grandes inconvenientes en su vida ustedes puedan sentirse tranquilos en medio
de esas circunstancias y tener la esperanza de que todo mejorará.
Por
eso descansar en Dios es dejar que todo ese cansancio sea retirado a partir de
esa intercesión celestial; no
se duerman cada noche mis hijos sin haber dado gracias y haberse sintonizado con lo bonito que
tienen. A veces en medio
de las dificultades se les olvida el agradecimiento por la cantidad de cosas maravillosas que suceden cada
día y que a veces resultan imperceptibles al ser humano en medio de esas
dificultades. No se duerman sin pedirle a Dios que haga por ustedes, que les muestre el camino que les restaure su cuerpo, que
puedan darle esa orden a su cuerpo en que se regenere, en que cualquier molestia,
cualquier mal cualquier dificultad pueda ser solucionada en medio de la noche
en la restauración de su cuerpo, en la motivación del amor y la fuerza que se
requiere de poder sentir que la
sabiduría llega en medio de ese silencio y la respuesta llega en medio de la tranquilidad.
Por
eso mis hijos venimos a cubrirlos con la luz de la esperanza a traerles la
fuerza del espíritu, a traerles el amor infinito de Dios para que puedan seguir
creyendo y puedan seguir permitiendo que día con día el milagro de la vida se
dé y la llegada hacia lo que han pedido se concrete.
Quiero
que sepan mis hijos que los comprendemos perfectamente, que entendemos que
desde la posición terrena el tiempo funciona de una forma distinta a como lo
contemplamos nosotros y pueden sentir que en esa forma las dificultades, los
momentos complicados pueden hacerse más largos debido a sentir que pasan los
días y no suceden aquellas cosas que ustedes han estado pidiendo, pero les pido el favor mis hijos que
cambien su visión y que se reprogramen en la confianza que deben tener
no en que cada día pueden estar más lejanos de lo que anhelan o que se está
disolviendo sino que cada
día están más cercanos de lo que han pedido y que su vida está siendo
restaurada, está siendo manejada en la comprensión que queremos que ustedes
tengan bajo el poder que tienen, que puedan saber que todo esto depende de
ustedes en el milagro de
permitir y en el
milagro de ejecutar
bajo la fuerza del deseo lo que anhelan y poder contemplar todas las posibilidades para que Dios
pueda mostrarles esos caminos.
Reciban
ustedes mis hijos el Espíritu Santo de Dios lleno de paz, de luz, de salud de
oportunidades, de progreso, de comprensión, de alegría de vivir en Padre Hijo y
Espíritu Santo con mi bendición y la de Dios yo soy María virgen, muy buenas
noches mis hijos hasta siempre.
Jesús de Nazaret
Hermanos
muy buenas noches, con ustedes Jesús de
Nazaret al habla.
Es
una alegría poder compartir esta fría noche con ustedes, venir a hablarles del potencial que tiene el amor y poder
llevarlos a ustedes que puedan comprender que la mejor forma que tienen de romper obstáculos en la vida es el amor, el amor que deben tener hacia el
Padre, del amor que deben tener hacia ustedes mismos y hacia sus semejantes.
A
veces es necesario en la vida queridos hermanos explorar caminos y poder darse
cuenta que abrirse a las posibilidades es una mejor forma de poder lograr las
cosas. Les hemos enseñado que puedan mirar el sueño sobre lo que quieren y el
ideal en su máxima instancia pero queremos que se abran a los caminos; miren, queridos hermanos
aunque pareciera que el abrirse a diferentes caminos los puede llevar a un
lugar diferente, abrirse a
diferentes caminos establece su posición frente a la forma como Dios les puede
mostrar las cosas y les puede mostrar que puede actuar en su vida. Ábranse a esos caminos diferentes
y pídanle a Dios que los sorprenda, que si en algún momento se paran en el
camino sabrán que necesitarán de ese tiempo necesario que ustedes requieren para
poder permitir que todo encaje de la manera como ustedes exactamente lo han
pedido de acuerdo con su permisividad.
Muchas
veces lo que ustedes piden no es que a Dios le cueste trabajo es que a ustedes les puede costar
trabajo lo que están pidiendo y en ese proceso los tratos que se pueden hacer con el Padre no son otras
cosas que acuerdos que ustedes hacen con ustedes mismos.
