Seguidores

REDES SOCIALES

Sígueme en Instagram Sígueme en YouTube Sígueme en nuestro Blog Sígueme en Facebook Sígueme en Linkedin

viernes, 4 de marzo de 2016

ENVIO MEDITACION e información del Curso de Magio .
Archivos   cursodesanacion.jpg       LIU3marzode2016.MP3      MariaVirgenYJesusMarzo3de2016.mp3
Disponible hasta     11 de marzo de 2016 
Enlace de descarga       http://we.tl/thEVWUmr9p
Magio, mensaje del Rosario marzo 3 de 2016

María Virgen

Mis hijitos queridos muy buenas noches, soy María Virgen madre de Dios y madre vuestra, reciban todos ustedes mis hijos mi bendición, la bendición de Dios Padre Todopoderoso.

Cuando Dios me regaló el título de Madre me sentí profundamente feliz de poder acompañarlo en esa visión de compañera de mi hijo, de compañera de mi Padre Celestial y poder acompañar el camino de mis hijos en la Tierra y quien más que alguien que ha podido compartir la vida, que ha podido compartir la alegría, el sufrimiento en la Tierra, puede saber como sabemos mi hijo y yo en la mención del amor de Dios lo que ustedes pueden vivir y sentir.

Muchos de las guías espirituales desde el cielo que los acompañamos hemos tenido ese paso por la Tierra para poder entenderlos aún más y saber lo compleja que es la vida; saber que la vida tiene momentos supremamente difíciles, cómo el miedo puede gobernarlos en algunos momentos y cómo pareciera desde esta distancia de una vida que se hace lenta que Dios está muy lejos de ustedes. Pero siempre les hacemos mención mis hijos en que Dios está en su corazón y que ustedes son sus hijos y que la esencia de Dios está en cada uno de ustedes, por eso cuando se sientan mortificados ,cuando se sientan tristes, cuando se sienten agobiados recuerden que pueden acudir a nosotros para hallar esa paz de la que hemos hablado, ese temple necesario para seguir adelante y seguir viendo el lado positivo de la vida.

Nosotros alentamos con cada una de las palabras que traemos a ustedes que puedan enfrentarse esas dificultades sabiendo que al ver la vida desde ese orden positivo desde esa confianza en Dios, desde esa cercanía, la maldad, el miedo, la oscuridad, todas esas cosas difíciles sucumben frente a la fuerza de Dios y pierden ese poder. Por ello cada vez que hay un problema en su casa, en su familia, les pido mis hijos que nos llamen y acudiremos a ese encuentro para hacer posible la mediación, para hacer posible la transformación que requieren.

A veces la transformación del corazón de los hombres es difícil. A veces ascender los deseos de la vida hacia el corazón y poder superar las heridas del pasado, poder superar el miedo, poder superar la inconformidad y la dificultad del presente se hace posible cuando pueden saber que estamos con ustedes. Por eso hoy hemos venido mis hijos a fortalecerlos. Hemos venido a pedirles que no renuncien a lo que quieren, a sus sueños, que dulcifiquen sus palabras hacia ustedes mismos y hacia el prójimo, que se permitan entender que siempre hay diferencias y que cada persona tiene su propia verdad; para aquellas personas que ustedes consideran que están en un error, son ustedes los que lo están y son ustedes su enemigo.

Por eso hoy los invito también como otras tantas veces lo hace mi Hijo a que puedan evitar tener enemigos en la vida y engancharse en la vida hacia esa pelea que significa traer enemigos a su camino.

Los invitamos a que puedan usar esa fuerza del amor y del espíritu en pos de ustedes mismos, en pos de la liberación que requieren, en pos de la verdad para saber que la mayor responsabilidad que ustedes tienen ante Dios es con su propia vida no con la vida y con la felicidad de los otros.

Por eso también mis hijos venimos a ustedes a traerles esta paz del corazón, venimos a bendecir los alimentos que consumirán para que a través de ellos puedan recibir esa fortaleza, esa paz, esa salud, esa reconciliación, esa tranquilidad, esa entereza frente a la vida y se levanten mañana con una nueva cara. Se levanten llenos de esperanza, se levanten llenos de gratitud por la vida que tienen y porque todo en la vida por más difícil que esté, todo tiene un cambio, todo es posible ser solucionado en la Gracia del Padre.

