ADQUIERE LOS LIBROS DE MAGIO EN MERCADO LIBRE, AUTORES EDITORES O EN MAGIO ÁNGELES
Habla por teléfono con tu
Ángel de la Guarda. Tu mensaje o mensaje para tus hijos, o de Pareja, o hablas con alguien del Cielo. Un Arcángel.
María
Virgen
Mis
hijitos y mis hijitas queridas buenas noches, soy María Virgen madre de Dios y
madre vuestra, reciban abrazo de madre mi bendición y la de Dios Padre
Todopoderoso.
Hoy
los bendecimos mis hijos porque sabemos que hay momentos donde se sienten
desesperanzados donde al pasar el tiempo y no haber esos cambios que se esperan,
hay esa incertidumbre del futuro de si van a sanar, de hacia dónde va el futuro,
hacia dónde va la humanidad y recuerden que todos esos temores se solventan, se superan en el momento
y que recuerdan que hay un Dios sabio que rige al mundo que aprecia la vida,
que se enamora de la misma vida, se enamora de la humanidad y hace que se
preserven el orden y el equilibrio; nunca deben olvidar que ese orden y ese
equilibrio ha existido y va a existir por los siglos de los siglos. Que
aunque haya habido momentos trágicos, difíciles, las condiciones son las de
volver a establecer ese ciclo de armonía y queremos hoy acompañarlos para que
esa armonía interna haga posible que estén bien.
Los
abrazamos para que se sientan sanos, para que sientan ese acompañamiento Y esa
verdad transformadora que llega desde el Padre del cielo no sólo en esperanza
para el futuro si no en realidades, en esas situaciones que están pasando
maravillosamente a cada segundo y que son la respuesta de que en medio de las
historias difíciles, en medio de estas situaciones complicadas la fuerza del
amor, la fuerza de la vida, la de la recuperación y la del poder sentirse mejor
es muchísimo más grande.
Les
ruego mis hijos que oren por aquellos hermanos están en este momento pasando
por situaciones difíciles, oren imaginándolos envueltos en luz, imaginándolos envueltos
en mi Manto Sagrado para que sanen aquellos que estan en sus casas enfermos,
aquellos que están en hospitales, aquellos que están asustados temerosos de su
vida o aquellos que están temerosos por la vida de un miembro de su familia;
oramos y envuelvan también en esa oración a aquellas personas que en este
momento han perdido su trabajo, aquellos que no tienen un techo estable,
aquellos que se sienten sin esperanzas y todavía siguen sintiendo que la salida
es la muerte para que reencuentren el valor de la vida, para que renazcan en
ilusiones y para que cada uno de ustedes mis hijos también pueda retornar a la
confianza de ese Padre bueno que siempre quiere lo mejor para ustedes y que si
bien los deja en libertad de poder vivir la experiencia tan dura o tan difícil
también les permite reconciliarse en esa comprensión de que Él es bueno y de
que Él los ama.
Los
envuelvo en mi Manto Sagrado y les traigo mi intercesión de Madre y hoy quienes
profesan esa fe de sentirme a mí como una madre cercana como ésta Virgen del
Carmen, llego en esta ocasión a bendecir los niños, a bendecir esos medios de
transporte, a bendecir a todos aquellos que saben que no solamente estoy en sus
casas sino que también los estoy acompañando en sus trabajos para que siempre
puedan sentir que pueden estar bien, que su trabajo sea la manifestación de la
alegría, de la confianza en que estamos ahí y de mi parte mis niños este agradecimiento por permitirme interceder por
ustedes, por permitirme ayudarles, por permitirme estar en sus casas y hacer de
su hogar mi hogar y hacerme a mí esa madre que los acompaña en todo momento y
que los comprende en todo momento porque recuerden que la labor mía como Madre nunca
es la de cuestionar, nunca es la de llevarlos a nada diferente a que puedan
sentir ese afecto que Dios tiene por ustedes y que yo como ese símbolo de la
maternidad también significo para ustedes bendecir sus hogares, sus casas, para
que en sus hogares haya comprensión, armonía, para que puedan solucionar esas
diferencias, que han tenido en el diálogo, en el respeto de unos por otros, en
la comprensión de que cada uno hace su vida lo mejor pero que también cuentan
con nosotros para que en aquellos momentos en que se sienten perdidos puedan
escucharnos, puedan percibirnos como esa vocecita que también habla en su
cabeza y bajo las evidencias que se muestran como esas situaciones milagrosas
en las cuales pueden apoyarse más en esos momentos en que todo está en crisis.
