LIBRO DE MAGIO MARÍA VIRGEN Y JESUS DE NAZARET AL HABLA2 : ESTÁ A LA VENTA A TRAVÉS DE
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Magio, mensaje del Rosario Junio 16 de 2016
María Virgen
Mis hijitos y mis hijitas queridos muy buenas noches, soy María Virgen
madre de Dios y madre vuestra, reciban mi bendición y la bendición de Dios
Padre Todopoderoso. Todos ustedes mis hijos en la distancia reciban mi
bendición y la bendición de Dios Padre Todopoderoso.
Todo lo que sucede en la vida mis hijos han que pueda parecer lejos de
ustedes debe llevarlos a un acto de reflexión; toda esa violencia que pasa en
el mundo los debe llevar a ustedes a que puedan aprender cuántas de esas cosas
que están sucediendo realmente provienen de parte de esos odios, de parte de
esas siembras que se hacen de discriminación, de esas siembras que se repiten
una y otra vez generando en los seres humanos actitudes divisorias, razones
suficientes para poder atacar a otros o razones suficientes para poder
alegrarse del mal de otros y muchas veces se interpreta ese dolor de esas
personas que pueden ser personas que de alguna u otra manera pueden ser tomadas
como personas difíciles o personas para algunos que no deben existir, como
personas que de alguna manera Dios ha castigado. Dios hijos de mi alma no castiga a nadie ni se alegra del mal y del
dolor de ninguno de sus hijos así sus hijos profesen una creencia u
otra, así sus hijos vivan de una manera u otra, así pertenezcan a un bando o
pertenezcan al otro y el poder entender esto que todos tienen derecho a pensar,
a vivir, creer en lo que ellos consideren, es
parte del respeto de la libertad de otros y poder vivir en esa
armonía donde todos pueden saber que son diferentes y que tienen el derecho a
respetarse y el deber de respetarse en esas diferencias los unos a los otros
hace que puedan convivir en esa forma armónica que Dios ha querido para sus
hijos porque la Tierra es de todos, porque este lugar es dado a todos y si Dios
los mandó a este mundo llamado la Tierra eso significa que tienen derechos, que
tienen la misma posibilidad que otras personas de vivir en la abundancia, de
vivir en la alegría, de vivir en la esperanza, de tener todas las cosas que
requieren.
Cuando empiezan a entender esa libertad del ser se levantan las
fronteras, se levantan los límites que significan esas condiciones étnicas, las
condiciones raciales, las condiciones sociales, las condiciones del lenguaje
que los separa a unos de los otros para hablar un sólo lenguaje que es el
lenguaje del amor, que el lenguaje del amor ustedes lo conocen mis hijos no
conoce fronteras, no conoce límites y hace que puedan comprenderse y entenderse
por encima de las diferencias que puedan haber.
Para pelear mis hijos, para hallar razones para hacerle daño a otra
persona, para discriminarla, para poder hablar mal de esa persona hay muchas
razones pero ya se han dado cuenta mis hijos que esas palabras violentas, que
esas palabras que vienen a discriminar a otros, a hablar mal de otros, a crear
injurias de otros, son palabras supremamente nocivas que no solamente se quedan
en las palabras sino que también pasan a los actos y esto no solamente para que
ustedes lo puedan revisar y decir ése el problema de otras personas o de un
país o de un lugar lejano; hagan ésa reflexión porque así como sucede que se
pasa de las palabras violentas a los actos violentos, en un país pueden darse
cuenta que también eso sucede en sus comunidades más pequeñas incluso dentro de
su misma casa; eviten mis hijos el hablar mal de alguien, el sentarse por horas
a criticar lo que otra persona debería hacer con su vida. Si realmente a
ustedes les importa esa persona hablaran directamente con esa persona le dirán
qué es lo que les molesta, le darán un consejo y evitarán que esas palabras los
llene de resentimiento y llene de resentimiento a otros frente a esas personas.
Quiero igualmente hijos de mi alma que trabajen en ese resentimiento que
llevan en su corazón. Cuando algo les molesta de alguien es porque ustedes
necesitan revisar dentro de ustedes ese resentimiento, ese odio que puede haber
frente a esas personas y qué es lo que no han podido perdonarle a esas
personas; miren si en algún momento ustedes están bravos con esas personas
porque no les hablaron, porque les hablaron mal o porque no se ocuparon de
ustedes o porque les hablaron de forma difícil o porque de alguna manera esa
persona ha sido grosera, violenta, intransigente con ustedes, ha sido
mentirosa, ha dicho de ustedes chismes, miren que hay algo que en algún momento
esa persona pudo haberles hecho que ustedes no han podido superar y no han
podido mejorar y si es una persona ajena es porque ustedes necesitan trabajar
en esas divisiones que tienen de los complejos de superioridad y de los
complejos de inferioridad que los hacen estar resentidos con esas personas por
como llevan su camiseta, por el país al que pertenecen, por la condición de su
raza, por como se visten, por el donde viven, todas esas cosas mis hijos las
deben reflexionar y deben trabajar en ustedes diariamente en que esa
mortificación pueda desaparecer por lo que los demás hagan o dejen de hacer con
su vida, por lo que los demás hagan o digan de ustedes o piensen de ustedes
para empezar a vivir en una vida en libertad.