Los
acuerdos son necesarios; los acuerdos llevan a conciliación, el acuerdo no es
queridos hermanos ir hacia atrás y resignarse a una voluntad sobre lo que no
quieren, es entender que cada cosa que está sucediendo en su camino les está
enseñando algo, les está significando el reto pero también la posibilidad de
explorar algo diferente. Yo siempre los convoco queridos hermanos a que se
abran a las posibilidades, a que si ustedes han marcado un camino y sienten que
sobre ese camino hay resistencia, vale la pena que le digan a Dios qué otros
caminos pueden estar abiertos para ustedes, qué otras posibilidades hay y
pedirle a Dios que las muestre en el camino y que ustedes puedan abrirse a
ellas.
Es
necesario que estén vigilantes de la forma como están viviendo la vida y no
dejar que en su ser profundo se guarde la desilusión, que en su ser profundo se
guarde su autojuzgamiento o el juzgamiento de lo que la obra del Padre puede
estar haciendo sin que ustedes lo entiendan; les parece que Dios no tiene clara
su tarea con ustedes y hay momentos donde pareciera que Dios está lejano a su
camino pero Dios nunca se puede alejar de ustedes hermanos
porque Él es la esencia de ustedes y está en su corazón.
Ámen
lo que les está pasando porque lo que les está pasando es la oportunidad de
transformarse.
Cada
reto de vida, cada circunstancia de vida tiene la posibilidad de que ustedes lo
vean como un trampolín a algo mejor y como una oportunidad de transformación.
A
veces las transformaciones no son fáciles porque requieren del temple de su
carácter, de su fuerza de voluntad para poder aceptar que las cosas ya no son
iguales, que las cosas cambiaron que las circunstancias ya no serán las mismas
a las que una vez fue la ilusión, fue la forma como vivían, fue la manera como
ustedes establecieron su camino y creían que iban a vivir hasta el último
momento y créanme que detrás de cada transformación queridos hermanos hay un
regalo y hemos venido a ayudarles a sanar esas heridas que han quedado de esos
cambios, a darles la compasión necesaria, nuestro cariño necesario para poder
llegar a ustedes y somos lo suficientemente humildes como para decirles los
entendemos, entendemos que la vida como reto no es fácil y que en la libertad
del ser humano los órdenes bajo los cuales fueron ejecutados durante mucho
tiempo los contactos de la evolución humana estuvieron marcados de forma
difícil, formas de diferencias sociales, étnicas formas de diferencias
espirituales, religiosas, monetarias, que han hecho que ustedes sean enemigos
unos con otros y que ocasiona que ustedes estén haciendo una transformación
social, una transformación personal para redescubrir lo que un día perdieron: su grandeza, su conciencia, su
capacidad creadora como hijos de Dios porque aunque ustedes no lo sepan
queridos hermanos al ver los resultados tienen un poder inmenso que no siempre
ejecutan de la manera como deberían.
La llave queridos hermanos para obtener
cualquier cosa en la vida es amarlo.
¡Amen
sus proyectos!
¡Ámense
ustedes!
¡Ámen
las circunstancias por las que están pasando!
¡Ámennos!,
ámennos; miren, no podemos vivir en la vida de ustedes por premios o por
castigos en la manera como ustedes creen que un día nos pueden querer y otro
día pueden renunciar a nosotros. Nosotros estamos haciendo nuestra obra de
acuerdo a una voluntad mayor y a un proceso de transformación mayor. Cuando
lleguen al Padre y puedan observar toda su experiencia de vida se darán cuenta
que siempre estuvimos ahí, que siempre intercedimos y ustedes saben que cuando
se han permitido hacer ese silencio del cual les estamos hablando hoy escuchan
muchas cosas, se les abren los ojos, llegan recuerdos, llegan ideas, y de un
segundo para otro muchas cosas cambian y cambian de la forma como siempre lo
quisieron y como siempre lo anhelaron.