Los
bendecimos, bendecimos su país, bendecimos este hermoso mundo, bendecimos este
planeta Tierra y les digo mis hijos que confíen que todo va a mejorar.
Reciban
todos mis niños de mi alma mi bendición y la de Dios Padre Todopoderoso con mi
amor y el de Dios yo soy María Virgen muy buenas noches mis hijitos hasta
siempre.
Jesús
de Nazaret
Buenas
noches hermanos. En la Gracia de mi Padre Jesús de Nazaret.
Me
hago partícipe de esta celebración de este día tan especial donde bendecimos a
mi Madre, la bendecimos en muchas épocas del año, realmente nos sentimos
felices de participar de tanta y tanta fiesta, de participar de tantos momentos
especiales donde la humanidad nos ha dado un lugar tan importante y también
invitarlos a que abran su mente y puedan darse cuenta que han existido en otros
tiempos maestros que también acompañaron de otra forma diferente a la humanidad,
que también les han ayudado en tiempos remotos a poder encontrar su propio
potencial, su propio talento.
Yo
siempre les he dicho hermanos que si yo fui capaz de hacer milagros en el
nombre de mi Padre para ustedes también son posibles de hacer esos milagros,
también en el nombre de mi Padre y poder bendecir sus manos para que puedan
sentir que en ellas tienen el don de la sanación, poder bendecir sus manos
porque un abrazo, porque la caricia, porque algo que se hace con amor sin más
que el deseo puede también funcionar de forma maravillosa porque saben hermanos
que muchas veces en su vida el saber que su mamá estaba ahí o que recibían en
la compañía de un Papa cariñoso era hermoso porque era saber que estaban
cuidados, estaban queridos, que esa mamá podía llegar con el caldito caliente
cuando estaban enfermitos, que podían desvelarse con ustedes para acompañarlos
y que no solamente este sentido de la presencia materna es importante sino que
les quiero pedir con mucho
cariño que el valor del padre vuelva a estar en las vidas de los hogares,
que haya un proceso de reconciliación y deje de haber esta lucha de sexos, que
los hombres aprendan a pedir perdón, aprendan que fueron participes durante
mucho tiempo y siglos y siglos de la dominación a las mujeres, de la
discriminación a ellas, de sentir que ellas fueron durante mucho tiempo sólo seres
que podían procrear que no tenían el valor suficiente para una sociedad y que
en un momento empezó a haber este desencanto frente al valor que una mujer
tiene dentro del hogar, dentro de algo tan sagrado como es llevar en el vientre
un hijo, dar la vida pero también como
es importante sentir que esa sabiduría de mi Padre ha hecho que un hijo llegue de dos, que esa
sabiduría de mi Padre y la elección que ustedes hicieron espiritualmente y que
sus hijos hicieron espiritualmente los llevó a concebir esa persona como hijo o
hija, al haber elegido esa mujer como la madre de sus hijos, o su hijo, su hija
o al haber elegido ese hombre de la misma manera como ese compañero de una
misión de vida que es sacar los hijos adelante y por eso es importante que
sepan aclarar que nadie los obliga que tengan que estar juntos como pareja
porque los hijos están ahí; una cosa es esa relación de pareja y otra cosa que
se suma es esa relación de familia y hay parejas que descubren que pueden
funcionar mejor como como familia sin ser pareja y que cuando se hace con el
respeto, cuando se hace con el cariño, por entender esa misión conjunta de los
dos ese valor que cada uno tiene, los hijos crecen sin esos traumatismos, los
hijos crecen sin esa sensación de que tienen que elegir de qué bando son y
mucho menos crecen esos hijos con la creencia de que ellos son los jueces de
con quién deben llevarse bien o quién es el malo y es necesario que puedan
crecer si han sido víctimas como mujeres a poder superar ese pasado y a poder
sentir que hoy son otros tiempos para las mujeres, son tiempos maravillosos
donde han demostrado su inteligencia, su capacidad, su sagacidad pero en esta
conquista que han hecho del mundo para transmitir un mensaje tan claro de su
capacidad inmensa no olviden en ello esa necesidad de acompañamiento, ese valor
que también tiene la sensibilidad femenina y ese poder sentir que en ese
acompañamiento también dejar entrar a alguien es algo que se da en la
reconciliación de sus antepasados, en la reconciliación de lo que sus padres
como varones pudieron no darles en un momento y en poder sentir que les dieron
lo más sagrado que era la vida y que si van a seguir adelante en la vida es en
esa reconciliación entendiendo que ustedes han decidido entender que son
diferentes, que reaccionan distinto, que un hombre como lo dice la ciencia no llora tan
