Rosario 18 Abril de 2024

 

María Virgen

Mis hijitos y mis hijitas queridas buenas noches, yo soy María Virgen madre de Dios y madre vuestra, reciban todos ustedes presentes y en la distancia mi bendición y la de Dios Padre Todopoderoso. La bendición de sus familias, de sus sueños, de sus hogares, en el nombre del Padre del Hijo del Espíritu Santo, Amén.

Los bendigo mis hijos para que continuamente reciban en su ser la sabiduría del amor de Dios, para que se ilumine el Espíritu Santo en sus corazones y puedan volver a estar en ese estado de tranquilidad y de calma que nunca debe ser robado por las condiciones complicadas de la vida.

Queremos que sientan que todo lo bonito es posible a partir de poder parar hoy en el camino para respirar profundo y hacer un balance sobre todo aquello que ya no quieren en su vida pero también sobre la comprensión de todo lo vivido.

Los envuelvo en mi Manto Sagrado para que sientan que han hecho bien su tarea, para que recuerden que nadie los está juzgando por nada, que mirarse a ustedes con el ojo retrovisor de cómo debieron de haber hecho las cosas para regañarse, para torturarse, no tiene ningún sentido; aprender a usar el pasado a favor permite que las experiencias puedan darles el poderío suficiente del amor de Dios para elegir en la libertad que Dios les ha dado para ustedes y que desde su posición elevada y amorosa puedan pedirle con esa misma contundencia a Dios que quienes les rodean también puedan ser envueltos en esa luz protectora y aunque esos espíritus puedan ser rebeldes, aunque esos espíritus hayan elegido condiciones difíciles, ese amor de ustedes los envuelva para que no tengan que vivir en las condiciones más extremas y dolorosas porque el amor de una madre también protege, porque el amor de un padre también ilumina la vida de un hijo y le da un nuevo sentido para seguir, para no sentirse solo y para reconciliarse.

Hoy los envuelvo con mi Manto Sagrado para que sean sanados integralmente, para que puedan confiar en la sabiduría de quien lo ha creado todo y puedan sentir mis hijos que este acompañamiento que les hacemos tiene como sentido nuestra propia evolución desde el amor y la satisfacción que es acompañarlos, por eso no nos cansamos de ustedes, por eso no son una molestia para nosotros, tenemos la comprensión y la compasión suficiente que les debe llevar a ustedes a sentir en nosotros unos aliados y nunca seres que venimos a engañarlos o a obligarlos absolutamente a nada; a veces pareciera que no estamos ahí porque estamos esperando que se aclaren sobre lo que quieren porque en otros momentos sabemos que ustedes mismos necesitan un poco más de la contundencia para permitirnos entrar en su vida pero también entendemos que en otros momentos tienen el derecho de reclamar nuestra atención, de reclamar nuestro cuidado y que nada de lo que puedan sentir en forma negativa en un momento nos ofende o nos aleja de ustedes porque siempre estamos ahí y lo bonito de caminar juntos es saber que desde ese amor también los envuelvo en mi gracia para que todos estos sueños que tienen de lo material en cualquiera de las etapas de la vida o en las condiciones que quieren lograr, se den como un regalo para ustedes, más allá de si trabajaron con dedicación, más allá de cuánto se han esforzado porque Dios regala la vida, regala el aire, sin que ustedes tengan que hoy estar sometidos de alguna manera o de que puedan estar observados en el ojo de Dios en si lo hicieron lo suficientemente bien.

Hoy oro porque haya entendimiento entre los hombres, entre mis hijos porque esas diferencias que están teniendo sociales, esas diferencias raciales, esas diferencias de sexo, se vayan y puedan ustedes entenderse en forma tolerante donde todos tienen un derecho y donde todos tienen un lugar para estar en este mundo.

Hoy los protejo mis hijos para barrer de su vida y de su casa todas aquellas situaciones dolorosas que ya cumplieron una tarea para que su corazón esté limpio, para que sus espacios estén llenos de luz, para que puedan estar despejados en sus ideas y puedan estar todos los días más claros sobre lo que quieren y por supuesto sobre lo que no quieren en su vida y que incluso puedan recibir la luz que requieren para ver con claridad lo que hoy se ve borroso, lo que hoy se ve complicado y lo que hoy vuelve a darles vuelta en la cabeza para sentirse torturados entre si lo hicieron bien o no o si eso que desean va a pasar.

