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sábado, 8 de febrero de 2020

Rosario febrero 6 de 2020



Rosario febrero 6 de 2020                   
Uriel, Charla con él, Martes 18,  7 pm. Inscríbete al ciclo x7.

María Virgen
Mis hijitos y mis hijitas presentes y en la distancia reciban todos ustedes mi bendición y la de Dios Padre Todopoderoso, la bendición de sus hogares, de sus familias, de sus trabajos, en el nombre del Padre, del Hijo, del Espíritu Santo, amén.
Hoy quiero mis hijos de mi alma referirme a todos esos acontecimientos tan difíciles de muertes de niños que vuelven aparecer en esta historia de este país en forma cíclica, recurrente; hay que pasar mis hijos de mi alma de la indignación y del juzgamiento de quién lo hizo a tener una conciencia social una conciencia personal y una conciencia familiar sobre la manera como están pudiendo ustedes llevar su vida dentro de sus familias, cómo está habiendo la suficiente conciencia para traer hijos al mundo, para mirar en el cuidado de quién están, que haya esa responsabilidad de tener esos hijos para cuidarlos, para quererlos y haya la conciencia de que cuando se elijan como pareja haya pasado el tiempo suficiente para conocerse, para saber de qué manera dejan entrar a su vida a alguien y no permitir que sea la angustia de un amor vacío, la angustia de un amor incompleto donde sienten que el amor se encuentra afuera en otra persona para llenar espacios vacíos y fíjense mis hijos que muchas veces no llena esos espacios de tristeza o de soledad una pareja, unos hijos, un trabajo, que no lo llena el poder, tener dinero, posición social, realmente es empezar a encontrar desde dentro el amor de tantas maneras manifestado en la vida misma, en poder también ser conscientes y pedirle a Dios que les dé esa conciencia para que cuando pasen estas cosas revisen ustedes de qué manera están eligiendo a sus parejas, reavisen ustedes de qué manera se están tratando intrafamiliarmente y que como tantas veces les hemos dicho dejen de jugar el juego de quién es el malo, quién es el bueno, quién es la víctima o quién es el victimario, porque cuando ustedes intentan encontrar un monstruo en la persona que consideran mala ven que sencillamente es un ser humano, una persona que pasa por su lado y que tiene en su ser muchas cosas que también en su humanidad lo hacen ser una persona importante y maravillosa, que muchas veces hay que revisar la historia de todo eso que compuso la vida de un ser violento, la historia de alguien que actúa en un momento como una persona maligna y recuerden que esas historias intrafamiliares de violencia, de abuso, de muerte, se repiten porque de alguna forma al crecer en esos ambientes se genera una dependencia a ellos como si fuera una droga, por eso es muy importante reflexionar sobre esos cambios, sobre cambiar sus propios hábitos, sobre entender que nunca hay una razón para gritar, para pelear, para tratarse mal, para llegar incluso a las manos porque muchas cosas se pueden arreglar de formas diferentes y es necesario también que dejen de haber familiarmente esos bandos donde de alguna forma unos y otros están juzgandose y están viviendo en ese orden del conflicto interno de quién tiene la verdad, de quién es el bueno y de quién es el malo.
Siempre llegamos a conciliar, llegamos a que puedan hacer de cada experiencia difícil algo diferente y algo bueno al futuro; tienen la libertad que Dios les ha dado para para cambiar ustedes mismos, para que frente a estas situaciones puedan ustedes parar y decir “esa es una experiencia que yo no quiero en mi vida y que elijo no vivirla, elijo no tener la pérdida de un hijo de ninguna manera, ni de forma violenta, ni de forma abusiva” y pareciera que eso se sale de sus manos pero realmente cuando ustedes se conectan con el amor, Dios los escucha, Dios los proteje y de tantas cosas bajo la oración, bajo la compañía y bajo la decisión pueden ustedes sentir que no tienen por qué revivir esa historia y volver a pasar por eso.
