Rosario octubre 3 de 2019
María Virgen
Mis hijitos y
mis hijitas queridas, muy buenas noches. Reciban todos ustedes presentes y en
la distancia mis hijos amados mi bendición y la de Dios Padre Todopoderoso. Reciban
todo mi cariño, toda esa intercesión divina.
Hoy quiero
hablarles mis hijos de mi alma que hay historias familiares que se repiten y muchas veces esas
historias se repiten para
dar una oportunidad de reflexión y de comprensión; a veces los hijos
necesitan repetir historias de sus padres para poder entenderlos más, para
salir de ese concepto que se tiene muchas veces en la vida de juzgar si los
demás hicieron bien o mal para elevarse un nivel en el cual pueden entender
todo lo que ellos hicieron de la mejor forma posible e igualmente todas
aquellas equivocaciones o aquellos sufrimientos que pudieron haber tenido.
Por eso
reflexionar sobre su familia y esas historias duras o difíciles los llevará a que
ustedes desde el corazón pueden sentir que no tienen que aprender de esas
mismas experiencias, que pueden mirar esas historias como un regalo de vida
establecido por sus generaciones anteriores para que no tengan que pasar por lo
mismo y si de alguna manera ya lo están pasando que puedan también superar su
propio dolor como parte de la historia ustedes puedan transmitir a sus
siguientes generaciones que no tengan que seguir en lo mismo.
Queremos mis
hijos que sepan de la misma manera que Dios en su misericordia permite que el mundo evolucione,
hay espíritus que frente a ese
concepto de la vida llegarán a través de un ser amado como hijo y a veces el
espíritu necesita la fortaleza para ser no solamente engendrado sino también
para quedarse en el vientre de su madre; oren por aquellas personas que hoy están perdiendo
sus hijos en su vientre pero oren también por aquellas personas que ya han
vivido esa historia que han tenido en su corazón la tristeza de tener hijos que
se van en diferentes etapas de la vida porque nosotros entendemos que una de
las experiencias más duras de la vida es perder un hijo y queremos por eso que
ustedes se llenen de la luz y la tranquilidad para entender que nunca de parte
de Dios hay un castigo Dios o pretende que haya una enseñanza dolorosa o
difícil pero la vida tiene esos esquemas duros mis hijos. También como parte la
experiencia de la vida se tiene a través de esos espíritus que llegan y que no
se quedan en sus vidas la posibilidad de darles un recordatorio que no son de
aquí, un recordatorio que también transmite para quienes se quedan una esperanza
de que ese amor sigue vivo y que esos seres que se han ido para el cielo siguen
amándolos, queriéndolos y siguen haciendo parte de sus vidas.
En estos meses
especialmente en octubre se abren la puertas del cielo para permitirles a
aquellos espíritus que quieren volver al Padre que lo hagan, incluso para
aquellos que como errantes han tenido el dolor en su corazón de creer que no
merecen el cielo por las aprensiones ante la vida que en algunos casos son de
culpas y que en otros casos se vuelve el dolor que se transforma en rabia y que
no les permite evolucionar y llegar a esa luz espiritual, a esa luz de Dios.
Oren mis hijos
de la misma manera para que sean liberados de todo ese agobio de la
supervivencia, que no dejen que todas esas visiones que hay alrededor de
ustedes los llene de angustia de si va a haber un techo, si va a haber para
pagar sus servicios, si va a haber para cumplir con sus responsabilidades
económicas, si va haber para pagar la educación de unos hijos, CONFÍEN en que
así mismo en generaciones anteriores sus padres, sus abuelos pensaban si iban a
poder sacar sus hijos adelante y si iban a poder tener para vivir y por eso les
digo que en esa confianza en Dios cuando ustedes se llenan de la paz del
corazón y dejan que lleguemos a ustedes amanece un nuevo día y en ese nuevo día
mis hijos encuentran esa maravillosa posibilidad de darse cuenta que Dios siempre tiende una red de
ayuda, que siempre se
establece una hermosa cadena de favores en las cuales se da el verdadero
sentido de la vida: ayudarse los unos a los otros, servirse los unos a los otros y
conectarse en afecto como una sola familia realmente esa siempre ha sido la
voluntad de Dios, que ustedes se amen a sí mismos y que amen al prójimo
y puedan sentir que si todos están unidos es mucho más fácil porque una mano
con la otra siempre da calor.
Así que reciban
hijos de mi alma la bendición de los alimentos que van a consumir esta noche
los presentes en este lugar, los presentes en la distancia, bendecimos niños de
mi alma sus sueños y los envolvemos para que todas aquellas dudas, para que
todas aquellas mortificaciones, para que todos aquellos dolores y
preocupaciones se envuelvan y se sanen en la luz del Espíritu Santo y sientan
mi cariño de madre para poder superar todas aquellas cosas que los pueden tener
mortificados en este momento; reciban todos ustedes hijos de mi corazón mi
bendición y la de Dios Padre Todopoderoso con todo mi amor y el de Dios yo soy María
Virgen muy buenas noches hasta siempre.
