María Virgen
Mis
hijitos y mis hijitas queridas muy buenas noches, soy María Virgen madre de
Dios y madre vuestra; reciban mis hijos amados presentes y en la distancia mi
bendición y la de Dios Padre Todopoderoso, la bendición de sus proyectos, de
sus hogares, de sus familias, en el nombre del Padre, del Hijo, del Espíritu
Santo, amén.
Hoy quiero que sientan que de nuestra
parte siempre habrá una felicitación por todo lo que han hecho en su vida;
tendrán la felicitación porque cualquiera que sea el camino que hayan elegido
tendrán el acompañamiento, pero también será la oportunidad de experimentar
para estar cada vez más cerca de Dios.
Ustedes se han dado cuenta que en esos
retos difíciles de la vida es cuando más necesitan de ayuda, necesitan
acompañamiento, porque han decidido caminos difíciles, pero cuando eligen un
camino más fácil de vida se dan cuenta que también Dios se siente en todas las
bendiciones que trae la vida y pueden ir comprendiendo que la voluntad del Padre
es la de permitir que ustedes puedan vivir esa vida en la expresión de lo
intenso que quieren que sea su existir.
Venimos para enseñarles que hay caminos
más fáciles, venimos para que aprendan de sus generaciones anteriores sobre
todo lo duro vivido para que no vuelva a pasar lo mismo, para que no se repitan
las historias y para que no se sientan condenados a vivir las mismas
experiencias difíciles que han vivido sus ancestros. Hoy los acompañamos para
que sientan en este día de oración y de sanación que están recibiendo esta
sanación del Padre celestial de la Corte médica, del Arcángel Rafael para que
esas dolencias que has tenido, para que esas experiencias que han puesto su
cuerpo en condiciones precarias, puedan solucionarse puedan mejorarse y puedan
recuperar su salud física.
De la misma manera venimos a que todas
esas mortificaciones de sus emociones puedan irse, puedan volver a un estado de
paz, de calma, de tranquilidad y que todos esos pensamientos mortificantes y
también limitantes de supervivencia se vayan para empezar un camino de
prosperidad; no se juzguen mis hijos en cómo están haciendo las cosas y en cómo
están haciendo su tarea porque estamos guiando sus manos con su trabajo, porque
estamos guiando sus decisiones familiares, porque cuando le piden sabiduría a
Dios siempre estamos ahí para dar esa tutoría para que les vaya bien; para que
les vaya bien en esos nuevos trabajos que están teniendo, para que les vaya
bien en esas nuevas relaciones de pareja que estén haciendo, para que les vaya
bien en esa nueva etapa de construir una familia y un hogar en una relación de
pareja y en la construcción de ese hogar para los hijos, los acompañamos para
que en esa experiencia los tiempos que cambian donde los hijos crecen y se van
empiecen también a tener el fortalecimiento para entender que sus hijos están
guiados en la distancia por ustedes acompañados y que están teniendo el
acompañamiento divino para que ellos puedan sacar de su experiencia de vida lo
mejor y puedan aprender desde una experiencia más sencilla como les tocó a
ustedes.
Gracias a su amor, no a su sacrificio
les han mostrado a sus hijos y les han trazado caminos mejores, ellos no tienen
que aprender en el dolor, en el sufrimiento, ellos no tienen que aprender en la
mortificación de la vida, de hecho están aprendiendo que hay formas más
sencillas de vivir y que han creado estas nuevas generaciones para que ellos no
vean guerra en todo lado, tal vez a veces pueden ser demasiado inocentes o
demasiado ilusos ante sus ojos pero Dios le ayudará para que ellos puedan aprender
de sus propios errores y para que ellos también puedan sentir de una manera
amorosa que todos ellos estarán recibiendo la compañía para aprender de esas
experiencias, para también saber en qué momento pueden utilizar esa sabiduría,
para también aprender a poner límites frente a aquellas personas que pueden
aprovecharse de ellos o pueden hacerles daño.