Oren por todas aquellas personas que están en conflicto en este momento pero salgan ustedes también del conflicto, no le no le echen mis hijos más leña al fuego porque cuando están haciendo parte de ese reproducir en los medios de comunicación por qué lo hizo, de qué manera lo hizo, de qué manera era esta persona, qué tenía en su corazón para juzgar, se olvidan ustedes mis hijos que esa mala hora hay que mirarla un momento para reflexionar sobre ella y decir qué de eso me puede pasar, qué de eso me puede suceder, qué de todo esto yo tengo que aprender para que yo también pueda elegir en mi propia vida que esto no suceda; porque a veces se piensa en que esas cosas no me van a pasar a mí porque sencillamente soy responsable, soy juicioso, soy una persona teóricamente buena, técnicamente buena, pero incluso a gente buena también les pasan cosas malas y en su inconsciencia no saben si una persona que necesita experimentar en este mundo va a ser el que va a atropellar a otro sin querer y matarlo, el que le va a dar una droga equivocada a unos niños para asesinarlos, pídanle a Dios que ustedes no tengan que ser los malos y que de ninguna manera les pasen cosas terribles en la vida donde ustedes terminen perdiendo el control, donde se dejen llevar por la ira y no sepan en qué momento pueden perderse, en qué momento el licor los puede llevar a una situación extrema de no medir las consecuencias de sus actos, en qué momento la ira los puede llevar a dañar a otra persona y a sentir que de todas estas cosas difíciles ninguno está eximido de ello pero que cuando pueden realizar ese concepto desde ambos lados saliéndose de quién es el bueno como hoy les he dicho o el malo o del juzgamiento pueden orar por todos porque es una fatalidad para todos, se sufre, todas las familias sufren, sufre la familia del que fue el malo, del que cometió el error, sufre la familia de quien recibió el daño, del niño, de la madre que en algún momento abandonó a su hijo y lo dejo a manos de un criminal, ¡todo el mundo sufre!, Sufre la sociedad y por eso es necesario que dejen de alegrarse de que puedan impartir justicia a quien hizo mal porque ustedes no saben en algún momento como también puede la justicia caerle a ustedes y sentir que también puede ser implacable, algunos dirán “eso es lo justo, es lo justo porque si alguien comete un error debe pagarlo” pero precisamente por eso la enseñanza que les hemos dado es que DESDE LA VOLUNTAD DE DIOS TODO PUEDE SER PERDONADO, y cuando entran en conciencia se mitiga el dolor propio, se mitiga el dolor ajeno y empieza especialmente para aquella persona que hizo mal un largo camino, un camino que muchas veces es la culpa, otras tantas veces es la decepción de sí mismo, porque cuando una persona despierta en la conciencia sufre el dolor de todo aquello que hizo mal a aquella persona o aquellas personas que estuvieron a su alrededor y sufre infinitamente más por eso sean compasivos mis hijos, sean compasivos con sus propios errores y sean compasivos con los errores ajenos porque todos están matriculados en esta escuela de la vida y vinieron a experimentar y a veces las experimentaciones son muy duras sean que estén a un lado de la balanza o sea que estén al otro lado, por eso oramos para decir “líbrame Señor de todo mal, de todo peligro” porque ese mal y ese peligro no solamente se obra en contra de ustedes si no ustedes no saben en qué momento pueden ustedes ser los que obren en el mal y sean el peligro para alguien más.
Los envuelvo a todos mis hijos de mi alma en mi Manto Sagrado para que puedan reflexionar, entrar en conciencia para que no se hagan participes del hablar mal de otras personas, para que puedan también reflexionar y entender que cada persona igual que ustedes está haciendo su mejor esfuerzo y que es necesario que ustedes vayan transformando su propio camino en conciencia y que cuando no lo sepan hacer dejen que Dios se encargue de todo aquello que ustedes no pueden y que a veces sienten que se sale de sus manos.
Reciban la bendición de los alimentos de esta noche, del agua que esperamos que dejen en su mesa antes de dormir para bendecirlos para que se salen en todos los aspectos y puedan recibir esa bendición divina a través del agua, reciban mis hijos de mi alma mi bendición y la de Dios Padre Todopoderoso, con todo mi amor y el de Dios, yo soy María Virgen muy buenas noches mis hijos hasta siempre.
Jesús de Nazaret
Buenas noches hermanos. En la Gracia de mi Padre Jesús de Nazaret.
