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conversartorio con el maestro jesús
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María Virgen
Mis hijitos y mis hijitas queridas, buenas
noches, soy María Virgen madre de Dios y madre vuestra, reciban todos ustedes presentes
y en la distancia mis hijos amados mi bendición y la Dios Padre Todopoderoso.
Siempre mis hijos que pueden entrar al
conocimiento espiritual el entendimiento llega para comprender que son viajeros espirituales, que uno de los lugares
donde han venido a hacer un alto durante unos años es la vida en la Tierra, que es un proceso espiritualmente corto,
que a veces da la tristeza de que puedan finalizar las cosas en la vida.
Todo comienza y todo termina y en el orden
espiritual la vida sigue; entender ese proceso mis hijos hace que también
puedan tener ese compromiso importante de saber que son seres mucho más grandes
y maravillosos envasados en este cuerpo en la Tierra, que necesitan en momentos
sentir su cuerpo físico también como un vehículo que hay que cuidar pero que
también se recupera fácilmente.
Hoy los estamos bendiciendo mis hijos a todos
aquellos que están postrados en una cama, a todos aquellos que están con una
dolencia física, a todos aquellos que están en frente a una enfermedad que los
ha tenido durante mucho tiempo convalecientes y aquellos que están estupefactos
por lo que es un diagnóstico doloroso y difícil que los hace poder sentir sin
oportunidad de recuperarse; venimos mis hijos a sanarlos integralmente para que
puedan sentir que cuando sus fuerzas terrenas menguan para poder lograr las
cosas, la Luz Espiritual del Padre los acompaña para hacer posible su
beneficio, su bienestar, para que puedan escuchar lo que sus cuerpos les dice y
puedan recibir esa restauración que llega desde el amor de Dios para que su
cuerpo pueda volver a estar bien, para que recuperen las fuerzas que perdieron
y para que recuperen igualmente la ilusión y la fuerza para estar en este
mundo.
Los bendecimos mis hijos para que también cuando
tengan miedo y sientan que todo puede estar en contra, que todas las
condiciones pueden ser difíciles porque les anuncian una pérdida de trabajo,
porque les hacen sentir que todo va a estar de mal en peor puede encomendarse a
esta luz del Padre para mejorar todos los aspectos de su vida en esa entrega al
Padre, en entender que hay momentos donde no saben qué pensar, cómo actuar o
qué hacer y que cuando dejan que Dios no solamente les dé la sabiduría para
actuar sino que abre Caminos diferentes y puedan a seguir en ese tránsito
viendo que el Padre no les va a faltar y aunque puedan tener mucho temor a qué
van a comer, cómo van a pagar sus deudas, cómo van a poder responder con sus
obligaciones, recuerden que Dios nunca los abandona, que siempre hay manos
tendidas, que siempre hay personas dispuestas a ayudarles y que venimos también
a ustedes a protegerlos a guiarlos y enseñarles ese camino de la luz de Dios.
Recuerden mis hijos que siempre les pediré
oración no solamente por aquellos que son vulnerables y que reciben daños sino
también que les pido oración por aquellos que están perdidos en el camino, que
decidieron seguir el camino de la guerra, el camino del odio, el camino de
tomar por la fuerza lo que ellos consideraban justo. Oren mis hijos para que la
luz del espíritu ilumine a esos dirigentes, ilumine su propia vida cuando
tengan que tomar decisiones, los ayudamos para que se envuelvan en la
comprensión cada vez que estén juzgando a otros y cada vez que se sientan
juzgados o se juzguen ustedes mismos en la forma y la manera como se supone que
deberían de llevar la vida.
Hoy te oro señor por mi mundo, oro por este planeta hermoso y por cada uno
de mis hijos en la Tierra para todos ellos puedan encontrar el camino de la
felicidad, que puedan hallar el valor de las cosas sencillas de la vida y te
pido Señor que también puedan saber que no están solos y que guiamos su cammino
para que todo este propósito de exister sea poder servir de la mejor manera a
otros en lo que más saben y les gusta, y que les ayudes a entender que merecen
recibir y que hay momentos en la vida
donde deben dejar que otros actúen para generar el equilibrio maravilloso del
dar y del recibir.
Oro para que cada uno de mis hijos en la Tierra
pueda ser contador de Milagros, que ustedes sean contadores de historias para
que cada uno sienta que es merecedor de tu amor Padre, merecedor de tus
Milagros y puedan sentir de forma alegre y bella que Dios actúa a partir de su
Luz Espiritual Superior para hacer posible lo que ellos en un momento sintieron
que se salía de sus manos.
