Rosario 16 de septiembre de 2021
María Virgen
Nunca pierdan
mis hijos la fe en que este mundo puede mejorar; hemos acompañado durante mucho tiempo a la humanidad
los procesos dolorosos de la guerra y sabemos que el ser humano ha venido
cambiando para darle paso a una vida más tranquila y de comprensión. Oramos
siempre por que puedan entenderse y puedan comprender a aquellas personas que
pueden tener ansiedad en su ser interno, queremos que puedan ponerse siempre en
el lugar de esas personas que están de alguna manera sufriendo y que puedan
entender las razones profundas de la manera cómo se comportan de forma difícil;
oramos mis hijos para que puedan seguir confiando en que podrán hacerse todas
esas investigaciones a favor de la salud del ser humano, que se supere más la
enfermedad en las diferentes condiciones extremas y el ser humano viva en
armonía de su salud, en la recuperación de su alegría de estar en este mundo,
de su capacidad de sentirse bien, y oramos igualmente porque todos ustedes
también bien pongan ese granito de arena para aportar a todos aquellos que
necesitan de su compañía, para todos aquellos que requieren a veces una palabra
y otras veces ver en sus sufrimientos si esas personas requieren de una mano
amiga, de un vaso de agua, de esas personas que caminan kilómetros y kilómetros en un hogar
necesitando muchas veces que en lugar de una recriminación por su nacionalidad
por de dónde vienen o para dónde van puedan recibir la compasión de ustedes
y en un momento pensar como me
comportaría yo, cómo estaría yo si estuviera al borde del hambre y la
dificultad de poder tener un techo, cómo me comportaría yo si viera a mis hijos
caminando descalzos por la calle y aunque pueda parecer que esas son
historias del pasado créanme mis hijos que las vivimos continuamente en el
éxodo de este mundo donde hay tantas personas que huyen de la violencia, tantas
personas desplazadas que por una u otra razón están buscando un mejor lugar
para vivir. Den gracias
por el techo que tienen, den Gracias por tener en su mesa lo que
requieren para alimentar a su familia y por poder sentir que aunque pueden
mejorar las oportunidades el
poder agradecer lo que hay se ampliará para que puedan tener mucho más;
sean compasivos mis hijos y compartan de lo que tienen porque cuando
comparten de lo que tienen Dios lo multiplica en su mesa, cuando dan de
lo que tienen en el amor eso se vuelve también en compasión, pero cuando lo que
entregan mis hijos es miedo, cuando lo que entregan es desagrado, cuando lo que
entregan es un juzgamiento de la misma manera eso es lo que van a recibir de
aquellas personas que acuden a ustedes y también eso será lo que en un momento recogerán no sólo ustedes
sino sus futuras generaciones.
Sean compasivos en ese en ese refrán antiguo de hoy
por mí mañana por ti y de hoy por ti mañana por mí porque es la oportunidad
de darse cuenta que esta vida es una hermandad, que nadie está exento de
perderlo todo y que tener esa confianza en Dios en que los preservará también
ayudará a que sientan en un momento que pueden parar para sentir que no tienen
que repetir más esas experiencias difíciles.
Los envuelvo en mi Manto Sagrado para que se refugian
en él cuando se sientan juzgados, cuando se sientan atacados y que igualmente
lo otorguen a aquellas personas que ustedes ven también en situaciones
difíciles o aquellas personas que también ven en la inarmonía de su vida y de
su imposibilidad de entender la existencia o el poder escuchar también su
verdad; los envuelvo mis hijos en mi manto sagrado para que se llenen de perdón y reconciliación para
que sientan el amor que tenemos con ustedes por cada uno y que sientan que de nuestra
parte nunca hay un enemigo, nunca hay un bando que podemos favorecer porque lo
que queremos es que cada uno de nuestros hijos en la Tierra se comprenda y
entiendan que todo puede existir en este mundo y que hay lugar para todos
incluso aunque pueda haber mucha humanidad, aunque pueda haber muchas personas
en este mundo Dios siempre abrirá espacio para que todos quepan y para que
todos puedan tener en abundancia.
