Rosario 24 OCTUBRE de 2024

 

María Virgen

En el nombre del padre del hijo del espíritu santo amén. Mis hijitos y mis hijitas muy buenas noches soy María Virgen madre de Dios y madre vuestra; reciban mis hijos amados presentes y en la distancia mi bendición y la de Dios Padre Todopoderoso, la bendición de sus hogares, de sus familias, de sus proyectos, en el nombre del Padre, Hijo y Espíritu Santo.

 

Hoy los bendigo mis hijos con todo mi amor de madre para que puedan hallar en su ser la tranquilidad de todo lo que han hecho, de todo lo que han vivido y la confianza en que todo aquello que los tortura hoy tendrá la transformación para hacer un problema solucionable.

Hoy han aprendido a entregar todo lo que ustedes no pueden manejar por sí mismos y saben que cuando comprenden que están en un camino de hermandad en esta tierra, siempre habrá una solución y siempre habrá una persona de buen corazón dispuestos a ayudarles; que cuando algo les corresponde a ustedes para ayudar a alguien van a estar en el momento correcto y en la condición correcta para ayudar a quienes lo requieren y que cuando igualmente hay algo que supere su naturaleza humana de lo que puedan hacer, la intercesión divina estará haciendo cambios y milagros en su vida y transformando aquello que durante mucho tiempo ha sido la fuente de su tortura para empezar a volverse una realidad amorosa que van a poder manifestar como algo en la concordancia del amor de Dios.

Hoy los libero de esa angustia de todo lo que ha de venir y de ver este mundo como un mundo corrupto, como un mundo difícil; es difícil poder creer que una persona puede hacerle daño a otra, a un niño, pero poder entender que en esa decisión ha habido una voluntad mutua. Es algo que hace que este mundo funcione y evolucione en las experiencias de cada ser humano, pueden mirar que en esas historias ajenas ustedes pueden decidir que eso no pase en su mundo y pueden decidir que la raza humana evolucione también dentro de una conciencia para que ya no necesiten hacerse daño los unos a los otros.

Será posible ir encontrando un bienestar donde vayan creciendo y puedan sentir que las condiciones bárbaras están cediendo para empezar a hacer una sociedad más civilizada; los acompañamos para que puedan sentir que nunca hay un juzgamiento para ustedes, queremos que no solamente oren por las víctimas, que oren por los victimarios porque muchas veces esos victimarios ya fueron unas víctimas y ya tuvieron mucho dolor en su ser lo cual los hizo sentir que el único camino que podían seguir era que el camino de la venganza, era aquel camino de la locura y la inconsciencia para hacerles a otros en el dolor lo que otros les habían hecho.

Oren y no juzguen mis hijos porque creo que ustedes no querrían estar en ninguno de los dos escenarios, ni en el escenario de la víctima, ni en el escenario de victimario y por eso cuando se salen del juzgamiento empiezan a darse cuenta que su amor en compasión hace que puedan mandarle luz a esas personas que han estado en un lado de la balanza o del otro.

Hoy queremos que sean compasivos en su corazón y en estos momentos en que fluye la luz y la oscuridad como parte de un proceso divino, donde el cielo y la tierra se unen para traer la armonía de lo que está bien y está mal, sientan que aunque las fuerzas del mal puedan existir, sean también algo creado por la voluntad de Dios, puedan ser protegidos para que no sean esas oscuridades, esas fuerzas malas   las que puedan doblegar su mundo o que ustedes puedan aprender en las condiciones más extremas de dolor y sufrimiento porque pueden elegir que las cosas sean más fáciles y fluyan para ustedes.

Hoy bendecimos mis hijos el agua, los alimentos, bendecimos este maravilloso mes de octubre donde los niños juegan a la muerte, donde se permiten disfrazarse, donde se permiten abrazar esa oscuridad de una manera diferente para entenderla y para comprender que también en esos escenarios más difíciles y más oscuros estamos para ustedes y los llevamos hacia esa luz.