Te oro para que puedan coexistir con todos los
seres de la naturaleza, con todas las entidades que también llegan a servir al
hombre en la Tierra para que puedan ellos sentir también que su encarnación
espiritual sirve el propósito de la hermandad y del cuidado del unos con otros,
que puedan mis hijos ser responsables de sus decisiones para poder trabajar en
la inventiva de un lugar mejor, que pueda inventar formas que les ayude a poder
tener calidad de vida, que les ayude Señor a que ellos también sientan que
pueden ser creadores de grandes cosas y que sin importar los límites que puedan
tener del conocimiento, los límites económicos que puedan tener siempre ellos
puedan hacer su obra y que cada uno de mis hijos se pueda sentir importante y
satisfecho.
Les entrego mis niños de mi alma la luz del
Espíritu Santo para llenarlos de sabiduría para que cada uno pueda desarrollar
sus potencialidades al máximo en su nivel para que puedan sentir que cualquiera
sea la edad que ellos estén son inteligentes, son sagrados, son valiosos, son
capaces de lograrlo todo y que ellos puedan entender que no tienen que
necesariamente llegar al punto más exigente de la vida para poder sacar un as
debajo de la manga o sentir que son expuestos a las condiciones más difíciles
para que a través del miedo, a través de la valentía tengan que lograr las
cosas.
Los envuelvo mis hijos para que toda esa actitud
beligerante y dolorosa que los hacen medirse unos con otros pueda bajar para
que haya comprensión, pueda disminuir para que puedan sentirse todos como seres
que tienen el derecho de tener las mejores condiciones en esta Tierra y que hay
abundancia sin que tengan que pelear y luchar los unos contra los otros.
Les entrego mis hijos de mi corazón mi amor
infinito de madre mi deseo que sigan creciendo porque son más los que sueñan y
creen en un mundo en paz y son más los que desde el corazón desean un mundo
equitativo para todos.
Reciban mis hijos mi amor infinito con ustedes
María Virgen buenas noches.
Jesús de Nazaret
Buenas
noches, hermanos en la
Gracia de mi Padre Jesús de Nazaret.
Feliz de poder acompañarlos, bendecirlos, ver
sus hermosas caras, sus hermosas sonrisas, de verlos también esperanzados en
ese mañana, que puedan sentir ese Amor Infinito que dice Mi Madre que tenemos
por ustedes, el amor que tengo para que puedan encontrar esos caminos de
bienestar, que el acercamiento mío para que puedan conocer al Padre es conocer
que Dios está sintonizado con su bienestar, con su voluntad, con que esta vida
sea bonita, sea maravillosa para ustedes y yo también les ayudo a transitar las
noches oscuras, los momentos difíciles en que sienten que están enfrentados a
sus más grandes temores pero también a mostrarles el arcoiris de un nuevo
comienzo de vida, la alegría de que ya miraron hacia atrás y se dieron cuenta
que lo más difícil quedó atrás, que se dieron cuenta que pudieron superar sus
miedos y encontrar en el amor y en la fuerza del Padre la posibilidad de
empezar a cambiar su vida y de sintonizarse con lo bonito de existir.
Venimos a insistir una y otra vez que tienen
derecho de vivir abundancia y cuando hablamos de vivir en abundancia no
solamente hablamos de la abundancia económica y material que Dios puede proveer
sino de la abundancia de oportunidades, de la abundancia de satisfacción, que
sientan que están en la aventura de cada día disfrutando las pequeñas cosas y
las grandes cosas de la vida, que no se hermanos que tengan que estar en los
momentos más difíciles de cara a la muerte para poder sentir que en estos
momentos aprecian todo lo que en un momento no pudieron saber, tener o apreciar
poder vivirlo de la manera como a veces las situaciones difíciles los hacen
extrañar; paren por un momento hermanos y dense cuenta que hay muchas cosas por
las cuales maravillarse, muchas cosas por las cuales agradecer.
Si están cansados de amanecer al lado de la
misma persona, si están cansados del mismo trabajo, si están cansados de estar
rodeados de la misma situación, del mismo país, de la misma gente, tal vez
necesitan hermanos pestañear un poco, necesitan un oxígeno para poder
reconciliarse con todo lo que hasta ahora ha sido parte de su vida para dar
gracias y que si hay un cambio no lo hagan destruyendo, no lo hagan
acabando con desprecio lo que pudieron tener en un momento, sino que lo hagan
sintiendo que se separan de aquello que ya no es, que dejan atrás aquello que
ya no los llega como debería de llenarlos pero que no lo hacen en una actitud
displicente y mucho menos de sentirse equivocados o de destruir a la otra
persona.