Hoy quiero mis hijos que oren
nuevamente por la paz del mundo, que oren nuevamente por la paz del país,
que oren nuevamente por la paz de su familia, que oren nuevamente por su paz
interna; vivir en paz es un regalo maravilloso donde ustedes pueden estar
tranquilos y cuando están en paz la tranquilidad mental aparece, cuando están
tranquilos en la paz del espíritu la mente se silencia y una vez que se silencia
la mente de todo lo que pueden arreglar o de todo lo que los hace atacar a
alguien o de todo lo que los hace mortificarse, la mente empieza a actuar en
forma creativa y proactiva y empieza ocuparse de cosas bonitas, agradables,
productivas, de cosas que permitan el avance en su propia vida y el avance de
los demás.
Los bendecimos mis hijos para que puedan tener esa sabiduría del
Espíritu Santo y la humildad en el corazón lo suficientemente grande como para
que revisen su propia vida, como para que se ocupen de ustedes mismos y revisen
dentro de ustedes qué es lo que los mortifica, qué los hace sentir mal, qué los
lleva a juzgar a otros y que ustedes empiecen a reflexionar sobre todo esto
para encontrar esa paz del corazón.
Les entregamos en el nombre Dios el Espíritu Santo que hoy se simboliza
en lo que van a consumir, que se simboliza en ese Manto Sagrado que le entrego
a todos los presentes y en la distancia para que lo imaginen sobre ustedes para
que a su vez puedan entregarlo a esas personas por quienes sienten rabia,
sienten dolor, por quienes sienten compasión o tristeza y por quienes quieren
que haya esa intercesión de la divinidad en cuanto a la comprensión de la vida.
Reciban niños de mi alma mi bendición y la bendición de Dios Padre
Todopoderoso; con mi amor y el de Dios el Espíritu Santo sobre ustedes,
yo soy María Virgen muy buenas noches mis hijos hasta siempre.
Jesús de Nazaret
Buenas noches hermanos, Jesús de Nazaret al habla.
Éstas oraciones que ustedes hacen previamente que son oraciones
repetitivas llevan como fin que ustedes puedan apagar un poco el fuego que
tienen dentro de ustedes, que puedan enfocarse en esas palabras que se dicen
que alguien más un día resucitó y que a ustedes les parecieron bonitas esas
palabras y que ustedes vuelven y las establecen al Padre, pero cuando terminan
de hacer éstas oraciones que para algunas culturas terminan siendo unos mantras
tienen la posibilidad de empezar a tener un diálogo con Dios; la oración como
la conocen, que hacen repetitivamente, que hacen como un rosario o hacen como
la lectura de la Biblia o cualquier otra oración que les guste hacer y que lo
hagan consecuencialmente, esta oración es el preparativo para ese diálogo con
Dios. Háblenle a Dios todos los días con nuevas palabras. Cuando ustedes
enfocan una relación en alguien no les dicen siempre las mismas cosas, no
siempre tienen los mismos diálogos prefabricados, a veces los tienen para decir
“hola cómo estás, como te ha ido, qué hay de tu familia, que hay de Cuchipe,
qué hay de Dolores, qué hay de tu vida, cómo te ha ido” y en gran medida muchas
veces es como un formalismo, en algunos casos hay personas que sí se enfocan en
cómo tre ha ido, en cómo estás, te veo más recuperado, te veo elegante, cómo va
tu mamá, cómo va tu hermano, se solucionaron aquellos problemas y digamos que
después de eso empieza a haber un diálogo nuevo realmente, empiezas a tener
realmente algo que contar, que decir; ¡a nosotros nos gusta que nos cuenten
cosas!, a Dios le gusta que ustedes le pidan…
Pero un día ustedes decidieron sentirse culpables de pedirle a Dios y
creer que era malo pedirle al Padre y empezaron a ser lo suficientemente
hipócritas como para no pedir para ustedes pero pedir para los demás porque un
día les enseñaron que pedir para los demás ¡sí era bueno! (¿?) entonces cuando
se encuentran con Dios, empiezan a pedir para muchas personas muchas cosas que
a la hora de la verdad ustedes no saben si les sirven, si esas personas lo
quieren o no porque una cosa es que ustedes pidan por otras personas y otra
cosa es que la persona pida por sí misma. Pero qué diferencia puede haber
realmente para el Padre en que ustedes pidan para otra persona a que ustedes
pidan para ustedes mismos si finalmente Él es el Padre que da; entonces para Él
es como el niño que dice papá, te manda decir mi hermanito que si le das un
cuento y llega el otro que dice: papá que te manda decir mi hermanito que si le
regalas un carro y en algún momento el Padre termina diciendo y él porque
no me habla a mí, ¿es que me tiene miedo que me tiene que mandar razones?
