Rosario 13 JUNIO de 2024

 

María Virgen

Mis hijitos y mis hijitas queridas buenas noches, yo soy María Virgen madre de Dios y madre vuestra, reciban todos ustedes presentes y en la distancia mi bendición y la de Dios Padre Todopoderoso.

Abran en este momento mis hijitos sus manitas para recibir esta sanación del Espíritu Santo, para recibir el amor de Dios manifestado en este momento en sanación, en tranquilidad, en luz, en transformación; sientan que se va disolviendo el pasado como una experiencia dolorosa de la cual sentirse arrepentidos, sientan como se disuelve el pasado del resentimiento y del dolor y como empieza a ser cada experiencia un ítem logrado que hoy está permitiéndoles ser sabios y elegir un presente, elegir un mañana diferente.

Abran sus manitas para recibir el regalo de la vida en lo material, en el amor, en las oportunidades, en las experiencias bonitas que está haciendo ahora la luz del Espíritu santo que ustedes se vuelvan uno en Dios en Padre, Hijo y Espíritu Santo, que sientan mi Manto Sagrado llenándolos de alegría y de confianza en la vida, que sientan mi acompañamiento como una madre que los lleva en mi gracia a que puedan lograr sus sueños y tener esa mayor confianza y cercanía en Dios.

Mi tarea igual que la de mi hijo es acercarlos a Dios, es acercarlos a su presencia; igualmente con su infinito amor Dios les ha enviado compañeros de vida enviando a sus ángeles a su lado, ahora con los ojos de su corazón sentirán sus alas envolviéndolos, sentirán que ellos harán ese correo de ángeles y cuando sea también necesario y ustedes lo permitan en el corazón, la realidad cambie para volverse magia.

En este momento están siendo acreedores de esos milagros de vida de poder sentir que la voluntad de Dios está conforme a ustedes, que Dios quiere y están en este momento cotejando y colapsando el tiempo para que los tiempos de Dios sean suyos y para que sus tiempos sean los de Dios en una perfecta armonía donde hoy puedan declarar que son abundancia, donde hoy puedan declarar que son saludables, donde hoy puedan declararse tranquilos, donde hoy puedan declararse amados, donde me puedan declararse totalmente felices por estar haciendo parte de esta tierra.

Los envolvemos en esta luz amorosa mis hijos para que sientan la comprensión de su ser y desde su amor que todas las personas a su alrededor que conocen también reciban estas bendiciones desde su apertura a orar por ellos, desde su deseo de que ellos encuentren ese bienestar pero también de la conciencia de que no es su sufrimiento el bienestar de otros sino que es su bienestar el bienestar de quienes les rodean.

Reciban mis niños la bendición del agua, la bendición de su descanso, de su dormir, la bendición de sus hogares, de sus relaciones de pareja, la bendición de esos hogares que empezarán a formarse en un futuro cercano en que el amor triunfe y ustedes puedan sentir que hacen el propósito para que quienes están deseando una pareja se lleven bien y quienes están deseando una relación nueva en su vida de pareja deje de ser esa tortura de compartir una vida o de anhelar a alguien que no llegue para empezar a dignificar la diferencia de la relación de pareja entre hombres y mujeres, entre lo que significa la energía de lo masculino y de lo femenino entre la conexión de dos almas que se únen  a hacer un propósito amoroso bien sea que correspondan al mismo sexo o a sexos diferentes y que puedan sentir que en ese acompañamiento también está la bendición de Dios.

Bendecimos igualmente aquellos vientres que están reclamando la ilusión de la vida y de poder esparcir esa semilla, de poder traer hijos a este mundo; bendecimos lo material, insistimos en que la conexión con el mundo materiales es de Dios, que no está separado de todo lo que significa bienestar y que ustedes puedan liberar y sanar en este mismo instante las conexiones antiguas de los entrenamientos sobre la pobreza, sobre la carencia, sobre la falta de oportunidades, sobre el no tener lo suficiente y creer que esa es la voluntad de Dios y la prueba bajo la cual ustedes deben estar eternamente porque ahora están liberados de ese proceso.

Reciban todos ustedes mis niños y mis niñas de mi corazón mi bendición y la de Dios Padre Todopoderoso con todo mi amor Yo soy María Virgen, muy buenas noches mis hijos hasta siempre.