fácilmente porque sea un hombre insensible sino porque en su química no es tan
fácil llorar con una mujer, que muchos momentos en una mujer le es más difícil
tener esta postura firme de mando y que aunque lo puedan hacer el poder sentir
que están reconciliados cada uno con su rol de hombre y mujer no significa que
la mujer no pueda ser fuerte, que el hombre no pueda ser sensible sino que
también van permitiéndose roles en el proceso de navidad para sentir que en
algunos momentos justo lo que parece más frágil es más fuerte y momentos donde
justo el más fuerte se vuelve frágil y es ese acompañamiento del amor, es ese
poder sentir que en algún momento eligen roles pero que lo hacen en la palabra,
en el respeto del uno por el otro, en la comprensión del uno por el otro y la
comprensión de la verdad y cuando logran hermanos hablar las cosas es más fácil;
es más fácil que tirar una puerta y salir corriendo, es más fácil que culpar al
otro, es más fácil cuando ustedes se sientan y definen por qué están cansados
de una pareja, qué es lo que esa pareja no les da, cómo es que esa pareja los
hace sentir o qué cosas están haciendo ustedes también para que esa pareja se
sienta poco respaldada, igualmente funciona en un trabajo, funciona en una
amistad, funciona en la importancia que tiene el que los padres escuchen a sus
hijos, que sus hijos también aprendan a respetar esa sabiduría de los padres sobre
la experiencia que ya llevan encima entendiendo que ellos también fueron los
forjadores de este presente, ¡ser gratos!.
Ser
gratos y darse cuenta que ellos eran en otro momento los jóvenes que estaban forjando
un futuro más claro, más tecnológico, mejor para ustedes y que un día ustedes
también muchachos van hacer esos viejos que habrán hecho en su juventud un gran
trabajo para darle un legado mejor a esas generaciones que vienen y quisieran
ser apreciados, quisieran ser respetados, quisieran ser valorados y que
aquellos que están olvidando el valor de una vida cuando dicen: “…es un
simple habitante de calle, …es un simple
vigilante… es un simple abuelo…” están olvidando que todavía es importante
queridos hermanos que el valor de los animales también, el valor de los
recursos es importante y aprender a valorar todo esto es también darse ustedes
mismos un segundo y mirar la oportunidad de que un día sean valorados y
respetados por el simple hecho de ser y de ahí en adelante que su esfuerzo, que
las cosas que ustedes hayan hecho también sean valiosas para quienes los rodean
los bendecimos queridos hermanos y los acompañamos a que hagan esa reflexión de
su verdad interna, que logren ubicar qué es lo que los hace estar sintiendo mal,
a qué es a lo que le temen, por qué no pueden disfrutar el presente y se
amargan la vida temiendo que pueden enfermarse y están sanos, que por qué dejan que el temor los gobierne de una
manera donde ese temor lo que hace es fragilizarlos, es bajar sus defensas, es
precisamente atraer justo aquello a lo que más le temen y sentirse agobiados en
lugar de estar agradecidos por tantas cosas bonitas y como les digo queridos
hermanos no pretendo juzgarlos porque tienen miedo. El miedo es humano, pero
vengo a ayudarlos para que no los gobierne, para que la fuerza del amor haga su
tarea y respiren profundo y recuerden que cuando ustedes no quieren una
experiencia dura en la vida, cuando no la necesitan pueden hablarle al Padre y
decirle “Señor paso y no quiero esto en mi camino”.
Los
bendecimos, bendecimos los alimentos que están consumiendo, les pido que se
reconcilien con su sueño, se reconcilien con la comida, que aprendan a comer
sin culpa y aprendan a bendecir los espacios, que traten de no dormirse
contrariados, que no coman peleando, hablando cosas feas, que acostumbren a no
hablar del prójimo por despotricar en qué debería hacer porque aunque ese
prójimo no esté ahí parado físicamente, espiritualmente ustedes convocan a
alguien y esa persona está ahí, ¡ese ser está ahí! Y espiritualmente sabe que
ustedes están hablando mal de él y si tienen alguna crítica hablen
espiritualmente con esa persona, hablen de buena manera pero cuántas veces esas
críticas de ustedes es “es que a mí no me parece…” sin entender la
libertad que la otra persona tiene ni siquiera escuchar por qué la persona se
está portando así, ni siquiera comprendiendo qué es lo que esa persona lleva
por dentro porque juzgar queridos hermanos en muy fácil, así que reflexionen,
pongan un espejo enfrente de ustedes para mirarse ustedes mismos no juzgándose
sino para entenderse y para abrir su puerta a entender a otros para que así el
camino sea mucho más fácil.
