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sábado, 11 de septiembre de 2021


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Rosario 9 de Septiembre de 2021 

 

María Virgen

Mis hijitos y mis hijitas, buenas noches, soy María Virgen madre de Dios y madre vuestra, reciban todos ustedes mis hijitos amados presentes en este espacio y en la distancia mi bendición y la de Dios Padre Todopoderoso.

Hoy oro con ustedes mis hijos por la paz del mundo, porque esos pequeños brotes que hay de violencia donde siguen sufriendo tantos de mis hijos puedan apagarse en medio de la conciencia del valor de la vida. Oro mis hijitos porque cada ser humano pueda encontrar el respeto de su propia vida, del valor de siempre hallarle el sentido amoroso de este mundo y de igualmente contribuir desde el respeto, desde el amor, desde que cada uno haga su propio aporte para hacer de este mundo un lugar mejor.

Los envuelvo mis hijos en mi Manto Sagrado para que en esos momentos en que están tristes, asustados, puedan saber que siempre tienen este acompañamiento para que hallen la ilusión de la vida; es el momento de perdonar aquellas personas que les hicieron sentir mal en un momento y que grabó en su corazón un decreto de que ustedes eran eso que esas personas alegaban de ustedes, por eso liberarse de ese pasado es encontrar el valor de todas aquellas personas que los aman, el entendimiento de que personas aún amándolas les han hecho daño en esa visión distorsionada de la vida, pero también mis hijos aprender a dejar el pasado atrás es permitir que podamos interceder y puedan sanar esas heridas desde ese bálsamo maravilloso que es el PERDÓN.

Repitan todo el tiempo que perdonan a aquellas personas que les hicieron daño, tal vez al comienzo sea difícil, tal vez al comienzo sean palabras solamente que se repiten una y otra vez, pero conforme vayan interiorizando ese sentido de la comprensión en que todo el mundo se equivoca y que la inconsciencia hace que muchas veces unos dañen a los otros sin saber hasta dónde han clavado un puñal en su corazón, por eso también quiero que sientan que en ese proceso llegará un momento maravilloso en el cual entenderán que perdonar a otros no es liberarlos a ellos es liberarse ustedes y es permitir que su vida continúe en el punto amoroso que ustedes requieren para seguir adelante, porque muchas veces creen que permitirles a esas personas seguir con su vida como si nada es permanecer en el odio y en el deseo de que a esas personas les vaya mal o que paguen el daño que un día les hicieron, pero realmente cuando sueltan eso ya ustedes no se hacen responsables de lo que esas personas hagan o dejen de hacer y se sueltan también de esas personas del poder que pueden tener para que cada vez cada día bien sea en el recuerdo o bien sea físicamente les sigan haciendo daño una y otra vez.

Hoy tienen la potestad mis hijos de liberarse de ese pasado y de ver que cuando ustedes triunfan de su pasado sabiendo que todo lo que vivieron ustedes lo crearon desde el espíritu, ya no son las víctimas, ya no son los tontos, ya no son las personas a las que nadie acudió en ayuda, no hay nada más que el entendimiento que si eso pasó en mi vida yo lo elegí y elegí ese camino complicado, porque sentía que esa era la forma de comprender y sentía que era la forma de amar.

Por eso hoy tienen la potestad de seguir adelante con su camino, no se juzguen tan duro, de hecho queremos que no se juzguen, juzgarse a ustedes mismo por como debieron haber hecho las cosas por como también sucedieron los hechos, es no comprenderse, no respetarse desde la luz del Padre, y en la mayoría de los casos mi hijos, quedarse atascados en la misma situación que suele repetirse con el tiempo.

Los envuelvo en mi Manto Sagrado, para que puedan confiar en que vienen esos tiempos mejores, en que no están solos, en que Dios no ha perdido el control del mundo y aunque les ha dado la libertad, pedir la intercesión divina es para que cada día más puedan hallar ese sentido de vivir  y esa razón de ser felices.

Reciban ustedes la bendición mis hijos de los alimentos que consumirán esta noche, la bendición de su sueño, la bendición de su futuro de todo lo que esperan lograr y recuerden que los pequeños y grandes sueños de la vida son un estímulo para sentir que este juego de vida vale la pena,

Reciban mi bendición y la de Dios padre Todopoderoso, con todo mi amor y el de Dios, yo soy María Virgen hasta siempre mis hijos.

Jesús de Nazaret

Buenas noches hermanos en la Gracia de mi Padre Jesús de Nazaret.

Feliz de poder conversar con ustedes y festejar las cosas mundanas porque algunos creen que lo de Dios y lo de la Tierra está separado como si Dios no tuviera nada que ver con el fútbol, como si Dios no tuviera nada que ver con la política, como si no tuviera nada que ver con la muerte o con la maldad, porque todo lo que comprende a Dios tiene un trasfondo maravilloso y una enseñanza importante.

Entendiendo que el espíritu decide venir a esta Tierra a experimentar, a aprender a veces el juego rudo de la vida, haber jugado un momento tan difícil la existencia hace que el espíritu se vaya herido y se vaya traumatizado y la forma de poder sanar un trauma de vida, de una vida que pasó, es volver a vivir y volver a aprender y pasar por situaciones muy similares para que el juego ya se vuelva diferente; algunos seres humanos juegan tan rudo la vida que terminan olvidando que solo es eso, un juego; a veces necesitamos ir y tocarlos y recordarles que a eso fue a lo que vinieron, que vinieron a jugar, que vinieron a hacer un poco de cosas en un bando o el otro, en una decisión o en otra pero que eso en un momento va a terminar. La importancia es entender que hay una fuerza mayor que siempre será parte de ustedes y es superior al miedo que puedan tener, esa fuerza es la fuerza de carácter del espíritu y del acompañamiento que hacemos para jugar con ustedes en forma protectora; no jugamos unos en contra de otros porque sino estaríamos seres de luz peleando unos con otros para ver cuál de nuestros pupilos tiene la razón, Ángeles contra Ángeles, el Dios que juega en un equipo o en el otro.

