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sábado, 4 de junio de 2016

LIBRO DE MAGIO MARÍA VIRGEN Y JESUS DE NAZARET AL HABLA2 :     ESTÁ A LA VENTA A TRAVÉS DE INTERNET EN LA PÁGINA DE AUTORES EDITORES . COM entrega a domicilio
CONVERSATORIO EL 4 DE JUNIO 2:45 PM
Magio, mensaje del Rosario Junio 2 de 2016

María Virgen

Mis hijitos y mis hijitas queridos muy buenas noches, soy María Virgen madre de Dios y madre vuestra, reciban todos ustedes presentes y en la distancia la bendición de Dios Padre Todopoderoso.

Hoy vengo a hablarles mis hijos de la entereza y la fuerza de voluntad de la cual se deben llenar para enfocarse en una vida diferente; es necesario que puedan enfocarse en esta vida en todo lo que pueden agradecer y en todo lo que hay en forma beneplácita desde Dios en su vida. El poder hacerlo, el poder lograrlo hace que todos aquellos dolores de la vida, que todas aquellas circunstancias difíciles puedan desaparecer en la confianza hacia esa voluntad amorosa del Padre.

Queremos mis hijos que le pidan a Dios no solamente que sus problemas se solucionen, no solamente que puedan alcanzar esas metas que quieren sino que Dios los revista de esa fuerza de voluntad que requieren para poder lograr las cosas que anhelan y aunque haya adversidad y haya situaciones difíciles y aunque siempre ante un sueño o ante una situación haya un enemigo, cuando ustedes le dan esa potestad al Padre y pueden creer en Él, pueden transformar todas aquellas cosas imposibles en reales. Por eso hoy quiero invitarlos mis hijos a que dejen de luchar, dejar de luchar no es derrotarse. Dejar de luchar es entender que cuando ustedes entregan un problema, una enfermedad, un agobio, una tristeza a Dios, Él se encarga de solucionarlo. Por eso respiren profundo todos los días cada vez que su cabeza se llene de angustia, cada vez que sientan que su cuerpo les está llamando a hacer un alto porque si lo que ocurre es que su cuerpo les está pasando factura es porque ustedes no le han dado espacio a ese cuerpo de que se recupere, porque han tenido que llevarlo al límite, al límite la enfermedad para escuchar que deben bajar el ritmo de la vida.

Hoy mis hijos pueden más que nunca entender que la vida es una corta experiencia espiritual, que tienen en su vida y en su mira la tarea de que esa experiencia sea realmente maravillosa y puedan vivirla en forma plena independiente; nunca que un ser querido se vaya es un castigo de Dios, nunca que un ser amado haya decidido morir fue una actitud de Dios intransigente. Dios muchas veces lee su cansancio, muchas veces lee en ustedes el dolor y el sufrimiento que hace que en algún momento se deterioren tanto que la vida pierda sentido, que la vida pierda valor, que se cansen de vivir. Y para cansarse de vivir mis hijos no hay edad. Cualquier momento es posible para perder las ilusiones y sentir que ya no hay nada más que hacer.

Hay personas que muy jóvenes sienten que ya cumplieron con su misión de vida y hay otros que aún con el paso de los años sienten la alegría de vivir y que la vida siempre les puede representar una esperanza, algo que aprender, algo nuevo que disfrutar, algo lindo, por eso nunca se olviden que esa meta la tienen que tener en claro en ese proceso de ese bienestar; no se cansen de soñar, no se cansen de creer en un mundo mejor, hoy socialmente hay grandes transformaciones en este país, ese país que muchas veces con el miedo intenta remediar todo dejándolo como estaba antes.

Hoy este país despierta a darse cuenta de la denigración humana, de la forma como el ser humano se deteriora, como no valora su vida, como no valora la vida de otros, como tiene que llegar a espacios tan duros y tan difíciles que son infernales para sentir que de alguna manera pueden seguir viviendo. (Hace referencia la acción de la policía en las calles llamadas “el Bronx” donde se encontraron evidencias de asesinatos, secuestros, torturas sin intervención por más de cincuenta años) un país donde se cree que si no se quita a alguien más lo que se quiere no se puede tener, por eso muchas personas creen que si no es peleando, que si no robando, que si no es luchando, que si no es yendo al extremo de la situación no van a lograr las cosas.