Jesús de Nazaret

Buenas noches en la Gracia de mi Padre Jesús de Nazaret

Invitándolos queridos hermanos a que a que encuentren su paz interior, a que encuentren esa conexión individual con la vida, a que sean y dejen ser y sientan que no siempre van a poder encontrar en los demás la acogida que ustedes quieren, que necesitan, es un proceso íntegro donde esa conexión está en armonía con lo que están buscando bien sea la conexión con su salud, bien sea la conexión con una labor, con un trabajo, con una relación de pareja amigable, con una relación de familia en tranquilidad y con todo lo que hoy está siendo importante para ustedes en la plenitud de una vida en abundancia, en una vida con oportunidades y en una vida donde tengan el derecho de tener esas cosas materiales.

Son ustedes los que deben reconciliarse con la importancia de un techo, con la importancia de tener una alacena llena, son ustedes los que deben reconciliarse con el concepto amoroso de poder construir un hogar, una familia, con las relaciones personales con los hijos y especialmente mi llamado hermanos es a que dejen de ver el lado negativo suyo de los demás y estén en un proceso continuo de tratar de cambiar a otras personas o de tratar de ustedes cambiar para que otras personas los acepten.

Es el momento de empezar hallar la armonía de su ser y entender que el amor está disponible hoy desde una forma más sana, que ustedes tienen dentro de su ser la tendencia a creer que peleando, a creer que enfermándose, a creer que trayendo enemigos a su vida, que juzgando los actos de los demás esas personas van a cambiar la situación va a cambiar; pero realmente vivir en peleas vivir, en desarmonías y en razones para estar molestos con alguien o con algo lo único que hace hermanos es echarle más sebo al candil.

Y al echarle más sebo al candil, empiezan a sentir que ustedes son parte del conflicto; no se trata de no tener opiniones, no se trata de no poder ni sentir de lo que pueden no estar de acuerdo para hacerse los locos. Se trata es de elevarse de esa molestia y poder sentir que al salir de la confrontación del bien y del mal ustedes pueden aportar en armonía a una verdad.

Lo cierto queridos hermanos es que la verdad se defiende a sí misma y el hombre suele ser un buscador de la verdad; cuando evolucionan y crecen empiezan a darse cuenta que hay nuevas realidades y que hay formas nuevas de ver la vida y que una nueva verdad acogida desde el corazón da paz y tranquilidad, que empiezan a sentir desde el corazón que ha valido la pena el cambio, que ha venido ha valido la pena soltar ese pasado, empezar de nuevo y a veces es difícil soltar ala familia, es difícil que los hijos crezcan y se vayan, o que ustedes como hijos se vayan y empiecen su camino para tomar sus decisiones por sí mismos; pero vale la pena que cuando cierren un camino lo cierren desde el amor.

La mayoría de las personas sienten que terminar algo debe ser algo peleado y debe ser algo sufrido porque si no hay maltrato no hay cierre y por eso es importante que aprendan a no maltratar a otros, a no maltratarse a ustedes mismos ni a ponerse zapatos chiquitos que no les quedan o zapatos muy grandes que también les terminan haciendo ampolla.

Así que encuentren la justa medida de la comodidad, de lo que les hace sentir bien, la vida es más simple y más práctica de lo que ustedes creen cuando asumen la base del bienestar, cuando ustedes están en la búsqueda de que lo que coman, de lo que hagan, de lo que trabajen, de lo que exploren los haga sentir bien pues deben hacerlo en la concordancia de que por ninguna razón algo puede llegar a su vida para sufrir o alguien debe llegar para hacerles sufrir o que ustedes también se vuelvan la piedra en el zapato para pelear con quienes les rodean.

Bajen la guardia, aprendan a escucharse y escuchar lo que las otras personas quieren decir. Muchas veces detrás de una pelea ustedes tienen otras razones diferentes y terminan yéndose por las ramas sin realmente darse cuenta cuál es su verdad y qué es lo que los tiene bravos; de la misma manera aprendan a escuchar qué es lo que hay detrás de esas palabras fachadas que los demás te dicen a veces un niño con hambre y un niño cansado dice no te quiero pero realmente detrás de esto lo que hay es un niño que necesita atención de otra manera y necesita la compasión de su parte para aprender a tratarlos de formas diferentes.