Hoy
queremos bendecir lo que van a consumir queridos hermanos; queremos abrazarlos desde el
corazón, llenarlos de
esperanza sobre el futuro, llenarlos de alegría sobre ese futuro que
queremos que contemplen, nuestro gran pecado frente a ustedes es llenarlos de
esperanza. Nuestro pecado frente a ustedes es mostrarles un futuro que no
necesariamente puede realizarse a no ser que ustedes puedan realmente creen en
él y soñar con él.
Sabemos
que como niños pueden sentir de parte de Dios que tal vez esas promesas no se
cumplieron, pero en el juego y en el caminar de la vida siempre hay la
oportunidad de reparar, siempre hay la oportunidad de ver la obra de Dios en
ustedes, y de restaurar su camino hacia un poder diferente. Tienen la
responsabilidad social como tantas veces les hemos dicho y de raza de llevar a
sus hermanos a creer de llevar
a sus hermanos a una forma espiritual de creación en la cual ya Dios no
obre como un justiciero, ya Dios no sea contemplado como un ser distante y frío
sino que puedan estar en comunión continua con Él.
Retírense
en momentos del día, retírense antes de dormir, retírense en fines de semana a
tener conversaciones con Dios, hablar con Dios es tan sencillo como lo estamos haciendo nosotros
en este momento con
ustedes, cuéntenle a Dios cómo se han sentido, cuéntenle a Dios qué
expectativas tienen, cuéntenle a Dios desde su corazón qué los tiene tristes, qué
los tiene acongojados por qué están desesperados, qué los tiene en la
confusión.
Esa
apertura del corazón para hablar con Dios desde un punto más profundo hará que
ustedes puedan desahogarse y hará que puedan sentir que su entrega es total
frente a la voluntad del Padre.
Muchas
veces cuando el ser humano ya no tiene más que perder tiene todo para ganar y
cuando el ser humano se rinde a la voluntad del Padre las grandes
transformaciones se obran en el ser, en su humildad, en su capacidad de
creación y de amor y de fortaleza; especialmente se empiezan a hacer más
fuertes, empiezan a entender la vida desde un orden más grande donde empiezan a
desapegarse y empiezan a sentir la experiencia como algo maravilloso donde cada
momento y cada segundo tiene sentido donde ya no se sienten presos, donde las
vicisitudes del diario vivir pierden esa importancia de la supervivencia para
sencillamente confiar en
que todo estará garantizado en el Padre y que siempre habrá una mano tendida
para ustedes.
Los
acompaño en mi corazón queridos hermanos, les dejo el alimento no solamente
físico que consumirán en esta noche sino el espiritual para que puedan llenarse
de amor, para que puedan llenarse
de perdón, de humildad, para que puedan llenarse de esperanza y de alegría por la vida que viene,
por la vida que han tenido y por lo que hoy han vivido. En la Gracia de mi
Padre queridos hermanos quedándome con ustedes en esta compañía para llevarlos
al Padre y que pueden abrir su corazón, Jesús de Nazaret al habla muy buenas
noches.
GRACIAS
ResponderBorrarEs tan gratificante leer estos mensajes de nuestra amada Madrecita y nuestro Hermano Jesús,mas cuando en mi sucedió la más grande transformación,jamas ni en lo mas profundo de mi ser creí que mi vida cambiara de la manera como esta cambiando todos los días y por esto digo Gracias,la esperanza y la libertad llego a mi vida y Dios me provee de todo sin objetar y yo creo y confió porque todo lo sigo recibiendo.Dios me escucha y da respuesta a mis necesidades.Amen.Gracias MAGIO,por compartirlas con nosotros.
ResponderBorrarGracias, mi vida va mejorando, y espero tener el suficiente entendimiento para poder aplicar todas estas sabias palabras. Gracias Mauricio y Johana.
ResponderBorrarGracias, mi vida va mejorando, y espero tener el suficiente entendimiento para poder aplicar todas estas sabias palabras. Gracias Mauricio y Johana.
ResponderBorrarGracias, mi vida va mejorando, y espero tener el suficiente entendimiento para poder aplicar todas estas sabias palabras. Gracias Mauricio y Johana.
ResponderBorrarQué maravilla de mensaje ! Gracias , mil gracias por darnos estos consejos para sobrellevar esta vida que aveces nos parece dura pero con Jesu Cristo todo se puede y nuestra Madre como apoyo ! Besos y abrazos y mil bendiciones hoy y siempre !
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