ENVIO EL VINCULO PARA OIR MEDITACION.
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LIUfebrero25de2016.MP3
GUIA DE SALUD POR CAMBIOS DE CLIMA, AUTOSANACION.
MariaVirgenJesusdeNfebrero25de2016.mp3
Disponible hasta
4 de marzo de 2016
Magio,
mensaje del Rosario febrero 25de 2016
María Virgen
Mis hijitos y mis hijitas queridos muy buenas noches, soy María Virgen
madre del Señor Jesús y madre vuestra, reciban todos ustedes mis hijos mi
bendición, la bendición de Dios Padre Todopoderoso.
Hoy oro a Dios mis hijos por cada uno de ustedes, por poder hacer
realidad los sueños individuales de su vida, los sueños colectivos que pueden
hacer posible que ustedes sean un testimonio de vida, un testimonio de
milagros.
Oro por ustedes mis hijos para que puedan hallar
no solamente la sanación del cuerpo sino también la del espíritu. Que puedan entender que cuando logran esa
sanación espiritual en la comprensión de lo que han vivido de la vida están
realmente encontrando un nuevo camino en la existencia espiritual, en el
compartir la vida en la Tierra de una forma diferente.
Oren por cada persona que ven sufrir, oren por esas mortificaciones que
hacen que el mundo se muestre agresivo frente a otros. Sigan en esa intercesión
como es mi deseo y es el deseo de Dios por una paz duradera, por una paz que
nace desde el corazón y puede hacer posible que se entiendan con sus parejas,
que se entiendan con sus hijos, que se entiendan con sus padres, con sus
hermanos, que se entiendan en este país y en el mundo como parte de una sola
familia.
Quiero mis hijos traerles la fuerza del Espíritu Santo para que se
iluminen y se llenen de la comprensión. Quiero orar por ustedes en el día de
hoy para disolver en su ser interno la preocupación, la tristeza, el desgano,
el cansancio, el agobio de la vida y puedan sentirse motivados. Hoy quiero que
puedan hacer posible sus cosas en la entrega a Dios, sus sueños, en la entrega
a Dios y que puedan decirle al Dios Superior que Él haga la obra en ustedes
porque llega un momento mis hijos en donde las fuerzas ya no están con ustedes,
donde lo que hay que permitir es que Él haga su tarea y que puedan creer en ese
padre que da la vida, en ese padre que crea los mundos, en ese padre que
intercede, por ustedes e intercede en su voluntad; siempre les enseñamos hijos de mi corazón que Dios siempre quiere, les
enseñamos que el poder y la voluntad de Dios no está en su contra,
no está en que vivan esas cosas difíciles y mortificadas de la vida sino está en que ustedes puedan obtener los resultados que
esperan.
Les agradecemos infinitamente que puedan seguir orando por ustedes en
estos encuentros que hacen con el espíritu, que puedan seguir visualizando esos
tiempos de lluvia, de equilibrio en el clima, que haga posible que puedan
sentir que esta tierra se sigue preservando y sigue siendo guiada en la
voluntad del Padre para que puedan tener calidad de vida; sigan orando mis
hijos por aquellos que sufren, por
aquellos que necesitan la comprensión del valor de los niños, del valor
de los más necesitados, del valor de aquellas personas que necesitan una mano
tendida.
Quiero orar por ustedes mis hijos para traerles a ustedes una noche
buena y cuando hablo de una noche buena es que puedan dormir bien, estoy
hablando de traerles la tranquilidad que requieren para conciliar el sueño,
para descansar, para que no les duela nada, para que puedan sentir que no hay
nada dentro de ustedes que al momento de descansar e ir a su cuarto puedan
llevarse para mortificarse.
Retomen la oración antes de dormir, retomen el entregar antes de dormir a Dios
esas preocupaciones, los dolores, los problemas, los sueños, los anhelos y
entreguen su cuerpo a Dios también antes de dormir; entreguen su cuerpo a Dios
para que su espíritu pueda ir al regazo del Padre Celestial y recibir la sanación
que requieren y entreguen a Dios igualmente su cuerpo para que el con su Corte
Médica pueda hacer posible que ese cuerpo funcione bien, que puedan sentir que
el cuerpo se recupera, puedan sentir que todo su ser se llena de armonía y que
cuando se levanten al día siguiente puedan recuperar el cuerpo renovado,
tranquilo y puedan haber tenido una sanación lo suficientemente grande como
para ver las cosas diferentes y que la tristeza se haya quedado el día
anterior, el agobio, la desilusión, los problemas, que todo lo que los
mortifica en la vida al haber sido entregado al Padre ustedes ya no lo vuelvan
a portar en ustedes y confíen en que todos aquellos problemas tienen solución.