Los bendigo mis hijos y les entrego mi Manto Sagrado para que lo porten siempre, en todo lugar; comosiempre les pido por la paz, porque puedan hacerse partícipes desde el corazón de esa paz para entender que independientemente del color que porten unos u otros en sus creencias o quién está bien o quién está mal, cuando pueden apostar a la paz saben que lo mejor que le puede pasar a un país es que sus hermanos se lleven bien, lo mejor que le puede pasar a una casa es que sus padres, sus hermanos, sus hijos se lleven bien. Por eso al ver este país como su seno, el poder ustedes mirarlo y traerlo a ustedes en la paz del espíritu, esa luz del Padre podrá hacer posible que el camino de este país este dado en esa reconciliación, por eso no dejen de soñar con esa reconciliación entre hermanos, no dejen de soñar con esa comprensión y con la justicia y la verdad que viene desde Dios no para castigar sino para perdonar y para hacer posible que haya equidad, que haya verdad, que haya un proceso válido para que todos se lleven en esa armonía superando lo difícil, las dificultades, los bandos que hubo en el pasado.

Reciban todos ustedes niños de mi corazón mi bendición y la bendición de Dios Padre  Todopoderoso, con todo mi amor el amor de Dios, yo soy María Virgen, muy buenas noches mis hijos hasta siempre.

Jesús de Nazaret

Hermanos con ustedes Jesús de Nazaret al habla.

Es una alegría poder compartir cada semana con ustedes los presentes y en la distancia la reflexión de la vida misma; hoy Mi Señora hacía mención a la dulcificación de las palabras y es tan importante queridos hermanos que se hablen a ustedes mismos con respeto, con cariño, que hablen a los demás con ese mismo respeto y con cariño y que puedan establecer que las cosas que puedan decir puedan estar establecidas en esa verdad pero también en ese proceso que puede ser denso, recio en un momento pero basado en esa verdad que respeta al otro pero que también busca el valor propio.

Por eso mismo es importante que no se dejen llevar por esas palabras de las que en un momento se pueden llegar a arrepentir. Que puedan tratar a su prójimo de la forma como ustedes esperan ser tratados, decirle a las otras personas la verdad de la manera como ustedes esperan que se las dijeran y que puedan realmente trabajar cada vez más queridos hermanos en dejar de mirar lo que los otros pueden estar haciendo con su vida para hacerse responsables de la suya propia y que puedan dejar de mortificarse sobre las cosas que no están pasando y dejen de identificarse tanto con la oscuridad o las cosas difíciles que puedan tener en este momento.

Ustedes verán si se sumergen en todo lo que les hace falta, los mortifica y les hace sentir mal o si realmente pueden empezar a ver cuántas maravillas y cuántas cosas tienen para agradecer al Padre pero no solamente para que agradezcan de dientes para afuera al Padre sino para que puedan hacerlo desde el corazón y puedan realmente retroalimentarse de ese lado positivo de lo que están viviendo.

Ustedes saben queridos hermanos que cuando entren en esa tónica del agradecimiento, en la tónica de desinhibirse de tanta preocupación, en esa tónica de ver la vida como un juego y de ver la vida como una oportunidad de experimentación maravillosa todas esas mortificaciones y problemas quedan a un lado y dejan de apersonarse de ellos para liberarse y verse ustedes mismos bajo esa nueva tónica como personas más tranquilas. Los problemas siempre existirán, siempre va a haber personas que podrían tener una razón para llorar, una razón para estar tristes, una razón para sufrir y mortificarse en la vida. De hecho ustedes tienen muchas razones por las cuales pueden quejarse pero sé que quieren identificarse con la gratitud, sé que quieren identificarse con la esperanza con la alegría, sé que cada uno de ustedes le ha dado una justa medida a esos problemas para que sientan que realmente ninguno de esos problemas, ninguna de esas situaciones es más grande que ustedes y que aunque todo pueda parecer difícil, cuando ustedes pueden entregar esos problemas a Dios y entrar en ese estado de paz y en ese estado relajación y de diversión frente a la vida, se dan cuenta que ese mismo problema al otro día lo ven más chiquito, que ese mismo problema lo ven manejable e incluso con ustedes han tenido problemas muy grandes en la vida y lo miran hacia atrás se aterran de ver cuánto sufrían, cuánto se desesperaban, incluso cuando ven personas en una situación similar a la que ustedes tenían, que ustedes pudieron superar, empiezan a comprender a esa persona y darse cuenta cómo las oportunidades las puede haber para solucionar esos temas y cómo esa persona no lo ve porque a veces es más fácil ver los toros desde la barrera, porque a veces es más fácil ver la viga en el ojo ajeno que en el propio.

Por eso es importante hermanos que puedan pedirle a Dios esa sabiduría. Antes de permitirse dejarse llevar por todas aquellas rabias, angustias, desesperanza, por toda esa sensación que hay en esa voz interna que les hace sentir que la vida de ustedes es un desastre y que es terrible y que no hay solución porque siempre la hay en la Gracia de Dios.