Como siempre es un placer poder tener estas reuniones con ustedes algunas veces más serios, más impactados, otras veces pues más felices porque eso es la vida, algunas personas en este momento están pasando por sus momentos más lindos, más hermosos, otras personas están pasando por sus momentos más tristes porque eso es la vida, es esa montaña rusa que algunos llaman que a veces está arriba a veces está abajo y es importante poder ir escribiendo la historia de su vida siendo conscientes de cómo están viviendo cada día; es importante que puedan enfocarse en su propio camino, dejen ser y sean; es tan fácil cambiar a los demás, es tan fácil criticar a los demás, es tan fácil sentarse y decir mi madre debería actuar de esta manera, mi hijo debería actuar de esta otra, mi esposo debería actuar de tal manera, mi jefe, mis empleados, mis amigos, el alcalde, el presidente, la presidenta, ¡Dios! ¡todos! ¿no? es facilísimo sentarse a vivir la vida de otro, es facilísimo sentarse y jugar un partido desde la distancia dirigiendo desde la casa a los jugadores para decir “tan bobo por qué no hizo esto, por qué no hizo aquello, por qué no metió el gol”, pero eso es la vida, enfocarse en su propia vida y mejorar los hábitos queridos hermanos para dejar de cuestionar que es lo que hacen los demás, les quita mucha basura de encima. ¿Cuántas horas llevan pensando en cómo deberían vivir la vida los demás? y si alguien les pide consejo pues denlo y si no se los piden pues déjenlo pasar, porque cada cual tiene el derecho de hacer con su vida lo que quiere y es importante por eso que ustedes también si pretenden que los demás respeten su vida, si pretenden que los demás de alguna manera sean respetuosos frente a sus cosas, lo que ustedes quieren hacer, pues es importante que escuchen y que dejen que cada uno siga su proceso y ustedes miren qué es lo que les afecta realmente de los demás porque muchas veces la afectación es porque esa persona me cae mal, porque esa persona no tiene la afinidad política que yo quiero o si es hombre no se porta como hombre sino como mujer y si es mujer no se porta mujer sino como hombre, siempre estamos juzgando las personas por si salen con mucha ropa, con poca ropa y a veces es necesario hacer un alto a todo este chismorreo y a toda esa crítica destructiva para para ver lo bonito de cada persona y entender que todo el mundo tiene un mar profundo negro y oscuro, todo el mundo tiene como decía un autor sus zonas erróneas, todo el mundo tiene sus puntos álgidos, profundos, en que hasta se caen mal con ellos mismos, “ yo me caigo gordo” porque tienen unos momentos en que no saben qué quieren, para dónde ir, nosotros los entendemos y a veces dicen ustedes yo ni me entiendo y pues a eso han venido a esta vida, a entenderse, a comprenderse y pues si es difícil entenderse a sí mismos es más difícil entender a los demás pero a veces es importante ver con los ojos del amor a los demás para entender que no es fácil estar vivo porque de alguna forma hay que conciliar muchas cosas en la vida, y a veces se va la mano en tanta cosa dura que terminan sintiendo “Qué hago acá? Si todo es obligación, si todo es pelea y todo llanto, si todo es dolor, si todo es enfermedad, si todo es angustia, pues finalmente la persona termina sintiendo que a qué hora se acaba este contrato porque estoy harto de estar acá, pero también por eso es importante hacer un alto en la vida para para ver si cómo estoy llevando la fiesta? ¿no? algunos dicen “llevemos la fiesta en paz” y ¿qué significa eso? pues que si es una fiesta es una fiesta, no es un entierro y es para disfrutar. Realmente es aprender a vivir entendiendo que éste aprender a vivir es empezar a elegir un camino personal en el cual ustedes se sientan bien con ustedes mismos y puedan sentir que esa Luz Divina también entra a hacerlos sentir contentos, acompañados, en paz, a hacerlos sentir mejor porque nosotros no hemos venido a criticarlos y decirles qué tienen que hacer, ¡no nos busquen para eso! nosotros hemos venido a decirles que tienen la libertad del Padre del cielo para poder hacer con su vida lo que ustedes quieran, pueden hacer de su vida un infierno, pueden hacer de su vida un paraíso y cada cual lo elige, cada cual elige interiormente como quiera vivir.