Los bendecimos mis hijos, bendecimos sus trabajos, sus hogares, sus
familias, sus obras, su buena voluntad.Estoy
muy feliz porque han empeñado su ser en ser buenos por encima de la maldad,
por ser buenos y mantener en forma digna por encima de todos aquellos que
pueden estar actuando en su contra pero que también han podido entregar a Dios
todas esas personas en la comprensión para que sea Dios el que se encargue de
premiarlos aunque sepan también que el castigo no venga de Dios y que por
encima de esa circunstancia esté ese Dios amoroso que puede hacer posible que
todo ese camino, que esas personas establezcan pueda estar dado en momentos
también difíciles que los lleve hacia una comprensión, por esoeste camino espiritual requiere cada vez más de una
comprensión de su parte sobre el poder que ustedes tienen y sobre la forma como
muchas veces actúan en forma inarmónica y como los demás también actúan de la
misma forma de manera inconsciente y
como pueden ustedes también trascender a todo ello. Por eso al entregar
estas personas a Dios lo que ustedes hacen es precipitar el flujo de la conciencia que hará que esas personas puedan elegir un nuevo
camino en el cual esos premios y esos castigos vendrán de la voluntad de su
propio espíritu y de los actos que han podido cometer en sus vidas y que ellos
necesitan vivir y vibrar de una forma más elevada y sobre lo cual necesitan comprender. A
veces hay personas que necesitan poder vivir la adversidad en sus vidas para
entender cuántas veces han hecho vivir esa adversidad a otros, cuántas veces
sus actos han sido inconscientes y dolorosos frente a otros pero es la voluntad de Dios permitir que todo suceda y
que cada hijo pueda elegir la manera como quiera aprender porque algunos eligen
aprender de la forma más difícil y más dolorosa.
Pídanle a Dios que ustedes puedan aprender mis hijos de una forma
diferente al dolor y el sufrimiento y puedan entrar en esa conciencia del
espíritu para sentir que no tienen que vivir esas cosas difíciles como una
manera de entender sus propios actos difíciles, entender a quienes están
obrando en su contra y entender también cómo poder trascender a ellos.
Reciban niños de mi corazón el Espíritu Santo de Dios, mi Manto Sagrado
para que lo porten siempre y en todo lugar; hasta pronto mis hijos reciban la
sanación y reciban la recuperación el perdón en Padre, Hijo y Espíritu Santo.
Con mi amor, yo soy María virgen muy buenas noches mis hijos hasta siempre.
Jesús de Nazaret
Hermanos con ustedes Jesús de Nazaret al habla.
¿Cuántas veces realmente queridos hermanos como lo explicaba ahora mi
madre han podido ustedes desear el castigo para los injustos, el castigo para
los malvados, el castigo para aquellas personas que les han hecho sufrir o han
hecho sufrir alguna persona que ustedes aman? Y cómo en algún momento la
justicia lo que está reclamando es eso, está reclamando que las personas puedan
recibir ese castigo con algún momento explicaba la Señora Del Cielo, pero
también muchas veces les hemos hablado queridos hermanos que Dios no castiga.
Cada persona como consecuencia de sus actos en algún momento de entrar
en conciencia puede sentir una profunda vergüenza y un profundo deseo de
castigarse a sí mismo; realmente la culpa es un castigo propio queridos
hermanos y qué bueno que puede ser el que puedan entrar en la conciencia antes
de que puedan llegar a ese punto tan difícil y tan doloroso que los actos
malévolos puedan generar una vergüenza en esa persona o en ustedes o una
sensación de castigo debido a todas las cosas que pudieron haber cometido mal.
Pero si se trata de juzgar queridos hermanos
pues ninguno se salvaría en este mundo y todos de alguna manera en
pensamiento, palabra, obra se han equivocado, han hecho mal, de alguna de otra
manera han establecido una actitud muy difícil ante el otro y eso creo que hace
parte de la vida, pero lo importante como también lo decía ahorita Mi Señora es
poder llevar a las personas hacia la comprensión del espíritu que es lo que
estamos haciendo con ustedes y esa
comprensión del espíritu se logra cuando ustedes pueden aprender a comprenderse
a ustedes mismos, entender que sin algún momento han hecho daño a
alguien es porque no han tenido la conciencia suficiente de esos actos y porque
definitivamente al actuar en contra del otro tú te estás defendiendo y estas
sintiendo que así defiendes tu verdad y así defiendes por el miedo que tienes
tu camino.
Por eso al comprenderte y
perdonarte puedes estar liberándote de las consecuencias naturales
que vienen de ese acto de conciencia culposo que los lleva a castigarse al ojo
por ojo y diente por diente, y cuando les hemos hablado del karma queridos
hermanos, hemos querido que ustedes puedan tener la visión de que el verdadero
karma puede realmente establecerse en la condición del amor y del servicio
frente al otro y de subsanar lo que un día fue el dolor y lo que un día fue
esas fuerzas en contra que hicieron a uno la víctima y al otro victimario o que
en otras circunstancias ustedes fueron el victimario y ellos la víctima para
poder compensar las cosas.
