Rosario 21 nov de 2024

 

María Virgen

En el nombre del padre del hijo del espíritu santo amén. Mis hijitos y mis hijitas queridas muy buenas noches, soy María Virgen madre de Dios y madre vuestra; reciban mis hijos amados presentes y en la distancia mi bendición y la de Dios Padre Todopoderoso.

 

Hoy les regalo mis hijos de mi alma mi Manto Sagrado que tiene muchos fines; envuélvanse en él cuando sientan que están enfermos, cuando se sientan tristes, cuando se sientan solos, cuando estén apareciendo sus malos pensamientos que les hace perder la gracia y la ilusión de la vida. Les entrego mi Manto Sagrado para que al mismo tiempo imaginen a esas personas que ustedes aman envueltos en mi manto, siempre acudo mis hijos a ustedes para que sientan mi amor, mi presencia y siempre me siento agradecida de esas peregrinaciones, de esas fiestas, de esos momentos en que ustedes comparten con nosotros y permiten que podamos acompañarlos en sus viajes, que podamos acompañarlos también en los buenos momentos de vida.

Hoy bendigo mis hijos esos vientres que han venido esperando hace un buen tiempo una buena noticia de que un espíritu nace a partir de ellos; el regalo de la vida siempre está dispuesto y poder soltarse para que Dios haga posible que esas vidas se gesten, es también parte la intercesión amorosa más allá de lo que puedan sentir que biológicamente está estructurado o de lo que se supone que Dios trae como una respuesta a si se portaron bien. Ir más allá de ser unas buenas personas es entender mis hijos que pueden a la luz de Dios elegir sus caminos, que pueden sentir que aunque no sean enemigos de sus hermanos en la Tierra puedan poner esos límites frente a las cosas que no les están dando tranquilidad.

No es fácil bajar la guardia para dejar de luchar cuando toda la vida han sentido que todo tiene que ser bajo ese esquema, pero hoy les tomamos de la mano para que transiten ese camino nuevo de una vida más tranquila, de dejar de trabajar por necesidad, de dejar de buscar una pareja por soledad, de dejar a un lado el pedir bajo el canje de que ustedes puedan sufrir para que otra persona esté bien.

Hoy pueden sentir mis hijos que su bienestar es importante para Dios, ganen en esa conciencia de que no les va a hacer falta nada, de que cuando han pasado esos momentos difíciles, siempre ha habido una mano amiga y que cuando salgan de esos problemas en los que están, ustedes van también a recibir un llamado en su corazón que en forma gratuita va a ser una manera de ayudar a sus hermanos en la Tierra.

Cuando todos se unen para ayudar a otros sobra la comida, sobran los techos, sobran los colchones, las camas, porque todos se unen para hacer posible que aquellos que sufren y lo han perdido todo puedan recibir su amor a través de eso lindo que es poder compartir; ahora también pídale a Dios que frente a todas esas angustias que ustedes tienen de la vida porque ya han trabajado, porque ya se han cansado, el tiempo que quede en esta tierra para quienes ya han sentido terrenamente que les dijeron que cumplieron su camino puedan seguir hallando razones e ilusiones para estar en este plano.

El amor de ustedes sostiene a sus padres, sostiene a sus abuelos, sostiene a sus hijos, sostiene a sus hermanos y no su sacrificio, por eso envíenle todo el amor a sus seres queridos y por más que sea que puedan verlos mal en un momento esa oración hará posible que se recuperen y que cuando realmente estén preparados para irse encuentren ese camino sin que haya ese dolor extremo, ese sufrimiento o una enfermedad para poder ir a la casa del Padre. Todos tienen ese merecimiento y muchas veces venimos y acudimos a quienes están en esos procesos de despedida para recordarles que no hay nada que temer, para recordarles que si ha habido momentos bellos en esta tierra poder sentir que hay infinidad de amor y de momentos bellos en el cielo será volver y sentir que esa nueva vibración elevada del espíritu, cuando ya no hay materia y no hay un cuerpo hará que ustedes puedan sentir que están más libres que nunca.

Les ayudamos a que puedan sentir este maravilloso cuerpo como este vehículo sagrado, que todos los días cuidamos y bendecimos, que ustedes también puedan hacer esa tarea de cuidarlo y puedan recibir a través del Arcángel Rafael y de la corte médica esa sanación integral sobre lo que duele en sus cuerpos, sobre lo que duele en su corazón y mortifica sus emociones, sobre lo que los hace sentir agobiados en sus pensamientos y por supuesto sobre lo que su espíritu necesita aprender como proceso de vida, ya ahora entendiendo que ya sufrieron demasiado, ya ahora entendiendo que hay caminos distintos, ya ahora entendiendo que si pudieron limitarse en algún momento con el miedo de sufrir y no se arriesgaron a muchas cosas, hoy pueden sentir que tienen la puerta abierta a la aventura y que van a poder salir bien porque estamos cuidándolos, protegiéndoles para que puedan sentir que al vivir y al permitirse cosas nuevas no les va a pasar nada malo.