Dios
los bendiga la Gracia de mi Padre, Jesús de Nazaret. Hasta pronto.
Liú
Meditación
Muy
buenas noches yo soy Liú. Vamos a cerrar los ojos poner los pies en el piso y
vamos a entregarle a la Madre tierra toda nuestra preocupación, enfocamos las
palmas de las manos hacia abajo, con nuestra respiración vamos a enfocar que
cada vez que el aire entra se lleva de nosotros la enfermedad, el agobio, la
preocupación se las damos a la Madre tierra y nos enraizamos de tal manera en
que sentimos toda su energía recibiendo toda la preocupación, toda enfermedad,
sentimos como de la misma manera después de dejar salir toda esa energía tóxica
sentimos que por nuestras plantas de los pies entra energía sanadora; sentimos
que nuestro alrededor hay todos los nutrientes que necesitamos, que la tierra
electromagnéticamente nos equilibra.
Equilibramos
nuestros puntos cardinales norte – sur, Oriente – occidente, equilibramos
arriba – abajo, adelante - atrás y sentimos como nos ubicamos en nuestro punto
geográfico acorde con la tierra subiendo nuestra energía, revitalizándolo,
sentimos como nuestros órganos se llenan de salud como todo ese sistema de defensa
se fortalece, sentimos como no necesitamos más la enfermedad como maestra y
desde nuestro espíritu nos hacemos dueños de nuestro cuerpo para sanarlo, nos
hacemos dueños de nuestras emociones para sanarlas, sentimos que los puñales de
dolor y de sufrimiento se van, esas emociones que hemos estado alimentando de
forma dolorosa y guardando dentro de nosotros durante tanto tiempo: la culpa,
la rabia, el miedo, la tristeza, desamor, el abandono, la ira, la desilusión,
el desencanto y sentimos como todo esto se va volviendo alegría, armonía, como
desde nuestro espíritu le damos la orden a nuestra mente de que nos de
pensamientos positivos y biológicamente le damos la orden a nuestro cerebro de
sanar, sentimos que todo está solucionado, todo está en unas condiciones
mejores y empezamos a sentir que la química de nuestro cuerpo entra en paz, en
armonía, cómo se disuelve cualquier nudo, cualquier tumor, le damos la orden a
nuestro cuerpo de que todos nuestros órganos funcionan bien y empecemos a
liberarnos de ese sobrepeso, de la indigestión, de esa molestia respiratoria,
llevamos sanación a esas zonas que han estado en nuestros huesos desgastadas,
esos huesos que se han corrido de su lugar, esas articulaciones que no están funcionando
bien, arreglamos la química de nuestro cuerpo desde la luz del Espíritu Santo
para que esas enfermedades raras, para que esos diagnósticos, para que esas
enfermedades angustiantes que nos hacen sentir al límite puedan irse y podamos
reconciliarnos con la vida y seguir haciendo parte de los vivos seguir siendo
parte de este mundo y declarar “YO SOY SANO” entendiendo que para morir no hay
que enfermar, preparándote en la comprensión de que un día no vas a estar acá
pero pidiendo esa luz divina que mientras lo estés, sea en tu mejor potencial,
en tu mejor energía, sano desde todo punto de vista, armónico, dispuesto a
crear, dispuesto a experimentar; le das la orden a tu mente y a tu cerebro que
los recuerdos pasen de ser mortificantes pasen de ser traumáticos a ser
recuerdos sanadores, ser recuerdos que los llevan a ustedes a sentirse
totalmente felices porque superaron las pruebas y porque en este momento le
dicen a esa enfermedad que está padeciendo tu ser, esa enfermedad física,
emocional o mental que gracias porque por ella has parado, que no la necesitas
más, que la bendices y que sabes que ella llegó para ayudarte a hacer una
reconciliación y que ella llegó a ayudarte a hacer un alto le dices que se
puede ir, que todo está bajo control porque la enfermedad desaparece en el
momento en que recuperas tu equilibrio.
Llevas
tus manos en actitud de oración para fijar el ejercicio que haces y para
declararte sano, para declararte en armonía interna, para declararte
emocionalmente sano, para declararte creativo y para declararte espiritualmente
feliz de estar en esta Tierra y de sentir que tu misión es aprender,
experimentar de ella y disfrutarla como un maravilloso juego, una maravillosa
escuela y una maravillosa oportunidad.
Les
dejo mi mejor energía y me llevo la de ustedes soy Liú.
unahistoriadeangelesparati.blogspot.com
No hay comentarios.:
Publicar un comentario