Por eso al liberarse de esa rueda del bien y el mal ustedes pueden
elegir un camino superior donde ya no tengan que vivir esas cosas, donde la
resistencia tampoco sea parte de su camino y se han dado que cuando cuenta que
cuando ustedes abandonan la batalla, la guerra y dejan de sentir que tienen que
pagar algo o que alguien tiene que pagar algo y sueltan y perdonan y se elevan
las cosas empiezan a fluir, las cosas empiezan a evolucionar. Todo aquello que
había estado trancado, todo aquello que había en complicación avanza y en
ese proceso los tiempos de Dios dejan de ser los tiempos lentos que ustedes
pelean por ello para ser tiempos rápidos de recuperación donde ustedes están
retomando un nuevo papel en su vida y donde la posibilidad del Padre está
siendo bendiciones a cada segundo.
Yo sé que al entrar en ese camino ustedes empiezan a ser por sí mismos
una bendición y a sentirse una bendición; ¡quiero
que se amen!, quiero que se respeten como hijos de Dios, que se sientan especiales, que ya no se avergüencen
de ustedes, ya no se avergüencen de sus actos, ya no se sientan dentro de
ustedes complicados ante lo que hicieron, dijeron o esperan y que puedan en esa
liberación sentir mucho más el amor y la voluntad del Padre.
Cada vez que estén en afrenta con Dios porque sienten que Dios no los
escucha, porque sienten que Dios está más ocupado con personas que los puede
necesitar más ustedes, cada vez que sientan que de alguna manera Dios está
bravo, que ustedes no merecen eso bueno que están pidiendo a Dios, ¡tómense un
momento para reflexionar sobre ello!, ¡libérense de esa culpa!, libérense de
esa rabia libérense, de esa sensación de impotencia que llega de ver pasar los
días y sentir que lo que ustedes quieren no se ha dado aún ypermitan que esa voluntad sabia del Padre les permita
mover todos los hilos de la vida para que puedan sentir que las
condiciones se están dando forma correcta.
Dios da tiempo y oportunidades para que las
cosas se organicen, para que el resultado se dé de la mejor forma, de una
manera armónica y
no tener que llegar a condiciones extremas y por eso créanme que todo lo que está pasando no es para porque
Dios se haya olvidado de ustedes, no es porque merezcan un castigo, sino es porque Dios está sanando muchas cosas en su vida
para poder traerles las cosas benditas y de una forma en que ustedes puedan
sentir que las merecen, porque realmente es ¡tan difícil para nosotros
convencerlos a ustedes de que ustedes merecen lo mejor!, Es difícil llegar a
ustedes para que ustedes puedan aceptar que son hijos de Dios, aceptar que son su más grande obra, aceptar que cada uno de ustedes son inmensamente
hermosos, inmensamente perfectos, que son la obra de Dios y que por eso mismo merecen todo
lo bello que les pueda pasar, por eso no me canso de decirles una y otra
vez cuanto los ama mi Padre. No me canso de decirles cuánto los admiramos,
cuánto los respetamos y cuánto creemos en que ustedes pueden obtener más de lo
que están recibiendo ahora y que merecen todo lo bello que les pueda pasar; se
han acostumbrado como humanidad y como sociedad a recibir afrentas, a recibir
castigos, a vivir con miedo a actuar porque pueden ser castigados según sus
actos, según una época, según la sociedad, según lo que el mundo les dice; pero recuerden que son libres y que la mejor
forma de actuar es de acuerdo con esa voluntad amorosa de ustedes que los
impulsa a actuar bien, que los impulsa a actuar en forma decidida y que si en
algún momento se llenan de cobardía o de rabia se comprendan y entiendan que
eso también hace parte de su humanidad y que también eso hace parte de su
derecho como hijos de Dios porque Dios los
hizo así con una mezcla perfecta entre valentía y cobardía, con una
mezcla perfecta entre amor y odio, con una mezcla perfecta entre luz y
oscuridad, para que ustedes elijan cómo se sienten mejor y qué dejan que nazca
en ustedes y qué deja que en ustedes siga adelante, si van a ser enfermedad o van
a ser sanos, si ustedes van a ser luz o van a ser oscuridad, y todo depende de su elección.
Los bendigo los acompaño para que cada día pueden sentir más en su ser y
su corazón esa fuerza interna para actuar, para sentirse, para hacer y para
vivir de una forma cómoda y de una forma maravillosa.
No olviden que siempre merecen lo mejor así se hayan equivocado, así
hayan tenido la ligereza del pensamiento frente a esa oscuridad y frente a esa
rebeldía ante la vida.
Los amamos, los cubrimos con la paz de mi Padre, bendecimos todo lo que
consumirán, los acompañamos en su día a día y créanme que cada uno de ustedes,
cada vez están más cerca de todo aquello que están pidiendo y que de nuestra
mano acortamos los pasos por la voluntad de esta entrega a Dios en que puedan
lograr todo lo que le piden al Padre.
Reciban queridos hermanos la bendición de Dios, mi amor y mi compañía
incondicional en la paz del espíritu; con ustedes Jesús de Nazaret muy buenas
noches.
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