Venimos es a conciliar y acompañar su camino para que siempre sepan que estamos ahí y que puedan entender que la misma vida, caminar por ella de la mano hará que en algún momento el miedo se esfume por sí mismo. No peleen contra el miedo, no peleen contra nada; el miedo está tratando de protegerlos, el miedo está tratando de decirles que no quiere verlos sufrir, pero nosotros también venimos a consentir su miedo, hacer sentir a su miedo que pueden ser valientes y pueden encontrar en el proceso de la vida una razón para seguir.

Tienen la potestad hermanos de seguir sintiendo que hay algo más grande que ustedes que los gobierna o pueden realmente asumir su liderazgo y su potestad para sentir que hay algo internamente en ustedes que está por germinar y está por crecer, está por transformarse en su ser en algo infinitamente maravilloso para en un momento enorgullecerse de ustedes, sentirse orgullosos de lo que han sido y reconocer y que aunque han tenido temor, que aunque han tenido ganas de morir, y aunque han tenido depresión, que aunque han tenido aburrimiento, han podido sentir que todos los días hay una fuerza que los acompaña y hay una razón para seguir adelante.

Hoy venimos por eso hermanos a sanarlos y en el nombre del Padre acompañarlos para que puedan superar esas heridas que quedaron del juego, esas condiciones que les han hecho sentir su cuerpo debilitado y el acompañamiento para que cada día puedan sentirse mejor y encontrar en su química interna como en los estímulos externos en la vida una razón maravillosa para seguir.

Conserven la ilusión de que un día van a estar mejor, conserven la ilusión de todo eso que el ser humano llama felicidad, que nosotros también les estaremos aportando en el día a día, el Padre en un arco iris y el Padre en el corazón que está palpitando en su ser, en el aire que están respirando la posibilidad de que sepan que hay algo grandioso, que hay algo maravilloso, que hay algo infinito que está trabajando para ustedes y que está haciendo que ustedes estén en este mundo y que vivir no sea un castigo sino que sea un regalo.

Dios los bendiga hermanos en la gracia de mi Padre Jesús de Nazaret, muy buenas noches.

Meditación Dirigida por Liú.

Muy buenas noches yo soy Liú. Hoy vamos a hacer ese polo a tierra poniendo nuestros pies en el piso, nos sintonizamos en nuestra respiración profunda y llevamos nuestra mano derecha hacia nuestro corazón y hacemos ese silencio para escuchar ese latido de nuestro corazón, nos sintonizamos con esa fuente que existe dentro de nosotros y que desde una luz superior irradia el amor hacia ustedes, el amor que pueden dar y el amor que pueden recibir; sienten como su mano izquierda empieza en esa zona de la palma de su mano a recibir el amor, se abren a la energía de recibir, entienden que cuando permiten recibir están trabajando en la humildad de su ser para entender que ustedes también necesitan de otros y que recibir con humildad en el corazón liberan humillación y al mismo tiempo pone ese filtro para que esas condiciones que pueden hacerlos sentir sometidos al recibir desaparezcan al entender que la luz superior llamada Dios toca corazones de personas a su alrededor para hacer posible que ustedes puedan recibir afecto y puedan recibir calor humano.

En su mano derecha se abre en su Palma la energía de dar, entienden que siempre hay algo para entregar, que siempre la energía de la proactividad, sentirse útiles, entregar una sonrisa, entregar su corazón, dar lo mejor de ustedes a otros es la posibilidad de que Dios les dé una tarea y una misión para hacer el camino más fácil de aquellos que a su alrededor lo necesita.

Empieza a fluir desde su mano izquierda la energía de recibir que pasa por su corazón y se purifica y va hacia la mano derecha desciende por ese brazo izquierdo y se amplifica para entender que siempre hay una fuente inagotable de un equilibrio entre dar y decidir, que cuando das con humildad, que cuando das con compasión y comprensión lo quedas se devuelve en esta ley abundante vuelve multiplicado y que cuando recibes te fortaleces para también poder en un momento estar preparado para darle a alguien más.

Sienten que ese circuito se arma alrededor suyo activando la Ley De Prosperidad, activando la fuente inagotable que viene desde el preservar divino donde todo lo que va vuelve y vuelve multiplicado en la energía de que siempre hay mucho más de lo que ustedes pueden necesitar; empieza a palpitar su corazón en la energía de sentirse importantes, en que siempre hay una energía animada e inanimada en su camino para fortalecerlos en la vida y así lograr todo lo que quieren.

(sigue…ver el ejercicio completo en el video  de you tube canal magio ángeles ii.) nos faltas tu para obtener 1300 suscriptores ver el siguiente link https://youtu.be/sWR7yH6eE0Y)

Llevan sus manos enfrente en actitud de oración respiran profundo. Les dejo mi mejor energía y me llevo la de ustedes yo soy Liú.

Escribe o cuéntanos de tu anécdota con tu Ángel, la envías al correo unahistoriadeangeles@gmail.com   y la publicaremos en el blog HAZ CLIC EN LA IMAGEN PARA SUSCRIBIRTE AL BLOG


 


 

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