Les ayudamos a que puedan encontrar estos aminos
de diálogo y sabemos hermanos que a veces necesitan distanciarse de quienes les
hirieron para poder sanar las heridas, a veces necesitan espacio para poder
decir “Ay, ay, ay” para poder decir “No me gustó” para poder
internamente saber qué fue lo que los hirió, qué fue lo que los hizo sentir mal
y cuando ya se sienten preparados y hayan hecho ese trabajo interior de
recuperación puedan ir, puedan hablar, puedan encontrarse con aquellos seres o
aquellas cosas que fueron fuentes de sufrimiento.
Por eso hay muchas personas hermanos que
necesitan volver al lugar de los hechos, que necesitan volver a sus espacios
donde un día tuvieron dolor para poder cerrar un ciclo, para poder entender qué
fue lo que pasó y para definitivamente sentir que eso en lugar de restar en su
vida puede ser comprender que ya lo vivieron, que ya lo pasaron, que pudieron
sacar el mejor resultado de eso y que siguen su camino dándole la vuelta a la
página.
Se necesita de valentía para poder dejar ese
pasado atrás, se necesita hermanos de mucha valentía para poder perdonar y se
necesita igual una valentía para poder decir “Lo siento, yo me equivoqué”
y especialmente hermanos para perdonarse a ustedes mismos; el antídoto del
perdón que les he enseñado desde hace más de 2000 años es el antídoto de la
liberación interna de todo lo que los hace sentir mal pero también de poder
estar conscientes de que esta liberación es la oportunidad de sentir que la
vida puede ser diferente y que pueden seguir adelante porque a veces no
solamente son personas, son situaciones que se repiten una y otra vez, son
situaciones que los hace sentir el desencanto y la soledad y tal vez la
sensación de que Dios no los está acompañando o de que no son merecedores de
ese milagro; los envolvemos en la luz de mi Padre, y los acompañamos para que
sigan siendo una fuente de historias,
queremos que cada uno de ustedes cuente la historia de lo que cambió y
mejoró en su vida, queremos que cada uno de ustedes sienta que Dios los escuchó
y que se dió el cambio y que son bendecidos y son muy especiales para Dios en
forma individual. Dejen de creer que soy el único hijo de Dios, dejen de creer
hermanos y que ustedes no importan, ustedes también son hijos de Dios y también
son infinitamente valiosos y en la casa del Padre todos se sientan en una mesa
redonda para que todos estén en las mismas condiciones y no unos por encima de
otros.
Les entrego hermanos el cariño del Padre que
mientras duermen, que mientras respiran, que mientras están en esta Tierra les
está diciendo con tanta maravilla que hace que está con ustedes, recuerden que
ese arcoiris que aparece muchas veces es un regalo el Padre diciéndoles que ahí
está para ustedes y que es porque ustedes lo han pedido de esa manera; a veces
necesitan la lluvia para refrescar un día que ha estado lleno de estrés y de
angustia, a veces para bajar la beligerancia de los violentos necesitan agua y
otros necesitan nieve y ahí se agradece hermanos que haya esos tiempos de
tregua, esos tiempos de alto, esos tiempos necesarios para dejar que los ánimos
se bajen y empiece a haber una reflexión sobre qué sentido tiene la guerra,
sobre qué sentido tiene sufrir una y otra vez, sobre qué sentido tiene
perpetuarse en el dolor y el sufrimiento creyendo que es la voluntad del Padre.
La voluntad del Padre, hermanos, es su voluntad
y si en su voluntad está luchar, guerrear y pelear, el Padre garantizará que
haya muchas personas que lleguen buscando lo mismo y lo respetará porque es
parte del juego de la vida; pero si ustedes deciden hermanos vivir en su paz
interior, vivir en tocar el corazón de cada persona para hacer mejor su vida,
confien en que ese amor que ustedes entregan hará muchos cambios, confíen en
que la fuerza del amor es más grande que una patada, es más grande que un
rechazo, es más grande que una actitud dura, aunque a veces desde el amor
también tendrán que actuar con la firmeza suficiente que el amor requiere como
parte de un proceso para que una persona reaccione y por eso Dios les dará en
su momento la sabiduría de cuando una persona necesita un abrazo o extrañamente
cuando una persona necesita que le den la espalda y es extraño poder pensar que
todo eso hace parte del mismo Dios, pero entender a Dios queridos hermanos
es elevarse a la comprensión de que todo
eso hace parte de la voluntad emocional de poder sintonizarse en la compasión,
en la comprensión, en el entendimiento y en la posibilidad de llevarse unos a
otros a una mejor condición de vida.