Hoy les entrego mi manto sagrado mis
hijos para que también lo otorguen a todas aquellas personas por quienes han
orado y por su salud, por aquellas personas que hoy ustedes han tenido en alta
autoestima para orar por ellos y por supuesto que estamos interviniendo para
que ellos se sientan bien, para que puedan aprender que pueden recuperarse, que
pueden sanarse que aunque terrenamente haya diagnósticos muy difíciles
incurables, recuerden que para Dios no hay una sola enfermedad incurable y no
hay una sola cosa imposible, máxime cuando se entregan a Dios en la conciencia
de que Él como ese padre amoroso siempre les puede ayudar y ustedes siempre
pueden recuperarse; igualmente quiero decirle a mis hijos respecto a las
preocupaciones económicas que poder poner esas cosas que les preocupan sobre el
dinero en las manos de Dios es saber que estará habiendo todo un acompañamiento
para solucionar esos temas económicos para que avancen sus expectativas
materiales, para que reciban el premio de lo que ustedes han necesitado tener,
ganarse en una herencia, en una pensión, en una rifa en todas esas condiciones
bonitas que van más allá de la capacidad sobre lo que ustedes pueden hacer en
forma personal.
Hoy los bendigo, bendigo el agua,
bendigo los alimentos, bendigo en mi gracia su recuperación para que sientan
bien para que estén saludables de ahora en adelante, reciban todos ustedes mis
hijos mi bendición. El amor de Dios también con ustedes.
Yo soy María Virgen muy buenas noches
mis hijos.
Jesús
de Nazaret
Buenas
noches hermanos en la gracia de mi Padre Jesús de Nazaret.
Llega un momento hermanos en que ustedes
han orado, tanto han pedido tanto, han hecho esta comunión tan grande con Dios
con la voluntad divina, con el no renunciar a sus sueños, con no renunciar a su
fe, que empiezan a pasar cosas mágicas y maravillosas; empiezan a ver que así
como todo se estancó, como todo dejó de funcionar, empezó a transformarse y de
la nada empezaron a darse esos resultados que habían tenido en espera durante
tanto tiempo.
Hoy está llegando en bendición lo que
han pedido de una forma mucho más grande de lo que ustedes hubieran podido
pensar, de una manera inagotable porque cuando se unen al Padre en esas
bendiciones de todo lo bueno que Dios les puede otorgar, la abundancia de todas esas
cosas buenas no tiene límite, ya no importa hermanos quién fue su
enemigo, ya no importa cuánto sufrieron, ya no importa cuántas cosas ustedes
pudieron hacer mal, porque en la gracia del Padre más que llevar una suma y
unas restas sobre si ustedes les deben a los demás o los demás les deben a
ustedes están llegando a un punto bonito de aprender, de concientizarse y de
mirar qué aprendieron de todo eso que sucedió en el pasado, para decir ya sé que esto no va a volver a pasar porque
ya aprendí de esto, ya lo superé, pero
también tengo la certeza y la libertad que Dios me ha dado para decir que no
necesito volver a pasar por lo mismo.
Así que cuando realmente ya la
enfermedad cumple un ciclo, cuando ya la pobreza cumple un ciclo en su vida,
cuando al no tener trabajo, cuando no tener dinero, cuando el no tener éxito,
cuando no es tener pareja o cumplir los sueños que han pedido al Padre han
cumplido un ciclo, lo que empieza a pasar es que empiezan a darse cosas que
ustedes habían esperado hermanos por tanto tiempo pero también cosas más allá
que nunca se hubieran podido imaginar.