Yo creo que muchos de ustedes en su medida han tenido situaciones extremas, no sólo las situaciones extremas que externamente se puedan vivir de violencia o que se pueda vivir de llegar a un estado marginal de una sociedad; muchas veces el infierno lo han llevado por dentro. Lo llevado en sus preocupaciones, en sus angustias, en sus agobios, en creer que no va a haber un mañana y una solución, en sentir que los problemas son más grandes que ustedes e incluso más grandes que Dios y que Dios no puede o que tal vez no quiere solucionarlos.

Hoy los revisto con toda la asistencia espiritual de la fuerza del Espíritu Santo, la fuerza del Espíritu Santo a la que deben acogerse en todo momento es Dios en acciónEl espíritu Santo es la manifestación del Dios que hace, que les da sabiduría, que les permite superar cualquier bloqueo por más grande que sea y llenarse de iluminación y encontrar la forma, la más amorosa, la más tranquila y la más mágica para poder hallar una solución a esos problemas.

Ya han hecho muchas veces lo que en sus manos está, y cuando ya llegan a ese límite que hicieron lo que podían, deben dejar en Dios sus sueños, sus frustraciones, aquellas cosas que no están evolucionando. A veces ustedes creen que las situaciones que están pasando no son las mejores y ustedes no saben si Dios está tomando en esa situación el tiempo y la preparación que ustedes requieren para algo mejor. A veces Dios los hace estar quietos para que su vida no sea la expresión del sufrimiento, de la angustia y de la lucha con la que vivieron siempre.

Dios sabe lo que está haciendo por ustedes porque si ustedes le han pedido ayuda a Dios, Dios sabe por qué los ha puesto a parar Dios sabe por qué se ha llevado cosas, personas, situaciones de su vida para que su vida se transforme y cada cosa que sucede incluso las más difíciles, incluso las que ustedes no pueden comprender cuando saben que están siendo guiados en la voluntad del Padre y no es su voluntad intransigente, está haciendo que puedan tener el beneficio de su vida y deben ver esto como hermosos regalos para sí mismos.

Al comprender esto, entienden que el hecho de que estén vivos hace que todo lo que ustedes vivan tenga aún mucho por aprender y que haga parte del juego de la vida y que ustedes sigan en el juego de la vida pero pueden trascender a que a cada acto que ustedes quieran realizar, a cada situación haya una contra, un enemigo. Trascender del bien y el mal es pedir esa fuerza al Espíritu Santo de que encuentre esos caminos por encima del bien y el mal para que las situaciones que tienen hoy en su corazón de conflicto y de dificultad pueden superarse.

Les entrego hijos de mi alma mi Manto Sagrado para que lo porten siempre, para que lo porten en todo lugar, para que se llenen de esperanza, de alegría, de luz; les entrego el amor de Dios infinito donde cada uno de ustedes son únicos, especiales y maravillosos para Dios y donde Dios los ama. Dios los ama tanto mis hijos que les ha dado la libertad, la libertad para sufrir, la libertad para enfermarse, la libertad para luchar y que siempre en la lucha aparezca un enemigo, la libertad de sentirse culpables, de sentir que no hay suficiente, la libertad de estar resentidos, de no perdonar y de no saber pedir perdón.

Les entrego hijos de mi alma mi bendición, la de Dios Padre Todopoderoso, mi compañía incondicional y mi intercesión hacia Dios para acercarlos cada vez más a Él y que sientan como todo lo difícil se supera en su nombre.

Con el amor de Dios yo soy María Virgen muy buenas noches mis hijos hasta siempre.

Jesús de Nazaret

Buenas noches hermanos, Jesús de Nazaret al habla.

Hoy voy a orar por ustedes al Padre  y quiero desde el fondo de mi corazón como si yo fuera cada uno de ustedes que permitan que estas oraciones calen en su corazón entendiendo que Dios es amor y perdón y que cualquier equivocación que ustedes hayan cometido en la vida, antes de que fuera cometida Dios ya la ha perdonado, Dios sabe cuán hondo puede llegar el hombre en su maldad, Dios sabe cuán hondo puede llegar el hombre en hacerse daño, en hacérselo a otros en cómo puede llegar hasta el punto de una oscuridad que le puede hacer sentir que no hay nadie a su alrededor, que no hay quien le ayude, que no hay forma de solucionar las cosas.