Los celebramos a cada uno de ustedes hermanos,
celebramos su vida, celebramos su paso por esta tierra y la valentía de poder
decir “Soy parte de Dios, hablo con Él, hablo para ustedes” y la
voluntad de poder sentir que ustedes también son voceros de nuestras palabras.
Dios los bendiga queridos hermanos en la gracia
de mi Padre Jesús de Nazaret muy buenas noches.
Meditación Liú
Muy buenas noches yo soy Liú, quiero imaginar
que tenemos ese jabón maravilloso espiritual de Lavanda, sienten ese olor a
fresco, van a las zonas de su cabeza llenas de pensamientos para limpiar, para
transmutar a través de ese color violeta aquellas zonas que también han estado
llenas de dolor, los ojos que han visto cosas que les han dolido, los oídos que
han escuchado cosas que han sido ofensivas, las palabras que han tenido la
violencia del dardo que hiere, la garganta que muchas veces tiene las dudas de
este sentido de lo que se dice, la posición en este mundo de el no saber
movilizarse por el, el corazón que tiene esos sentimientos dolorosos del
abandono, de la soledad, del desamor, de ese rencor que desciende y que golpea
toda esa zona digestiva y que limpiamos maravillosamente para dejar salir de
todo nuestro ser las lágrimas de rabia, las emociones que se vuelven líquido y
que permanecen dentro de nuestro cuerpo inflamándolo, nos limpiamos en nuestro
cuerpo físico para poder sentir la gloria y la alegría de poder tener un cuerpo
maravilloso, amamos las batallas que nuestro cuerpo ha dado para dar vida en
este vientre de mujer, para dar vida en ese sentido masculino sexual del
existir para poder sentir el valor de ser hombres y de ser mujeres y de poder
hacer parte de esta tierra a través de ese cuerpo maravilloso.
Se abrazan para agradecer este cuerpo y se
conectan con la decisión espiritual que tomaron para haber elegido la condición
sexual que eligieron, para haber elegido a sus padres para ser elegidos como
padres, para haber elegido ese cuerpo, esa raza, ese color de piel, estas
condiciones particulares que los hacen ser maravillosamente únicos y hermosos;
se sintonizan con la gratitud de su cuerpo y toman el control espiritual
superior para poder darle a su cuerpo todo el bienestar para poder relajarse en
ese equilibrio interno entre el hacer y no hacer, se sintonizan con el descanso
y empiezan a decirle a su mente que hay momentos para descansar, se permiten
que la química de su cuerpo active el sueño nocturno, activa el sueño largo
relajante que les permita soñar, que les permita liberarse espiritualmente para
ir al encuentro de Dios de los cielos y a lugares del pasado y a esos lugares
espirituales en los cuales también se pueden encontrar con aquellos seres
queridos que han muerto y se han ido al cielo.
Empiezan a sentir dentro de su ser la confianza
en que mañana será otro día, en que mañana las cosas van a mejorar, en que han
dejado encargado a todos aquellos maestros y seres espirituales sus peticiones
para que ellos puedan encargarse de traer las cosas tal como ustedes las
pidieron o imaginaron, o superior a lo que ustedes pudieron imaginar que ellos
podían hacer por ustedes.
Sienten la tranquilidad de saberse como los
niños chiquitos que tienen Padres y madres buenos que los acompañan, que tienen
toda una familia terrena espiritual que los leen y que saben qué necesitan y
que les entregan el amor suficiente para sentirse bien.
Lleva sus manitas enfrente en actitud de oración
para fijar el ejercicio y seguir recibiendo día con día la posibilidad de hacer
una armonía entre su cuerpo, sus emociones, su mente su espíritu encarnado como
alma y su yo superior.
Respiran profundo para sentirse gratos de todo
lo hecho, de todo lo vivido y para disolver esa sensación de insatisfacción de
angustia frente al futuro de preocupación que se está yendo a través de este
sentido ejercicio de confianza en el amor espiritual de Dios que los acompaña.
(ver el ejercicio completo en el video de YouTube canal magio ángeles ii.) Haz Clic en la Imagen para suscribirte !
Llevan sus
manitas en actitud de oración para fijar el ejercicio que han hecho esta noche,
les dejo mi mejor energía me llevo la de ustedes yo soy Liú.
Escribe o cuéntanos de tu anécdota con tu Ángel, la envías al
correo unahistoriadeangeles@gmail.com y la
publicaremos en el blog Haz Clic en la Imagen para
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