porque en algún momento el padre se sienta y le dice “-ven aquí hijo y tú me
dices en persona qué es lo que quieres, qué es lo que esperas, cómo es que
quieres el carro” el Papa le responde y “-como querrá el carro tu hermanito” y
el niño se devuelve dice un voy a ir a preguntarle mi hermanito cómo es que
quiere el carro y le dice al otro “- y ¿cómo es que tu hermanito quiere el
cuento?”, “- no me dijo, voy a ir a ver cómo es que quiere el cuento”.
Díganme si no es mejor pedir directamente porque es que resulta que el
niño puede decir “yo creo que le puede gustar un cuento de las Tortugas Ninja”
y el otro puede decir “yo lo creo que le puede gustar un carro grande” y cuando
Dios le manda el regalo que le mandaron en razón a decir y el niño recibe el
regalo pues va a decir “está bonito pero yo no lo quería rojo, es que rojo es
el que le gusta mi hermanito, a mi no me gusta el rojo, me gusta el azul” y
cuando le llega el cuenta al otro, el otro dice “es que a mí no me gusta las
Tortugas Ninja, a mí me gusta es Batman, al que le guste las Tortugas Ninja es
a mi hermanito” y entonces el niño recibe el regalo a regañadientes; hubiera
sido mejor otra cosa, ¿por qué?, porque un día decidió el niño mandar razones a
Dios y no hablar directamente con Él. Por eso algunos dicen que para qué hablen
con los Ángeles, para qué hablan con Jesús y con la Virgen si no se puede ir
directamente con el dueño, a hablar directamente con el Padre. Pero Dios sabe
que a ustedes les gusta mandar razones y que ustedes le tienen miedo y que a
ustedes les enseñaron el temor a Dios y no el amor a Dios porque si ustedes
amaran a Dios, si ustedes amaran a Dios como su Padre no tendrían miedo a
hablarle directamente y decirle qué es lo que ustedes quieren, por eso nosotros
llegamos a ustedes a acercarlos a Dios y a que ustedes puedan sentir más esa
potestad como hijos de Dios.
Mi tarea a su lado es guiarlos como la de mi Madre, como la de muchos
maestros celestiales es la de guiarlos a que ustedes puedan encontrar realmente
lo que quieren, ayudarlos a definir y logramos leer su corazón de tal manera en
que podemos interpretar sus palabras, devolvérselas en situaciones y hechos
para que ustedes definan si realmente lo quieren, pero se trata de que ustedes levanten su cabeza como
humanidad y empiecen a sentirse con el derecho de hablarle a Dios pero
para sentirse con el derecho de hablar a Dios ustedes deben tener una relación
más cercana con Dios; empezar a incorporarlo a su vida, empezar a hablarle
todos los días, empezar a contarle sus cosas. Ahora, que si se sienten mal de
una vez llegando a pedirle a Dios, ¡salúdenlo!, vayan y le dicen por qué le van
a dar gracias, díganle a Dios: “Gracias porque hoy estoy vivo, gracias porque
respiré, gracias porque tuve un día terrible pero ya se acabó, gracias porque
me has dado todas estas cosas” y después de que das gracias pues ahí sí te sientes
con el derecho de hablar.
Hay algunos para los cuales además del agradecimiento el sentir que
pueden dar algo de sí mismo en pos de alguien que también son canjes que las
personas hacen, pues puedan sentir que le ofrendan a Dios algo, aunque Dios puede
que no necesite nada o no requiera nada para darles. Un padre amoroso le da a
sus hijos lo que esos hijos quieren independientemente de si lo merecen o no,
los padres que canjean cosas con sus hijos los vuelven interesados y les hacen
creer a sus hijos que sino dan nada no van a recibir nada en la vida y que les
toca venderse de alguna manera para hacerlo. El diezmo queridos hermanos nunca
debe ser un acto obligatorio, debe ser un acto de conciencia amoroso, debe ser
un acto de hermandad, no debe ser un acto financiero como tal porque muchos
dicen “yo lavo mi conciencia, ya dí el 10% de mi mensualidad, que nadie me
moleste más” y yo quiero preguntarles si el que no da el diez sino el cinco por
ciento, gana menos menos, o el dos o el uno.