Reciban todos ustedes mis niños de mi corazón mi bendición y la de Dios Padre Todopoderoso, con todo mi amor, con toda mi alegría, con la bendición de los alimentos que consumirán en esta noche, con la bendición de sus hogares, de sus sitios de trabajo, de sus relaciones, de sus proyectos de vida yo soy María Virgen muy buenas noches mis hijos hasta siempre.

Jesús de Nazaret

Buenas noches hermanos en la gracia de mi Padre Jesús de Nazaret,

Creo que ustedes conocen hermanos los escenarios de cuándo están perdiendo el control, de cuándo saben que hay una voz adentro que les está diciendo lo mismo que ya conocen, que ustedes no pueden, que ustedes son malos, que nada va a cambiar, que la vida es terrible, que ustedes no son amados, no son comprendidos, todos esos insultos personales que creo que difícilmente les darían a otras personas y por eso entender que dentro de cada ser humano camina esa propia oscuridad, puedan ustedes sentir que pueden parar en un momento para que eso ya no los represente y si ya esa voz oscura ha sido tan familiar puedan decirle a esa voz oscura “Me has repetido tanto lo mismo, me has torturado durante tantos años, me has amenazado durante tantos años, me has dicho durante tantos años cosas feas y no has podido conmigo ahora siento que ya tú no vas a tener más poder sobre mí” y cuando ustedes miran esas series y esos esos dibujos animados que traen esas historias tan importantes, encuentran una película donde los niños ya no le tienen miedo al coco y donde él empieza a perder un poder y empieza a asustarse porque la labor del susto es asustarlos y resulta que cuando ya no tiene poder esa fuerza, se diluye, se va, se cansa, porque esa era su tarea.

 

Ustedes traen a su mundo personas que vienen a confrontarlos para hacerlos fuertes y lo hacen de las peores formas, de las formas más duras, más difíciles y creo que cuando esas personas ven que ya ustedes no le hacen caso, esas personas se alejan de su vida como llegaron, y fíjense que cuando ustedes dejan de ponerse ese rótulo, dejan a un lado esa sensación de ponerse en el poder de otros para para ser la víctima de bullying y seguirse ustedes haciendo el peor bullying, esa condición nueva de decir eso ya no me representa, ya no vivo el bullying, el bullying en un momento fue una forma de fortalecimiento para mí dura, difícil, torturó mi vida pero ahora quiero vivir tranquilo, ahora quiero vivir feliz pues empiezan a sentir que ya no habrá personas que vienen a darse el derecho personal de hacerles daño y por eso creo que hoy también saben que ustedes lo permitieron y que si alguien vino a hacerles daño una parte de su ser lo decía ahorita mi Señora, le dio el permiso, dejaron que otros jugaran con ustedes, dejaron que otros les mintieran porque no pudieron parar un momento para decir realmente la verdad está dentro de mí y claro en momentos ustedes son niños son inocentes, no tienen las herramientas suficientes para saber si alguien dice la verdad, para saber si una persona viene con buenas intenciones o con malas intenciones, pero también saben que en el camino ustedes pueden decidir que eso no les vuelva  pasar,  que si ya lo vivieron una vez para qué repetirlo, que hay un adagio que dice que “Si la primera vez tú me engañas será tu culpa y la segunda vez será la mía” y por eso cuando algo se repite hermanos es porque no lograron aprender de esa primera experiencia, porque no supieron poner límites en su momento, porque perdieron su confianza en ustedes mismos y dejaron que fueran los otros los que hicieran con ustedes lo que quisieron.

 

Ahora si una persona sigue haciéndoles sentir rabia aunque no esté ahí, si una persona ustedes la siguen recordando con dolor y sufrimiento esa persona sigue teniendo poder en su vida así no la hayan visto por años, ¿por qué no dejar ir esas personas? ¿por qué no ir y rescatar el corazón con el que alguien se quedó para empezar a tener su corazón completo? ¿por qué no volver a permitirse reír? ¿por qué no permitirse jugar este mundo de una manera diferente a lo que lo han jugado hasta este momento en condiciones extremas?