Ahora como se los hemos dicho tantas
veces acostúmbrense a lo bueno de la vida, acostúmbrense a vivir bien, ya no
alimenten el odio, ya no alimenten el pasado, ya no sigan envenenándose en cómo
tienen que actuar los demás, en cómo tendría que actuar un presidente, cómo
tendrían que actuar unos gobernantes, de cómo tendría que actuar su pareja, de
cómo tendrían que actuar sus hijos, de cómo debieron de haber actuado sus
padres, porque lo único que logran con esa mortificación es llenar más su vida
de una equipaje pesado que difícilmente van a poder dejar en el camino; así que
ir desocupando hermanos ese equipaje es entender que todo el mundo se equivoca,
pero es ser y dejar ser,
entender que ustedes marcan un territorio donde si ustedes son Paz nadie les
robará La Paz, donde si ustedes son abundancia nadie les va a robar la
abundancia, donde si ustedes son alegría nadie les va a quitar su felicidad,
porque están convencidos desde adentro que ustedes son dueños de algo que en el
nombre del Padre absolutamente nadie podrá quitárselos.
Igualmente hermanos quiero que sepan que
los acompaño, que en muchos momentos los llevo a que miren ese miedo que tienen,
que los llevo a afrontar sus miedos pero que así como los acompañamos hermanos
a transitar la noche más oscura, también los ayudamos a que vean el amanecer y no solamente
ver sino que puedan disfrutar las mieles de todo lo bonito que Dios tiene para
darles, porque nunca deben olvidar que el Padre es abundancia, que tiene más que darles
que ustedes que pedirle, pero que cuando ustedes aprenden a pedirle a Dios en la conciencia de que como
hijos de Dios merecen todo lo mejor de la vida, empiezan a sentir que lo
hay para ustedes y si ese amor es mucho más grande la licencia de ese amor
desde esa luz que ustedes.
Y si ese amor es mucho más grande la
esencia de ese amor desde esa luz que ustedes quieren brindar a esas personas
que sufren, hará que ustedes no estén imponiendo que esa persona no tenga
experiencias o que la estén envolviendo en una caja de cristal para que no viva
nada sino que entenderán que siempre habrá protección divina y acompañamiento
incluso para que estas personas tengan la conciencia de que no tienen que pasar
por condiciones extremas y difíciles.
Hoy oramos por todos los que sufren en
el mundo, por todos los que no tienen la conciencia de que todo lo que sucede a
su alrededor y dentro de ustedes es una elección; que no tienen la conciencia
de que si su mundo es una crisis continua, que si todo el tiempo están
atrayendo conflictos y ladrones, si todo el tiempo están trayendo personas que
los engañen o que los roben, es porque dentro de ustedes está ese temor esa
fragilidad y esa forma de vibrar en algunos momentos en los papeles de víctimas
para que otros les hagan daño y en otros momentos tener que defenderse de una
forma dura frente a aquellos que le hacen daño como victimarios ustedes de
ellos.
Así que hoy pueden parar y respirar un
momento y decir ¿será que yo necesito hacerme partícipe de una guerra? ¿será
que yo necesito enfermarme? ¿será que yo necesito vivir solo? ¿será que yo
necesito vivir en pobreza? ¿será que yo necesito que me echen de un trabajo? ¿será
que yo necesito vivir sin una pareja que me quiera? y cuando pueden hacer un
alto para respirar y realmente decir qué quieren estarán disolviendo muchas
cosas en su vida de las que ustedes han estado realmente convencidos que es la
mano de Dios trayéndoles males o que es la mano de Dios imponiéndoles cuando no
se dan cuenta que con su elección siempre están eligiendo, incluso cuando dicen
yo no tengo un poder están dejando
que otros los tengan para que esas personas en esa conciencia o inconsciencia
de su poder los utilicen y sean ustedes esos bobos útiles para esas personas
que vienen a hacerles daño, porque también tienen la oportunidad de parar y de
poder decir “Si yo entrego mi amor
libremente limpiamente y sanamente espero que también quien llegue a mi vida lo
haga de la misma manera porque es mi verdad puesta sobre la mesa.”