Reciban mis hijos de mi corazón mi bendición y la Dios
Padre Todopoderoso, con todo mi amor y el de Dios, yo soy María Virgen hasta siempre
mis hijos.
Jesús de Nazaret
Buenas noches hermanos en la Gracia de mi Padre Jesús
de Nazaret.
Con un enorme deseo de que sientan mi compañía, que
sientan me complicidad de hermano para acompañarlos siempre y darles esa
posibilidad hermosa de poder recibir el acompañamiento del buen Dios de los
Cielos y que sientan igualmente que venimos a reflexionar con ustedes para
tomar decisiones de vida; a veces se prolongan durante mucho tiempo las
decisiones esperando tal vez en un momento que todo pueda hacer ese milagro que
esperan de Dios pero sin la contundencia de realmente querer ese cambio.
Dios hace milagros
en sus vidas cuando ustedes le dan la potestad a Él de que lo haga no porque Él no tenga la capacidad de hacerlo sino
porque los respeta enormemente incluso en la duda que pueden tener en un
momento de si algo es bueno o no es bueno en su vida.
Dejar que el Padre del Cielo tenga la última palabra
frente a un cambio es también poder soltar queridos hermanos esos hábitos contínuos
de vivir mal, de vivir preocupados, de vivir en la realidad de otras personas
de lo que otras personas deberían de cambiar o hacer. ¿Cuántas veces están en
la crítica de su hermano? en la visión de cómo ellos deberían de existir y de
cómo deberían de manejar las cosas olvidando que también para ellos hay una
opinión hacia ustedes donde ellos también quisieran que ustedes vivieran
diferente, siempre hay un punto de vista que se observa desde afuera con tal
vez la mayoría de las veces la intención de verlos mejor y en otros casos con
la visión de querer apartarlos del camino.
Los acompañamos hermanos para que puedan sentir
enormemente que estamos ahí para ustedes y que podemos ser más activos de lo
que en algunos momentos ustedes creen que podemos hacer, los acompañamos
igualmente para restaurar su camino hacia un proceso nuevo de transformación,
no le teman a los cambios que siempre son importantes y son favorables cuando
vienen también con una posibilidad rápida de que ellos los lleven con un buen
viento, cuando se cierra un ciclo y empiezan a caminar un momento en la
necesidad de una claridad de entender cuál es el nuevo camino por el que van y
a veces es difícil adaptarse a esos cambios y lugares, pero también podemos
guiarlos hacia que muchos de esos cambios representen la sanación de su pasado
cuando es tan protagonista, cuando a pesar de que pasa el tiempo, pasa el
tiempo y siguen en lo mismo y requieren de esta complicidad para entender lo
que pasó, para perdonar lo que pasó, para superar lo que pasó y permitir que
igualmente de todo esto salga la mejor experiencia y le puedan dar esa vuelta a
la página; recuerden queridos hermanos que si se repiten continuamente esos
ciclos difíciles y complicados de la vida es porque no se han detenido a analizar
cómo se comportan, no en un juzgamiento sino en un deseo de actuar de una
manera distinta.