 

Hoy vengo a que no haya un lugar en su vida donde Dios no esté, ni siquiera en esas oscuridades porque una cosa que más los asusta es ¿cómo el Maestro sabía que yo había pensado mal? ¿cómo el Maestro podía saber que yo hice todas esas cosas o tuve todos esos intentos horribles en mi vida? y es porque incluso en medio de las oscuridades estamos con ustedes y no los juzgamos, los comprendemos, los apoyamos para que puedan sentir que les tomamos las manos para acompañarlos incluso en los momentos más oscuros y es difícil poder creer que en estos momentos oscuros no hayamos hecho nada, pero es que Dios deja que pasen las cosas hermanos porque en la experimentación de la vida Él siempre sabe que por más traumático que sea un evento, por más malo que sea algo que les pase, hay un bienestar mayor,  por eso ustedes se encuentran que muchos maestros les dicen que los males guardan bienes y los guardan de una manera en que cuando aprenden de esos males afloran los bienes.

¿Cuántas veces hermanos por ver todo lo malo de una persona no vieron otros escenarios de ese ser? ¿Cuántas cosas que pudieron haber aprovechado de sus padres ,de su familia, de sus parejas dejaron de verse por un error que esa persona haya cometido? porque muchas veces lo malo borra todo lo bueno y sienten que lo único que una persona puede hacer son maldades o desastres y cuando ustedes están ensañados con alguien por supuesto que es difícil verle algo bueno a alguien que les hizo daño, que es difícil poder soltarse de ese pasado pero también creo que en un momento es darle a su ser la libertad para seguir adelante y decir esto ya no me representa ya no tiene un poder en mí y ya no va a volver a pasar nunca más y nunca más voy a recrear en mi mente las palabras tóxicas de esa persona, no voy a seguir recreando en mi mente el dolor y sufrimiento y especialmente pediré ayuda para que las heridas que han quedado impresas en mi cuerpo, en mi genética en mi forma de amar ya no duelan más.

 

Los acompañamos hermanos para que sientan en esta compañía la alegría de la vida como lo decíamos ahora en una oración, el darse cuenta que por el enfocar la atención en una cosa mala, se pierden tantas cosas bonitas que disfrutar, por eso quienes realmente comprenden la vida y lo importante que es cuidar de su cuerpo comen a pesar de que lloren, duermen a pesar de que puedan estar tristes porque recuperan esa sensación propia de que hay que cuidarse, de que hay que amarse, de que si ustedes se cuidan y se aman de que si ustedes tienen un autocuidado no en el miedo de tantas cosas malas que pueda pasarles o de cuántas enfermedades puedan tener, el autocuidado se vuelve maravilloso porque es su propio consentimiento para dejar que otros vengan a consentirlos, sabemos que a veces es difícil entender la barbarie humana, entendemos que es difícil poder saber por qué una persona que pertenece a una sociedad y que aparentemente es una buena persona pueda enloquecerse en un momento y cometer actos barbáricos como quitarle la vida a una niña, una vida a alguien, pero siempre quiero decirles hermanos que un malo no puede hacer mal sin que el otro lo acepte y de que el otro lo quiera hacer y para simplificarlo un día usted jugaron policías y ladrones y para que hubiera juego unos tenían que jugar como policías y otros como ladrones y parece frío pero realmente no lo es; son decisiones espirituales que desencadenan movimientos alrededor de esas personas que sufren. Hay niños que sienten que fueron más importantes muertos que vivos, que sus papás los quisieron más cuando ya no estuvieron que cuando estaban vivos y son decisiones hermanos que van más allá del bien y el mal.

 

Dios los bendiga con todo el amor de Dios para que seguíamos amando a la Madre Tierra y creamos en ella y creamos que ella es más viva y más sabia de lo que ustedes se imaginan porque lleva eones más que ustedes.

 

Dios los bendiga queridos hermanos yo soy Jesús de Nazaret muy buenas noches.

 

Meditación de Liú    Buenas noches, Yo soy Liú, vamos a permitirnos cerrar nuestros ojitos, a respirar profundo a conectarnos con todo nuestro amor para ir y pensar en cada persona que amamos y visualizarnos frente a esas personas que amamos dándoles un abrazo, diciéndoles cuánto les amamos, dándoles las gracias porque son parte de nuestra vida.