Hoy los acompañamos para que sientan que todos estamos a favor de sus sueños, que todos estamos a favor de su salud, de su bienestar, que todos estamos a favor de su comprensión y que movemos los hilos en la corte de los ángeles que están haciendo ese correo amoroso entre los hombres para que se abracen entre ustedes y puedan reconocerse como hijos de Dios y como hermanos.

Reciban mis niños la bendición de los alimentos que consumirán en esta noche, la bendición del agua, la bendición de su sueño en Padre,Hijo y Espíritu Santo con todo mi amor yo soy María Virgen muy buenas noches mis hijos hasta siempre

Jesús de Nazaret

Buenas noches en la Gracia de mi Padre Jesús de Nazaret

Feliz de poder compartir con ustedes este espacio cortico pero sustancioso, un poco como en enigmas, al ser humano le fascinan los enigmas y creo que eso es lo bonito que a veces cuando hablamos en clave, ustedes saben a quién le estoy hablando, ustedes saben qué es lo que les estoy diciendo y bueno algunos son más crueles para decir al que le caiga el guante que se lo chante pero, pues realmente nunca el objetivo es herir con la verdad.

La verdad de cada uno es muy suya, muy personal y se trata de que cada uno encuentre una verdad que lo haga sentir en paz, que lo haga sentir tranquilo y que lo haga sentir cumpliendo el objetivo principal de esta vida que es que esta experimentación les dé bienestar, que esta experimentación les dé alegría y que sigan dejando atrás la visión dolorosa, complicada y difícil de la vida, porque si van a meterse en condiciones de nuevos retos, si van a empezar nuevos proyectos háganlo bajo la visión de una aventura, bajo algo que tiene un objetivo de diversión, y no sobre algo que tienen que hacer en forma difícil y dolorosa porque todo termina siendo un riesgo.

Cuando se casan, cuando se organizan, cuando se separan todo esto debe ser hecho en la armonía de su ser interno para sentir que las razones que ustedes se dan son válidas desde lo que les dé esa Paz, esa armonía y esa tranquilidad; igual saben hermanos que estamos acompañando cada uno de sus sueños, de sus procesos, de los procesos de sus hijos, de sus seres queridos, para que en la luz de Dios se encuentre el final necesario, la prolongación de los tiempos cuando sea necesario pero también el poder usar siempre el tiempo a favor.

Dios siempre usa ese tiempo a favor, porque aunque ustedes a veces sientan que la demora de Dios es para molestarles la vida o la demora de Dios es confusión realmente en momentos frente a esa certeza del Padre el momento perfecto es saber que todo se está cultivando para ser dado en un momento mágico como ustedes lo requieren y como ustedes lo necesitan en su bienestar y recuerden que hay personas que les gusta ir por el camino más difícil porque así sienten que la vida es más armoniosa y les gusta ir por las peñas, ir por los caminos más arriesgados.

Pero también la vida les empieza a enseñar que hay caminos más seguros y empiezan a sentir que en esa aventura de la vida pueden disfrutarla sintiendo que no ponen en riesgo su vida, que no ponen en riesgo su libertad, que no ponen en riesgo su estabilidad familiar, porque también dentro del autocontrol podrán encontrar la paz y la armonía para saber en qué momento también deben abstenerse de algo o en qué momento las cosas también terminaron en un ciclo que ya no tiene sentido seguir viviendo de esa manera.

Hoy les entrego mi amor de hermano, mi sanación para ustedes y les otorgo sanación igualmente a aquellas personas por las que ustedes están orando; recuerden que ustedes son el milagro mismo y que cuando digo que son El milagro mismo es que me encanta que ustedes puedan contar su historia, compartir esos milagros con sus hermanos, no con el miedo a obtener la envidia de sus hermanos sino en una postura elevada en que les dirán: “Sí esto funcionó para mí, sí pude sanarme, sí pude solucionar el problema sin saber incluso cómo”, pues ustedes también podrán lograrlo y la creación conjunta de todos como seres humanos hoy más que nunca en su evolución, tiene el sentido del bienestar, y que cada generación pueda disfrutar los beneficios de lo que dejó las generaciones anteriores y que de la misma manera ustedes puedan dejar un mundo mejor pero que también no sea a costa de sacrificios, a veces van a acierto y error y sabemos que los errores no lo son porque fueron una alternativa que en un momento no tuvo el resultado que ustedes querían pero que fue sencillamente algo que como contraste pudo también darle un sentido profundo a la vida.