Padre amado te pido perdón.
Te pido perdón por la manera como me he tratado a mí mismo, como me he llenado de razones continuamente para quejarme, como he peleado con mi cuerpo, con mi condición de ser humano; te pido perdón porque no he podido verte en tu creación, porque siento que no estás ahí para mí.

Te pido perdón porque siento que cometiste un error conmigo, al haberme hecho como soy, al traerme a este mundo difícil porque muchas veces creo que debiste haber hecho las cosas diferentes, que esta tierra no debería ser así, que las reglas no son las correctas, te pido perdón porque te he visto injusto, porque he endurecido mi corazón hasta el punto de querer hacerme daño, de querer hacerle daño a otros, de sentir la vida, como una experiencia en la cual no quiero estar.

Me entrego Padre a ti, para que me permitas entender que el pedirte perdón es perdonarme, me perdono esta fragilidad, me perdono la forma como me he hecho daño, como me he llenado de mortificaciones internas hasta el punto de enfermar, hasta el punto de traer violencia a mi vida, me perdono del sentir que siempre hay un enemigo, que aunque hoy me has dado de comer, que aunque  hoy he tenido un techo, que aunque hoy he vivido un día más dudo, dudo de que mañana pueda tener un techo, dudo de que mañana las cosas puedan mejorar, dudo de que mañana me vaya a sentir mejor.

Me perdono del sentirme culpable por todo, el querer vivir la vida ajena, el querer tomar decisiones por los demás, me perdono por creer que no soy capaz, que no puedo, por sentir que no merezco, por sentir que de alguna manera te pude haber ofendido, que estás bravo conmigo, que me estás castigando; me perdono por no sentirte en mi respiración, por no sentirte en ese nuevo sol que salió, por no verte como parte de lo material, de la noche, de la oscuridad, de toda la creación incluso de la creación opuesta más difícil y creer que no estás ahí, creer que estás luchando con una oscuridad en contra, con un mundo en contra y que perdiste la potestad de la mitad de este mundo y si no de todo.

Me perdono del sentirme derrotado, cansado, agobiado, el no ver una ilusión en mi camino, el creer que ya lo sé todo, el no permitirme sorprenderme con algo nuevo con los ojos de un niño, mortificarme todo el tiempo con el pasado queriendo ir a él a transformarlo o ir a vivir las cosas que ya no son parte de mi vida y que fueron ciclos superados en mi camino.

Te pido Padre que me permitas sentirte en mí, que vengas y me sanes, que vengas y me quites estos pensamientos agobiantes, que vengas y me quites estos puñales de mi corazón que me hacen sentirme solo, triste, aburrido, como si no fuera importante para nadie, como si no valiera para nadie; te permito que vengas y acompañes mis sueños, me hagas sentir lo especial que soy, que pueda encontrar un trabajo no para sobrevivir en él sino para servir, para dar lo mejor de mí, que me permitas tener económicamente materialmente todo lo que necesito, el techo, la comida, el vestido, el esparcimiento, te pido que vengas a mí y me hagas sentir nuevamente como un niño a tu lado, que yo pueda sentir que ha valido la pena estar aquí y que pueda a pesar de lo duro de la vida, lo difícil, lo que no tengo ver y contemplar y vivir las maravillas de este mundo.

Acompáñame en todo momento, lléname en este proceso de la aventura que significa la vida, que sienta que cada día hay una nueva ilusión, que hay una nueva razón para seguir, decirte Padre amado que me comprendo, y que comprendo la terquedad del mundo, que comprendo la inconsciencia de los demás, que me permitas entender la condición humana, la angustia del ser humano que les hace actuar en contra de otros, que les hace sentir que tienen que dominar a otros e imponer a otros para sentir que de esa manera valen comparándose con los demás.

Quiero que me hagas sentir que ya no tengo que hacer esto, que ya no tengo que hacer nada que no quiera hacer, pero que me lleno de fortaleza interior, de alegría, de valentía para ver en cada día lo lindo, para ver en cada día los hermoso y dar testimonio cada día con la misma alegría de que hoy me diste de comer, que hoy me diste otro día para respirar, para aprender, y que bajo la confianza de todo esto que me has dado durante estos años, puedo confiar en que seguirás cuidando de mí.