Sentimos como en esa compañía nos llenamos de gratitud, nos vamos llenando de comprensión, estamos haciendo un proceso de reconciliación para ser embajadores de buena voluntad para entregarles a estas personas en nuestro abrazo especialmente a ellas que están sufriendo una pérdida, que están en condiciones difíciles para decirles con nuestro abrazo, con nuestra voz susurrante en su oído todo va a salir bien.

Respiramos profundo y nos llenamos de todo un fortalecimiento en el amor donde nos sentimos rodeados de una luz violeta que transmuta la energía de lo negativo hacia lo positivo, vamos a ir a buscar esas personas que han sido nuestros enemigos, que más nos han hecho daño, con quienes en este momento tenemos un conflicto de alguna especie, para poder decirle a esa persona “Gracias porque me has enseñado. Gracias porque aunque me has enseñado a través del dolor y el sufrimiento hoy puedo sentir que puedo discernir fácilmente para ya no creer en todo lo que me dijiste negativo, porque en un momento sentí que todo eso era mi verdad, entendí que si tú podías tener un punto de vista de mí y me haces daño es porque yo te creí y pensaba lo mismo que tú, ahora entiendo que no puedo tener y no quiero tener un maestro por dolor, te dejo ir de mi vida y me libero de la rabia, de la impotencia, de la angustia, del deseo de venganza, del pánico, de todas esas cosas que tu actitud me hizo sentir que me robó mi alegría, que me robó mi paz, que me robó mi tranquilidad, porque ahora esto ya no me representa. Te perdono porque sé que fuiste inconsciente y no supiste cuánto daño me hiciste y te pido perdón si yo empecé primero, si de alguna manera te di el poder para que tú pudieras ser el malo, pudieras hacerme mal, porque ahora ya no te doy ese poder y porque ahora entiendo que jugué tu juego y yo también jugué ese juego de víctima. Me perdono estar en esos dos extremos de la balanza y sentir que para liberarme de todo el daño que me hiciste tengo que pagarte por la misma moneda, porque te quiero ver sufrir, porque te quiero ver mal, porque quiero que sufras todo lo que me hiciste en carne propia, porque ahora siento que eso no me sirve de nada.

Sé que en algún momento vas a hacer conciencia de alguna manera pero ahora me libero de ti, te perdono y me perdono, te comprendo y me comprendo y aunque no comparta todo lo que tú has hecho te dejo ir en paz y me quedo en paz para vivir un nuevo escenario con personas que me respeten con personas que me valoren, con personas que tengan una actitud diferente conmigo, me libero para poder sentirme conectado con mi felicidad y con las reglas como yo quiero vivir en adelante, tratar al prójimo con el respeto y el amor que el prójimo merece, pero también exigir que los demás me traten con el respeto y el amor que yo me merezco.

Me imagino mirando un espejo donde me veo a mí mismo y me pido perdón por las veces en que me dejé llevar por ese maltrato y donde me maltrate yo tanto donde me desfiguré en afirmaciones negativas, donde me desfiguré en ponerme rótulos negativos que no me permitieron ver que soy más allá de un título, más allá de un letrero, más allá de un prejuicio, que soy un ser completo donde reside en mí todas las posibilidades de lo bueno y de lo malo y me perdono por eso; me perdono porque comprendo que lo malo es un título y que lo bueno también lo es, entiendo que voy más allá de los títulos al bienestar de mi ser y permito que ese bienestar empiece a regir mi vida, que ya no voy a sacrificarme, que ya no voy a quitarme mi paz para dársela otros sino que voy a compartir mi Paz donde yo permanezca en mi paz y le regale mi paz a otros.

Llevo mis manitas enfrente en actitud de oración para fijar este decreto nuevo en el cual me libero para no guardar en mi ser odios y dolores continuos que sigan en mi ser y en mi corazón donde me libero de personas a quienes les echo daño y ellos me han hecho daño a mí dejándolos ir en paz y quedando yo en paz y donde empiezo a ser el centro de mi propia vida para disfrutar este paso por esta tierra.

Les dejo mi mejor energía me llevó la de ustedes yo soy Liú.