Así que prepárense para lo mejor, ya no para estar mal, ya no para estar enfermos, ya no para estar en condiciones dolorosas, sino que se preparen para poder tener esa vida bonita que durante tantos años han pedido, esa vida bonita que desde siempre Dios ha querido para ustedes y que por supuesto la merecen como hijos de Dios y no porque un día sufrieron y la pasaron mal, sino porque comprendieron que hay caminos hermosos y sencillos de una abundancia, lo bueno y de una compasión de Dios manifiesta en todas las oportunidades de disfrutar cada momento y de disfrutar los pequeños y los grandes momentos de la vida.

Dios los bendiga hermanos muy buenas noches en la gracia de mi Padre Jesús de Nazaret.

Meditación de Liú Buenas noches, muy buenas noches yo soy Liú.

Vamos a sentarnos de una forma en que nuestro primer chakra esté en conexión a la Tierra y vamos a balancearnos adelante y atrás en péndulo, permitiendo que este movimiento de péndulo equilibre nuestro plano cartesiano norte-sur, le pedimos a la madre tierra que nos permita ese equilibrio de nuestro plano cartesiano norte-sur y encontramos nuestro propio eje.

Sentimos que en forma natural paramos este balanceo y que encontramos nuestro punto Único y vamos izquierda y derecha para balancear el plano cartesiano Oriente-occidente y permitimos que en este pequeño balance la madre tierra nos encuentre nuestro punto único, nuestro punto irrepetible y nuestro punto maravilloso de equilibrio.

Sentimos cómo podemos estirar desde nuestro pecho la energía para ampliar nuestro aura con esta manita derecha hacia adelante y hacia la derecha y hacia atrás traemos energía de lo que hemos recogido del mundo para llevarlo a nuestro pecho, sentimos que nos conectamos desde esa energía material, desde esa energía masculina con nuestro entorno.

Con nuestra mano izquierda expandimos la energía de nuestra aura hacia el frente y la llevamos hacia la izquierda y hacia atrás y traemos esa energía de lo que recogemos del mundo y lo llevamos al pecho para equilibrar lo que hemos recibido en amor, en compañía, en este sentido de pertenencia y sentimos cómo se equilibra en nosotros desde nuestro corazón el dar y el recibir.

Unimos las manitas al frente y hacemos que la manita izquierda vaya hacia abajo, la derecha hacia arriba para equilibrar la energía del arriba y de abajo; unimos la energía en el frente, en el pecho de nuevo y ahora la manita izquierda sube la derecha baja, encontramos las palmas y armamos esta energía en nuestras manos para acunarla y llevarla a nuestro pecho de nuevo; estamos en la conciencia de que pertenecemos a una hermandad pero que el hecho de pertenecer no nos hace divididos, nos declaramos como seres únicos en creación amorosos de lo que somos permaneciendo en nuestro corazón con una luz verde sanadora, con una luz rosada llena de amor incondicional que vibra y nos permite conectarnos con la energía del amor, el amor a nosotros mismos, el amor con el que podemos compartir a los demás y el amor que podemos recibir.

Nos declaramos dando, nos declaramos recibiendo con humildad en el corazón más no con humillación para sentir que si permitimos que alguien nos ayude podemos ser conectados con ese amor y con el propósito que otra persona tiene para ayudar y para servir.

Abrimos la energía del servir a nuestros hermanos sin la obligatoriedad de lo que se tiene que hacer sino con la satisfacción de poder desde nuestro amor entregar lo mejor de nosotros en equilibrio; nos conectamos con esta energía en equilibrio poniendo las manitas enfrente en actitud de oración para servir y ser servidos, para entender que se necesita una alianza entre ese dar y recibir y que esta codependencia amorosa permite que tú entregues tu amor para que alguien lo reciba y que otra persona de su amor desde su actividad desde sus diferentes puntos para que tú también lo puedas recibir en esa humildad y en esa gratitud de saber que hay muchas personas a  tu disposición…

… continúa…. Mira los videos en el canal youtube….  magio ángeles ii