Muchas veces mis hijos la mejor visión de creer que no van a errar o que no van a sufrir es no vivir nada, pero acuérdense también mis hijos que esta vida es experiencial no contemplativa, que aunque puedan decidir por momentos aislarse de todo estará muy aburridos y estarán sintiendo que estar cerrados sin hacer nada para que su espíritu les reclame que se muevan y hagan una vida, que se muevan y se arriesguen a amar que se muevan y se arriesguen a contemplar sueños porque se van a dar cuenta que esa forma de sentirse hará posible que ustedes sientan que valió la pena vivir y que seguirá valiendo la pena explorar la vida, porque no importa cuántas experiencias hayan vivido y ustedes puedan sentir que ya lo han vivido todo, Dios puede sacar un As de la manga para darles un nuevo sentido, una nueva razón de vivir y que cada día sea una hermosa aventura.

 

Reciban todos ustedes mis niños de mi alma la bendición de su vida, de su ser, de sus proyectos, hoy bendecimos los alimentos que van a consumir, bendecimos sus hogares, sus techos, sus seres amados y todo lo que ponen bajo nuestro cuidado e incluso aquello que pueden olvidar pero que también está bajo el amparo divino.

Reciban mis hijos mi bendición y la de Dios Padre Todopoderoso, con todo mi amor,  yo soy María Virgen muy buenas noches hasta siempre.

 

Jesús de Nazaret

Buenas noches hermanos en la gracia de mi Padre Jesús de Nazaret,

¡Qué alegría es poder contagiar! Contagiar ilusiones, contagiar razones de estar en esta tierra y cuando se sientan aburridos ¡llámennos! estaremos llamando gente para que los hagan sentir mejor, estaremos tocando corazones para que ustedes puedan saber que si están pasando por una mala hora y han pedido esa ayuda llegarán personas de la nada y acudirán a ustedes para traerles ese calor humano pero también traerles ese mensaje del Padre del cielo que les hace recordar que nunca están solitos y les hace reavivar los sentimientos para volver a conectarse en la calidez de quienes les rodean.

Es como volver a sentir que el amor los alimenta, el amor tiene dos vías, ustedes dicen yo amo a todos, yo amo a mis hijos, amo a mis padres, a mi patria, amo mi trabajo, pero también hay que aprender  a dejarse amar.  Permitir que esa energía del amor llegue a ustedes es hermoso, maravilloso.

Durante no más de un siglo el ser humano ha celebrado la vida de los hermanos, hay un cumpleaños feliz, y es un día en el que se celebra que ustedes están aquí y son felicitados por muchas personas, pero ¿Por qué sólo un día hermanos? ¿Por qué no podemos celebrar los no cumpleaños? ¿Por qué no celebrar que cada día es hermoso, maravilloso? Y permitir que cada día sea especial y bonito y puedan celebrar que ustedes están vivos.

Hoy los acompaño para que ese sentimiento de plenitud y de gratitud que suele aparecer de otros hacia ustedes, también llegue de ustedes a los otros para que puedan ver la vida de otra manera, hacia poder sentir que esa gratitud, hará posible que todo eso bonito se fije, cuando se les olvida lo bonito que tienen en la vida ello desaparece y se dan cuenta, alimenten a través del agradecimiento su relación con sus padres, alimenten esa energía diciéndole a sus padres “Gracias porque me diste la vida, gracias porque hoy es mi cumpleaños e hiciste todo lo que estuvo en ti para que yo naciera y gracias por esos otros días de no cumpleaños en los que puedo compartir contigo y puedo saber que todos los días estoy aquí papá, estoy aquí mamá, Gracias a ti”

Por supuesto que los padres se equivocaron, por supuesto que hay cosas que necesitan ser sanados de su parte respecto a lo que ellos hicieron en su ausencia o en su presencia, pero es el momento de sentir que pueden sanar esa herida, que los ayudamos a que sanen esa herida para que se queden con lo bonito de cada persona, ver lo malo de cada persona es muy fácil; es muy fácil llenarse resentimientos, llenarse de crítica, llenarse de autocrítica, llenarse de dolor, pero logran elevarse hermanos para darse cuenta que muchas veces los demás también maximizan lo que ustedes hayan podido equivocarse y lo señalan con el dedo y tampoco los dejan en paz y a veces sienten que ya fue suficiente de una condena, que ya fue suficiente de culparse, que ya fue suficiente de intentar volver al pasado a cambiar algo que no pueden cambiar.