Les estaremos ayudando para que esas relaciones interpersonales mejoren, para que no tengan que alejarse a una montaña y sentir que odian a todo el mundo y hasta a ustedes mismos porque ustedes hacen parte de una comunidad y de un proceso del desarrollo de la vida se hace más bonito si tú le rascas la espalda a alguien o alguien te la rasca a ti, donde las penas se hacen más fáciles cuando alguien cuando alguien te abraza, cuando alguien te escucha, que es más fácil sanarse cuando sabes que alguien está atendiéndote y ayudándote y dejen de sentir que son extraños, realmente son una hermandad y a veces la persona más extraña que llega a curarlos como un enfermero, como una enfermera, alguien que viene a escucharlos en un transporte público, alguien que viene a escucharlos con una intención de poder ver las condiciones de otra manera, también es muchas veces la voz de Dios que llega a ustedes a darles un consejo que ustedes no esperaban y a veces hermanos, cuando ese consejo se hace reiterativo, es porque es necesario parar un momento porque si vuelve y pasa lo mismo y vuelven y se repiten los mismos escenarios es porque ustedes siempre reaccionan de la misma manera.

La invitación está que reaccionen diferente, a que dejen de pelear con el mundo, a que entiendan que el objetivo de estar en esta tierra no es el de sufrir y que aunque hay escenarios muy complicados y muy difíciles, se pueden cerrar rápidamente y se pueden sanar rápidamente para darle la vuelta a la página y no quedarse eternamente en que hace 10 años, hace 20 años o cuando eran niños les hicieron daño.

Por supuesto que es importante ir a ver qué te hizo daño, pero también llega un momento en que es necesario ir y buscar qué te puso un rótulo de víctima para ya no tener ese rótulo y quitarlo de tu vida, qué te puso un rótulo de victimario para dejar de tener ese rótulo puesto y empezar a sentir que empiezan una nueva vida y que eso ya pasó y que eso ya no les manifiesta en su ser, ya no los gobierna, ya no se identifican.

Mi tarea con ustedes es ayudarlos a que no se identifiquen con ustedes como una víctima; no identificarse con las víctimas no significa ser indolente frente al dolor de quienes sufren. No identificarse es sentir que ya no es esa su realidad, que saben por lo que pasan esas personas que están ahora como víctimas pero que ustedes pueden en su propia experiencia tender una mano y ayudarles a esas personas que siguen viviendo el horror de una realidad que ya no es cierta porque en el presente ya no es lo mismo y aunque puedan sentir que hay consecuencias, aceptar esos cambios, aceptar las cosas como salieron también es la oportunidad de cambiar lo que en un momento no han podido hacer.

Dios los bendiga y los acompaño queridos hermanos para hacer esa transformación que en un segundo cambia la historia; solo necesitan un segundo para respirar profundo y para decirle a Dios: “Estoy dispuesto a cambiar y estoy dispuesto a que esto sea diferente, estoy dispuesto a comportarme distinto porque aunque pido cosas siempre estoy reaccionando de la misma manera y siempre estoy prejuzgando y siempre estoy comparando el pasado y teniendo el pasado como referente en forma negativa para no poder tener lo que hoy te estoy pidiendo frente a ese futuro.”

Por eso el pasado debe dejar de pensar en su espalda y los acompañamos para que sientan que ahora son nuevas personas y que ya no necesitan volver a analizar todo el tiempo lo que pasó sino abrir los ojos a la aventura, a la renovación, a sentir que aunque siempre hay un riesgo lo corran en el sentido en que tal vez la mejor forma de no equivocarse es no hacer nada, que tal vez la mejor forma de que no les rompan el corazón es cerrar la puerta y no volverse a enamorar pero es importante que corran el riesgo de experimentar cosas nuevas con los ojos del amor, de la protección y de la renovación para disfrutar aquello nuevo que Dios trae para ustedes.

Dios los bendiga queridos hermanos y libérense de esa culpa de lo que han hecho o han dejado de hacer o de esa incertidumbre de la supervivencia porque sanarse también es restablecer la confianza en esta abundancia divina de todo lo que están pidiendo y de todo lo que es importante para ustedes.