Me entrego para que me cuides, me entrego para que quites de mi todos los problemas, todos los pensamientos, todas las dificultades, has que mis enemigos desaparezcan y se transformen en amigos y que yo  deje de sentirme enemiga de alguien o enemigo de alguien y que pueda sentir que ha hallo la paz en mi corazón y que no tengo nada en contra de nadie. Que hoy podría morir en paz y tranquilidad sabiendo que he podido perdonar, que he podido vivir intensamente y que me iré con la alegría de que a pesar de que he tenido miedo, he podido superarlo, pero también tendré la alegría de saber lo maravilloso que es la vida y que cada nuevo día después de morir al sueño, de morir a la noche, renaceré para decirte gracias por nuevo día, gracias porque estoy vivo, gracias por qué tú me mandaste a este mundo gracias, porque sé que si no hubiera estado preparado para venir a este mundo no estaría aquí; gracias porque me diste todos los elementos que necesitaba para que mi experiencia fuera perfecta.

Gracias por permitirme hoy más que nunca enfocarme en mí, en mi realidad, encontrar en ti, encontrar en la vida, encontrar en mi mismo en mi misma la razón para vivir independientemente de quien se va o se queda, independientemente de los demás porque hoy estoy entendiendo que si he tenido muchas cosas, muchas personas, muchas razones para ser feliz y no lo fui hoy puedo ser feliz así no esté.

Y te pido que halles esas razones en mis recuerdos de los que se han ido para recordar lo bello de ellos y que yo pueda sentir que un día cuando llegue mi momento me reencontraré con ellos pero que hoy me des la potestad de no sentir ese vacío en mi corazón porque no están ahí.

Recuerden queridos hermanos y pídanle a Dios que les ayude a recordar que no son de aquí. Recuerden que han vivido mucho tiempo en la eternidad de una vida que no termina pero que no es una condena, que pueden experimentarse en muchas cosas y de muchas formas y que cuando vuelven al Padre se retroalimentan pero que pueden de ahora en adelante permitirle a Dios con esta fuerza del Espíritu Santo que los alimente para sentir que tienen la energía suficiente para verlo a Él en este mundo.

Padre permíteme verte en toda tu creación. En lo feo, lo bonito, en las personas, en los malos, en los buenos, en los niños, en los ancianos, en los jóvenes, permíteme verte detrás de esas personas difíciles, abusivas, violentas, duras, prepotentes y que pueda entender por qué se portan así.

Les entrego queridos hermanos hoy mi oración para que sepan que le pueden hablar al Padre directamente como hoy lo estoy haciendo por ustedes. No tengan miedo de decirle “Padre”  y permítanse encontrar en su corazón EL PERDÓN para que SU oración sea cercana al Padre y ustedes se permitan que todo esto que quieren pueda fluir y su vida sea maravillosa.

Les bendecimos hermanos y bendecimos todo lo que consumirán esta noche, los acompañamos para que cada día tenga más en el sueño pero también en la vigilia, el contacto con el Padre y puedan encontrar en la naturaleza, en el descanso, en los procesos de conexión con la diversión, con la alegría, la potestad de ver lo maravilloso de la vida y cada día encuentren una razón para conectarse con lo bello, con lo hermoso; ya han conocido muchas veces lo aberrado del mundo, hasta dónde el ser humano puede llegar en su denigración pero por qué no permitirse ahora apoyarse en lo bueno, permitirse hacer la diferencia.

Háganse diariamente el propósito de agradecer y de conectarse con lo bueno de la vida y cada vez que aparezca un pensamiento agobiante deséchenlo y permítanse incluso cuando aparece un problema no enfocarse en él sino enfocarse en la solución y enfocarse en que incluso si no la ven Dios lo solucionará.

En la Gracia de mi Padre queridos hermanos Jesús de Nazaret al habla, muy buenas noches.

Liú: meditación dirigida a conectarnos con el corazón.


2 comentarios:

  1. Sabias enseñanzas, cada semana es.un motivo de reflexión y crecimiento encontrarlas y meditarlas. Gracias.

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  2. Gracias por compartirlas.

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