Los acompañamos para que igualmente encuentren su verdad
interior y decidan vibrar en otro tono, decidan dejar de pensar siempre mal de
los demás, decidan dejar de pensar en la angustia de su propia existencia, en
la preocupación continua de lo que se supone que deberían de hacer para agradar
a Dios porque no importa queridos hermanos cómo se comporten, cómo lleven su
vida, todo esto está concebido dentro de la voluntad de Dios y cada uno tiene
derecho de poder hacer de esa vida un camino tan difícil y complicado como tan
fácil como cualquier padre lo querría para sus hijos. Hoy por eso quiero llevarlos a la reflexión de su
transformación, de poder confiar en la seguridad, de poder confiar en el
bienestar y en el acompañamiento que tenemos para que en su mundo no haya
violencia, para que en su universo personal no haya traición, no haya barbarie,
para que en su mundo personal esté la lealtad y empiecen a confiar en las
personas. Si ha habido
personas en las que ustedes han confiado y los han decepcionado, los han
traicionado poder entender que cuando ustedes actúan desde el amor no son
ustedes quiénes pierden, son aquellas personas que actúan de forma
dolorosa y de forma violenta o de forma socavada quienes terminan actuando o
terminan necesitando más tiempo para reflexionar sobre sus actos en ese
boomerang que significa el entregar dolor, el entregar traición y sentir que en
algún momento eso se devuelve y no es que le estén deseando lo peor a los demás,
oren por esas personas que les han hecho daño para que puedan hacerse a la luz
y puedan entender en dónde estuvo su equivocación y que no tengan que vivir en
el dolor, el sufrimiento y que tal vez de ellos reciban de ellos un lo
siento, me equivoqué contigo, pero al mismo tiempo puedan recibir que en un
proceso bonito el verdadero cambio se da cuando el mal se paga con bien, cuando
una persona retorna a su vida también para servirles en un proceso de un día
te hice daño y hoy vengo a repararlo desde el amor porque ese es el sentido
que también une a los hermanos y repara con una palabra y con un acto amoroso
de reconciliación.
Reciban también mis hermanos la bendición de sus
alimentos y el acompañamiento para que sientan que cada una de sus vidas es
infinitamente valiosa, infinitamente importante, infinitamente individual donde
a cada persona la tratamos como un ser totalitario sin la comparación que no es
necesaria porque Dios ama a sus hijos sin compararlos unos con otros; buenas
noches queridos hermanos en la gracia de mi Padre Jesús de Nazaret, muy buenas
noches.
Meditación Dirigida por Liú. ,
Muy buenas noches yo soy Liú. Hoy vamos a hacer ese
polo a tierra, se van a alinear de una manera en que puedan restablecer su
energía, vamos a imaginarnos equilibrando nuestros planos de energía; vamos a
respirar profundo y nos vamos a ir adelante y atrás para sintonizarnos con el
plano cartesiano de la tierra norte-sur, permitimos que la energía de la Madre
Tierra nos ubique, hacemos que el movimiento sea más rápido y más corto de tal
manera en que se vuelva una vibración adelante-atrás; equilibramos nuestro plano
cartesiano norte-sur en conexión con la Madre Tierra encontramos nuestro eje de
equilibrio, nos vamos izquierda y derecha y empezamos encontrar el plano
cartesiano oriente-occidente en conexión con la Madre Tierra, hacemos que el
movimiento sea más rápido y más corto de tal manera en que se vuelva esa
vibración oriente-occidente, encontramos nuestro eje de equilibrio.
Giramos en sentido de las manecillas del reloj, vamos
haciendo que el movimiento sea más rápido y más corto de tal manera en que se
vuelva una vibración a la derecha, equilibramos nuestra energía femenina
nuestra energía Ying, el ciclo de 24 horas en conexión con la tierra,
equilibramos nuestras mareas internas y externas de tal manera en que ubicamos
nuestro eje de equilibrio femenino interno y externo paramos y giramos en
sentido contrario de las manecillas del reloj, hacemos que el movimiento sea
más corto y más rápido de tal manera en que se vuelva una vibración a la
izquierda, encontramos el plano de equilibrio de la energía masculina la
energía Yan, ciclo de 365 días alrededor del sol, cuatro estaciones en
equilibrio y encontramos nuestro eje.
(sigue…ver el ejercicio completo en el video de you tube canal magio ángeles ii.) 1000
suscriptores nos permitirán transmisiones en directo)
Llevan sus manos enfrente en actitud de oración
respiran profundo. Les dejo mi mejor energía y me llevo la de ustedes yo soy
Liú.
Escribe o cuéntanos de tu anécdota con tu Ángel, la envías al correo
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