Dios los bendiga Buenas noches en la Gracia de mi Padre Jesús de Nazaret

Rafael arcángel

Muy buenas noches con ustedes Rafael Arcángel el ángel de la salud.

Feliz de poder conversar con ustedes, de celebrar la recuperaciones que han hecho, acuérdense que el cuerpo está diseñado hermanos para renovarse; siempre está en renovación y es un vehículo fantástico que está haciendo sus funciones continuamente para preservar la vida, es cierto que con el paso del tiempo el cuerpo puede estar deteriorándose pero en gran medida queridos hermanos lo que hace que las personas enfermen es esa conexión con no escucharse en lo importante que es el placer y el bienestar de la vida, en vivir afanados presurosos, en no escuchar las señales a tiempo y el no aceptar los retos y las condiciones de la vida.

Así que nuestra tarea es venir a hacer continuamente una salud integral, que comprendan que el cuerpo está diseñado para moverse, para estar activo, para vivir químicamente en condiciones de placer; las enfermedades que están apareciendo de un tiempo para acá es porque viven en un estrés continuo porque no comen saludablemente más que en la condición de qué les puede sentar mal, en que no bendicen los alimentos y no escuchan lo que su cuerpo está necesitando para hacer todas esas gamas de nutrientes dentro de su cuerpo.

Pero les digo que cuando están contentos, están alegres, cuando la comida deja de ser una tortura, cuando el ejercicio deja de ser una tortura y cuando entienden que no todo es trabajo y no todo es obligaciones, empiezan a recuperar la alegría del placer de vivir; eran más saludables cuando eran jóvenes o niños porque podían reír y jugar, porque podían divertirse porque se daban el tiempo de dormir y descansar lo suficiente.

Si en este momento están trasnochados y no pueden dormir en gran medida es porque tienen el estrés de no saber si van a dar la talla con todo lo que hoy significan las expectativas de la vida.

Y creemos que no hay que renunciar a lo material pero tampoco deben hacer que lo material les haga perder la paz y la tranquilidad, que si van a tener una casa no tengan miedo y pierdan la tranquilidad si la van a poder pagar, que si tienen una pareja no pierdan la tranquilidad de que esa persona en forma libre y voluntaria está con ustedes y que no pueden controlar si esa persona es honesta o no porque la verdad sale por sí misma, que puedan sentir igualmente que están brindándole a su cuerpo la atención que requiere no solamente en mantenerlo limpio sino en permitirse la exploración de caminar, de ver la naturaleza, ver el paisaje, de cómo lo han escuchado permitir que la madre tierra los acoja, los consienta y saben que por eso todos ustedes quieren viajar porque resulta que han perdido la posibilidad de su propio espacio observar lo bonito de la vida y darse cuenta que donde viven también hay árboles, que donde viven también hay parques, que donde viven también hay naturaleza y que también hay cosas divertidas para hacer.

Así que dénse el espacio para ver diariamente algo que les haga reír, dénse el espacio para recibir un abrazo, para recibir una caricia, para ver los bonitos recuerdos de la vida y más que pensar en torturarse por cuánto tiempo no ha estado esa persona o por qué se fue para el cielo, por qué se fue tan rápido o por qué perdieron esos seres queridos, disfruten esos momentos del tiempo compartido y les ayudaremos a que ya no duela y hagan sus duelos y sus duelos terminen para que no terminen recordando esas personas desde el dolor o más bien que ni les hablen de esas personas porque cada vez que los recuerdan es como un dardo en el corazón.

También venimos a sanarlos de esta manera y poder dejar ese vaso con agua en la noche y tomarlo en ayunas es permitir que esa programación de la sanación esté en una medicación espiritual que les dé la paz, que les dé la tranquilidad, que mientras duermen puedan recuperarse puedan sanarse de todo y tal vez en las noches cuando sienten una dolencia, al otro día estén sanos y que se hizo la magia de una recuperación y que todos los días estamos dispuestos a ayudarles a que se vayan sintiendo mejor. 

Dios los bendiga con ustedes Rafael Arcángel para bendecir sus manos sanadoras y las manos de aquellos médicos que también comparten la vida de aquellos que también los sanan desde su presencia y su actitud de servicio.