Y quiero que reflexionen sobre todo esto para que entiendan que cuando ustedes están haciendo un acto de ofrenda
debe ser un acto amoroso no un acto obligado, es diferente portarse bien
para que les den un regalo a portarse bien por la convicción que tienen de
hacerlo; es muy distinto, por eso Dios no los obliga a nada. Para Dios sería
tan fácil mover los hilos de la vida para asustarlos y que ustedes pudieran
respetarlo y creer en Él porque si no los mata o porque si no les manda las
siete plagas de Egipto y el Dios del amor,
el Dios verdadero no es el de las Siete Plagas De Egipto les
cuento.
El Dios del amor no necesita que ustedes le
teman para bendecirlos, ni que ustedes hagan su voluntad (la de Él) para
bendecirlos. La voluntad de Dios está cifrada en la libertad que les
dio, hay unas reglas en la vida
pero no son unas reglas impuestas, son unas reglas protectorasy fíjense
que algunos se saltan del sentido común de lo que son las reglas y de lo que
puede ser bueno a querer armar los niños para que se defiendan de otros y
sentir que de esa manera realmente puede no pasarles nada porque tienen un
revólver más grande que la otra persona (referente a las leyes de Estados
Unidos, la respuesta a las tragedias de estos días en Orlando) porque de esa
manera los demás lo respetan por miedo porque tienen un revólver, porque tienen
la forma no solamente de defenderse sino de dañar a alguien porque tú no sabes
en qué momento la defensa se vuelve un ataque. ¿Se han dado cuenta que cuando
ustedes son partícipes de una persona que les está haciendo daño otra y no
saben el contexto de la situación ustedes van a defender al que están
agrediendo? y cuando les cuentan que es que previamente ese señor se robó unos
calditos de gallina o se robó un celular, o violó una niña ustedes empiezan a
ser partícipes de esa violencia para decir “sí, peguémosle duro, se lo merece”
y se vuelven jueces y se vuelven parte.
Pero cuando ustedes miran el punto preciso de la violencia, se dan
cuenta queridos hermanos que no importa si es de un lado o de otro, no importa
si es un bando u otro no importa quien pegó primero, es un acto doloroso, es un
acto terrible, es un acto que no deberían de cometer los seres humanos por las
razones que fueran; entonces volviendo a mi Padre y lo que debe
significar su relación con Él queridos hermanos ya saben que Dios les va a
permitir hacer lo que ustedes quieran y ¿saben por qué?, por que si otros lo
hacen ustedes también lo pueden hacer bueno, regular o malo. Pero tienen la
capacidad de elegir ser buenas personas sin ser tontos, tienen la oportunidad
de elegir no ser violentos, no reaccionar frente a la violencia de otros con
violencia pero inclusive ir mucho más atrás a elegir que la violencia no haga
parte de su vida y que ustedes no tengan que pasar por eso. Por tal razón a
algunos lo roban todo el tiempo en forma violenta y a otros nunca los roban así
pasen cien mil veces por la misma calle, por la misma calle peligrosa que a
otro robaron o atracaron, y ¡eso es
creación! y son responsables de ésa creación.
Los invito queridos hermanos a que puedan
reflexionar sobre todo lo que sucede y puedan darse cuenta que todo lo que pasa
en la vida lo pueden tomar ustedes como una enseñanza positiva para elegir un
camino diferente; elijan comprenderse como hermanos así unos
sean gays, así otros sean más pálidos que otros porque es que el problema es
que unos por negros, otros por amarillos y otros por cafés y otros por ojos
azules y otros por ojos negros. ¡Siempre va haber una razón para discriminar a
otros! unos por muy flacos, otros por muy gordos, siempre va a haber una razón
en medio de la discriminación y la violencia para poder tildar al otro de
estorbo, de plaga de diferente; hasta las
moscas que algunos odian tienen una tarea muy importante dentro de la
naturaleza, tienen un proceso necesario creado por Dios y son maravillosas
cuando las usas, cuando las miras y cuando entiendes qué es lo bueno que hacen y
quiero que puedan queridos hermanos pedirle a Dios esa sabiduría y esa
comprensión.
Bendecimos lo que consumirán en esta noche y les traemos la paz del
Espíritu Santo, como siempre es un placer hablar con ustedes queridos hermanos,
Jesús de Nazaret.
Liú: meditación estiramientos musculares.