Y a veces queridos hermanos la solución a veces puede ser la misma muerte para que se solucionen las cosas porque si ustedes pueden ver todo tan oscuro, tan negro y tan difícil en la vida pues cuando se mueren descansan ustedes y descansan a quienes dejaron a un lado. Por eso hablar de esa forma más extrema también es una oportunidad de que ustedes dejen de mortificarse en la vida y dejen de vivir bajo esa sensación de agobio que los amarga continuamente.

Cada uno de ustedes sabe que los problemas que han tenido en el pasado se han solucionado cuando ustedes se han rendido, se han solucionado cuando ustedes sienten que ya no hay nada más que hacer y que lo único que tienen que hacer es dejar en las manos de Dios y que Dios haga su santa voluntad y que si eso significa el peor desenlace por lo menos descansar y por lo menos sentir que se liberaron de esas situaciones y se dan cuenta que cuando sueltan realmente esas situaciones difíciles y dejan que las cosas sigan el curso de la mano de Dios empiezan las sorpresas de la vida, empiezan los cambios, las oportunidades y empiezan a fortalecerse al sentir que el miedo que parecía tan grande no tuvo oportunidad con ustedes y ustedes salieron de él más grandes, más fortalecidos, más llenos de decisión frente a ese mañana y saben que ese miedo cada vez tiene menos la oportunidad y esa voz que representa ese miedo tiene menos oportunidad de encerrarlos, menos oportunidad de aguarles la fiesta, menos oportunidad de hacerles ver sus sueños como lejanos y sus sueños como una experiencia de derrota.

Saben que los sueños tienen dos enemigos que actúan en el proceso su pensamiento y  uno de los enemigos es el temor a que el sueño no se realice y otro es el temor a que el sueño se realice y se pierda.

Realmente el sueño auténtico tiene que vencer esos dos extremos de la vida para sentir que cualquiera que sea el resultado tú vas a apostar a tu sueño y te vas a permitir vivirlo.

Hoy venimos queridos hermanos a apoyar sus sueños, ¡todos tienen sueños!, lo que pasa es que muchos de ustedes han decidido vivir los sueños de sus hijos, los sueños de sus hermanos de sus padres, las derrotas de ellos olvidándose de sí mismos y cada uno de ustedes tiene la oportunidad de reverdecer, de rejuvenecer en ustedes mismos y de liberarse del sacrificio que creen que tienen que hacer para que alguien esté bien, porque no hay nada más ingrato que ustedes puedan sentir que otra persona se sacrificó por ustedes y yo nunca lo hice por ustedes.

Por eso siempre les digo queridos hermanos yo los liberé y los libero y los seguiré liberando de la sensación de una culpa y un pecado que pueden tener frente a mí. Ustedes no se sientan culpables por lo que sucedió con mi vida y mi muerte porque fue mi elección y no tienen que sentir que la culpa gobierna su camino para sentir que de cierta manera eso les impide mirar directamente a Dios y sentirse especiales frente a Dios.

Dios ama la naturaleza humana con todo y su complejidad. Dios sabía sabe y seguirá sabiendo hasta dónde puede llegar a ese ser humano en su oscuridad y hasta dónde puede llegar ese ser humano en luz.

Por eso les bendecimos queridos hermanos y les traemos la fuerza del espíritu para que puedan seguir sintiendo el amor a Dios y puedan reconocerse e identificarse con su posición como hijos de Dios.

Bendecimos los alimentos, bendecimos el ejercicio que van a hacer ahora como una forma de conexión con la espiritualidad y la manera que van a tener de poder sentirse mejor, más sanos, poder ordenarle a su espíritu que les permita esa experiencia maravillosa de la vida libre de los procesos duros que han elegido vivir para que puedan aprender de una forma más fácil y puedan superar todo aquello que karmáticamente su espíritu ha querido vivir a partir del dolor como enseñanza y de su propio sufrimiento como enseñanza del dolor que tal vez le hicieron pasar a alguien más.

Hoy venimos también queridos hermanos a que puedan darle la orden a ese cuerpo para que se recupere y puedan sentirse sanos, fuertes para sentirse en tranquilidad con su cuerpo y puedan identificarse en forma sana y armoniosa con él.

Venimos también ayudarles a que todas esas preocupaciones que vienen del pensamiento, los límites de las creencias que gobiernan su mente puedan ser superadas y que esas emociones tristes, difíciles y agobiantes que se han guardado durante tanto tiempo en su ser les permita esa paz, esa alegría del corazón, esa frescura del pensamiento, esa sensación de tranquilidad y de armonía para disfrutar el presente y la vida misma. Les entregamos la paz del espíritu queridos hermanos me voy con ustedes a su casa, con ustedes Jesús de Nazaret al habla muy buenas noches


No hay comentarios.:

Publicar un comentario