Por eso no se les haga raro que si han
tenido un poco de pretendientes que no sirven para nada, puedan ustedes sentir
que si ahorita no aparece nadie sencillamente es porque se está cerrando el
universo de aquellos hombres que venían a enseñarles en la traición, pero que
esa puerta no será cerrada para que lleguen personas para enseñarles a ustedes
en las condiciones del respeto y el amor que hoy están teniendo por cada uno de
ustedes.
Dios los bendiga queridos hermanos
hermanas con todo mi amor y mi alegría de estar en su corazón de acompañarlos
de esta manera pero también de decirles que continuamente les estoy mandando un
mensaje mi amor. Yo soy Jesús de Nazaret
Meditación
de Liú Buenas noches, Yo soy Liú,
muy buenas noches Yo soy Liú, vamos a
respirar profundo, hacer este Polo a tierra, vamos a visualizar en nuestra
pantalla mental cómo se disuelve en ella viendo una pantalla en blanco es
exceso de pensamientos atropellados, cómo vamos empezando a limpiar esos
pensamientos hacia el futuro de angustia, preocupación, cómo vemos que el
viento el aire se va llevando esos pensamientos difíciles.
Empiezan a sentirse más tranquilos cómo
van apareciendo una a una las preocupaciones por su estado físico, por su salud,
las preocupaciones por sus seres amados, las preocupaciones financieras, las
preocupaciones a nivel de pareja, todo estos pensamientos van pasando uno a uno
que les han quitado la vida, que les han quitado la tranquilidad, que les han
quitado la emoción hermosa de poder sentirse contentos con este existir y
sienten como el haber hecho este Polo a tierra empieza a salir de su cuerpo el
agotamiento, empiezan a sentir ondas en expansivas de un dolor que van dejando
salir de su cuerpo, la tristeza, la rabia, el miedo, la angustia, la impotencia,
la soledad, desamor, abandono, empiezan a salir todas estas emociones que de forma tan
complicada han hecho que ustedes pierdan su armonía, que ustedes pierdan su tranquilidad.
Empiezan a mandarle nuevos mensajes a su
cuerpo de que todo está bien, empiezan a ser conscientes de la necesidad que su
cuerpo tiene de vivir en el placer y cómo empiezan a establecerse cambios en
las neuronas a nivel mental para empezar a generar nuevos procesos de
pensamiento, cómo empiezan a generarse neurotransmisores que en forma biológica
van estimulando la dopamina, la oxitocina, cómo empieza a formarse toda esa
energía maravillosa de esos químicos dentro de su ser que van a hacer posible
que se sientan más tranquilos, las endorfinas y cada vez se están sintiendo más
contentos, más tranquilos, cómo se equilibra su ciclo circadiano, cómo vamos a
equilibrar que en el día puedan estar activos, que mantengan las condiciones de
mantener en el día con toda esa actividad sana de la adrenalina, del cortisol,
de la motivación para estimular su cuerpo y que su cuerpo se sienta activo como
de la misma manera en ese equilibrio del ciclo circadiano pueden en la noche
dormir, descansar, repararse, se preparan en este momento para entregar su
cuerpo en la noche a la corte médica para que mientras ustedes descansan
recuperen energía, se salen de cualquier molestia, cada uno de los órganos de
su cuerpo, cada uno de los sistemas de su cuerpo en esta farmacia hermosa y en
este gran laboratorio interno que tiene su cuerpo se restablece y descansan.
Permiten igualmente que su espíritu
pueda liberarse y pueda ir mientras ustedes duermen a lugares hermosos, puedan
ir a estar al encuentro de Dios, al encuentro de las personas que aman y que
puedan tener sueños hermosos para no necesitar esas pesadillas del día y que si
en algún momento aparecen esos sueños, sean liberadores de todas esas energías
represadas de emociones difíciles; empiezan a sentir como su mente va
archivando y va poniendo en su lugar cada uno de los eventos de las
experiencias diarias y cómo dejan de verse
como circunstancias complicadas…
(sigue en el video)
Les dejo mi mejor energía y me llevo la de
ustedes yo soy Liú
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