Ahora también sentir que ha habido equivocaciones es algo interpretativo, cuando a un niño pequeño la mamá no lo deja salir a la calle porque no está listo, ese hijo siente que esa mamá no lo quiere, pero cuando ese hijo crece y se da cuenta de cuántas cosas la mamá lo protegió porque ese hijo aún no estaba listo, ese hijo vuelve y agradece y le dice a esa mamá Gracias porque esa noche no me dejaste salir a la fiesta, Gracias porque no estaba listo y por eso a veces en el papel de las decisiones de los padres pueden ser los malos también para los hijos y por eso juzgar es fácil, perdonar no lo es tanto y por eso trabajar en el camino del perdón es poder ver las cosas en la perspectiva de qué es lo que me duele, qué es lo que no le perdono a esa persona y qué es lo que no me perdono a mí mismo o qué me cuesta tener la humildad en el corazón para pedir perdón y ese camino del perdón es liberador, es sanador, ese camino del perdón hace que ya no haya más que analizar en un momento porque ya lo que pasó fue superado, fue sanado, fue comprendido, e inclusive eso que pasó hermanos fue construido hacia algo positivo que pudieron verlo de otra manera, porque como les hemos mandado a decir muchas veces, detrás de cada cosa mala siempre hay una bendición y algo bueno y como dicen perder es ganar y quiero que no se acostumbren a perder, pero sí que aprendan de lo que han perdido para que no vuelva a pasar.

Cuando ustedes revisan lo que les ha dolido y aprenden de eso pueden decir Ya no necesito que esto doloroso vuelva a pasar ya lo tengo claro quiero vivir la experiencia sin esa parte dolorosa, quiero vivir esa experiencia sin esa parte que me tortura el espíritu y venimos a darles esa Gracia de Dios porque Dios en su gracia los perdona porque Dios los comprende y en su gracia Dios le da la oportunidad a ustedes de que también puedan perdonar a otros y esa es la gratitud con la que pueden sentir que en un momento pueden ver a esa persona que más te hizo daño y ya no sentir nada nada negativo, que puedes ver a esa persona que un día te hizo sufrir y ya sencillamente ya no volver a darle la vuelta a lo mismo, lo recordarás pero también sentirás que ya no te afecta y en otros casos ya ni siquiera lo recordarás porque pasará a ser como otros tantos eventos que han sucedido en la vida y ustedes ya nos lo recuerdan.

Hoy los llenamos del perdón, les recordamos la importancia de sentirlo en su ser,  y cómo el perdón va a la gratitud y a la plenitud para que cuando quieran pedir algo más, sientan totalmente que todo esto hoy lo deben mirar de otra manera y hoy pueden sentir que ya pudieron perdonarse a ustedes mismos, que es el perdón más difícil, perdónense porque no son perfectos, porque en su momento hicieron las cosas con rabia, hicieron las cosas con miedo, hicieron las cosas como les dijeron que tenía que ser, con la mejor intención de su parte o a veces desbordados de energía, porque estaban dolidos, ahora comprenderse a ustedes mismos hará que ustedes también se liberen de ese pasado y de esa tortura y hará hermanos que puedan sentir que con esa misma actitud cíclica que pasaban de problema en problema, de enemigo en enemigo, de dificultad en dificultad, ahora están abriendo un camino pleno de bendiciones y un camino pleno de todo lo lindo que no nos cansaremos que les debe pasar y que sus ángeles lo repiten todo el tiempo, donde son merecedores de todo lo bueno.

Dios los bendiga queridos hermanos  en la gracia de mi Padre, Jesús de Nazaret muy buenas noches.

Meditación de Liú    Buenas noches, Yo soy Liú, en esta noche fría donde los huesos empiezan a necesitar movimiento vamos a girar en círculo de sus hombros hacia atrás, vamos a hacer un pequeño ejercicio que los prepare para una noche de descanso

Llevamos sus hombros adelante y vamos incorporando codos como si remáramos hacia atrás, esos codos como si remáramos hacia adelante; vamos estirando el cuello a izquierda y derecha y permitimos que esa atención de lo que cargamos en el cuello, en la espalda, se vaya disolviendo; llevan su cabeza adelante y atrás en la respuesta de que sí, si quieren chocolate con pan y permiten que se vaya liberando esa tensión.

Dejan caer la cabecita adelante y empiezan a hacer círculos de cabeza por la izquierda y no se les olvide respirar profundo, dejan caer su cabecita adelante, hacen el círculo de cabeza por derecha, dejan caer su cabecita delante levantan su cabeza y empiezan a llevar adelante y atrás los hombros, uno a uno, izquierdo adelante, derecho atrás y siguen dejando que se libere esa tensión de la espalda.

Respiran profundo subiendo los hombros y vigorosamente sueltan el aire de nuevo, ponen sus manitas en dirección a la tierra y le entregan a la Madre Tierra…. (sigue el video)

Respiran profundo para volver a este espacio les dejamos esta buena energía nos llevamos La de ustedes yo soy liu.