Pregúntese qué cosas hicieron hoy para ser felices, qué cosas hicieron hoy para sentirse bien, cuánto gusto se dieron hoy o es que están esperando eso para mañana o están esperando estrenarse la ropa para el cumpleaños y la tienen guardada 6 meses, están guardando el perfume, están guardando los anillos para cuando sea la fiesta o se están permitiendo vivir el momento y realmente disfrutar ese ahora, disfrutar las personas que están porque después empiezan a decir “!ay! si mi mamá estuviera, si mi hijo estuviera, si mi hermano estuviera, si tal persona estuviera” pero cuando estuvo ¿cómo fue? ¿cuánto hicieron realmente mientras estuvieron juntos por pasarla bien? ¿cuántos momentos hubo realmente de recuerdos lindos y bonitos y cuántas veces se amargaron la vida o le amargaron la vida a la otra persona? y se hicieron la vida a cuadritos, por eso la invitación queridos hermanos es a que reflexionen ¿cómo quiero vivir yo? y si yo quiero que me traten bien ¿cómo trato a las otras personas? si yo quiero que sean compasivos conmigo ¿cómo voy a ser compasivo con otros? entonces hoy quiero hacer esa reflexión con ustedes para que puedan hacer el alto en el camino y primero se enamoren de ustedes mismos, ¿cuántas personas están esperando que otros les diga que los quieren y los aman, que son lo mejor que les pasó en la vida si ustedes no se sienten lo mejor? si no se sienten atractivos, si no se sienten buenas personas, si no se sienten de buenas, si no se sienten especiales, ¿cómo pueden pretender que otra persona les diga todo eso? por eso para amar al prójimo hay que amarse y es necesario llegar a ese amor propio que haga que ustedes sientan que son la obra de Dios y cuando ustedes están diciendo que son especiales y son la obra de Dios no están diciendo que otros no lo sean, están sencillamente centrándose en su mundo para sentirse mejor y poder dignificar y amar a otras personas y hacerlas también sentir bien. Hagan un propósito diario de hacer cosas que los haga sentir bien a ustedes y hagan un propósito diario de hacer sentir bien a las otras personas. ¿Cuántas personas tienen como hobby amargarle la vida a otros? levantarse por la mañana y mortificar a otros, molestarle la vida otros, por si ponen música o no ponen música, por si se visten de una manera, si se visten de otra, ¿cuánta gente se levanta a dañar a otras personas de muchas formas? porque miren queridos hermanos, no solamente se daña la gente a las personas físicamente agrediendolo con un arma, a veces sus pensamientos pueden agredir mucho a esa persona, unas palabras violentas, desagradables y a veces ese desprecio, esa actitud de “usted no me importa”, ese no saludo, no miro, ignoro y todo ese veneno aunque no se puede decir con palabras está ahí y también le hace daño a una persona.
Bendecimos queridos hermanos sus alimentos de esta noche para que estén llenos de toda esa comprensión y de todo este análisis de qué es lo que yo estoy haciendo hoy y cómo estoy siendo un factor de paz, cómo estoy siendo un factor de Progreso y cómo estoy llevando mi vida en paz alegría y tranquilidad, en la Gracia de mi Padre  Jesús de Nazaret muy buenas noches.
Liú Meditación  
Muy buenas noches yo soy Liú, Muy buenas noches vamos a poner nuestras manitas en nuestras piernas vamos a respirar profundo y vamos a permitirnos declararnos en paz en armonía, vamos a pedir la guía y la luz del Espíritu Santo para vibrar de una manera en que podamos sentirnos bien, vamos a vibrar tomando todo el aire diciendo OM hasta la mitad del aire y Shanti hasta la final del aire que tengamos contrayendo el vientre; OM simboliza a Dios, simboliza la divinidad, Shanti el amor y la paz que nos trasmite desde ese Espíritu Santo.
(se hace el sonido varias veces)
Ponen esas manitas en actitud de oración para fijar el ejercicio que hemos hecho les dejo mi mejor energía me llevo la de ustedes yo soy Liú.
Escribe o cuéntanos de tu anécdota con tu Ángel, la envías al correo unahistoriadeangeles@gmail.com  y la publicaremos en el blog  unahistoriadeangelesparati.blogspot.com
Mes de Uriel, Charla con él, Martes 18 7 pm. Inscríbete

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