Jesús de
Nazaret
Buenas noches hermanos. En la Gracia de mi Padre
Jesús de Nazaret.
Realmente no he
estado ausente, siempre estaré presente, ustedes saben que para mi todos
ustedes son muy especiales, que si ustedes alcanzaran a dimensionar cuánto los
amamos, especialmente cuánto los ama Dios y si usaran el significado de la palabra amor como Él lo transmite
ustedes estarían desbordados de alegría, estarían desbordados de
realización porque como les hemos dicho tantas veces, en la voluntad del Padre siempre está el bienestar
de sus hijos y como también se los he dicho de otra manera, Dios siempre quiere.
Por eso recurrir
a la energía del amor de Dios cuando están más cansados, cuando están más
aburridos, cuando están más tristes, cuando tienen esas crisis de fe esa
energía del amor hace que la comprensión llegue a ustedes y disuelvan esas
tinieblas que aparecen muchas veces en esos pensamientos que les hacen dudar
del valor de la vida, que les hace dudar de tantas cosas que están establecidas
en este mundo no como una prueba, sino como un regalo de experimentación.
Queremos
queridos hermanos que dejen de competir contra ustedes mismos, competir contra
el mundo, competir por un lugar en el cielo, que como se les he dicho está
ampliamente ganado y al dejar de luchar, al dejar de guerrear la vida dejarán
que las cosas fluyan y que cada día lleve su propio afán, dejen que la mañana
sea mañana, que la tarde sea tarde, que la noche sea noche, dejen que los
alimentos lleguen a ustedes en forma benéfica, dejen que la ropa los cubra,
dejen que las estrellas los cobijen y que las respuestas que estan necesitando
en este momento lleguen a través de evidencia de la mano del Padre.
Muchas veces
ustedes están pidiendo razones de por qué, por qué y por qué y dentro del
proceso de la dualidad y de lo que la mente tiene en forma limitada hasta las
razones que les podamos dar queridos hermanos son razones que no van a
justificar lo que su mente quiere entender, pero cuando ustedes dejan que la
misma vida les muestre, cuando ustedes dejan que lleguen las situaciones
puntuales como una enseñanza de Dios ustedes entenderán en forma práctica y en forma práctica aprenderán
ustedes a amarse a autocontrolarse, a saber cuándo ustedes mismos
sueltan las amarras y cuando hay que cogerle dobladillo a la falda y pedirle a
Dios esa sabiduría es también dejar que lleguemos a su vida a mostrarles que muchas
veces esa razón que tanto piden está enfrente de ustedes y no la han visto y no
la han querido aceptar; a veces es difícil aceptar situaciones dolorosas,
difíciles, complicadas, pero cuando ustedes empiezan a sanar sus heridas en un
momento entienden que todo ha tenido algo de su parte en especial
espiritualmente una elección. Cuesta trabajo creer que se elige el dolor, que
se elige el sufrimiento, que se elige aprender de forma difícil pero entre más
evoluciona un espíritu para trascender a todo eso duro más se da cuenta que ya
no necesita de esas cosas difíciles, no necesita volver a pasar por lo mismo,
ya no necesita sufrir por lo mismo para aprender o para entender sino que puede
mirar con compasión las experiencias de otras personas y a partir de esas
experiencias sentir que ya vivieron y ya vivieron suficiente de esa experiencia
y que no tienen por qué repetirla para ustedes o si nunca la han vivido no
tienen por qué hacer parte de ella ni en su presente ni en su futuro.
Los bendecimos
queridos hermanos y nos sentimos felices de poder traer ese calor del cielo
hacia ustedes y llevarlos cada vez más a que trasciendan en una comprensión
mucho más profunda donde esa maravillosa mente empieza a entender cuando las
evidencias llegan, cuando la fuerza de Dios llega y cuando empiezan a entender
el verdadero sentido de este juego de la vida.
Saben que los
amamos queridos hermanos, los acompañamos en sus elecciones y siempre estamos a
un lado corriendo hacia ustedes cuando ponen un alto y dicen “no entendí, no sé por qué ha pasado todo
esto, no sé qué fin tiene todo esto, encárguense ustedes de mostrarme un nuevo
camino” hasta pronto queridos hermanos.
Dios los
bendiga queridos hermanos en la Gracia de mi Padre Jesús de Nazaret.
Liú Meditación “Muy buenas noches yo soy Liú, vamos a poner
las manos sobre las piernas para imaginar en este momento muy cobijados y
abrigados, nos sintonizamos con la frescura y el medio ambiente que hay,
algunos en un ambiente cálido, otros en un ambiente frío, nos sintonizamos en
armonía. Vamos hacer una tarea de concientización en que nos vamos a adaptar a
los climas en los que estamos y los vamos a bendecir y a entender. Entendemos
la necesidad de frío como algo que no solamente le sirve a la naturaleza o al
ecosistema sino algo que el ser humano también necesitan en su equilibrio
biológico…” (sigue el ejercicio.)
Inscripcion abierta NUEVO CICLO DE ARCÁNGELES.
Escribe la historia que has vivido como encuentro
con tu ángel,
Puedes leer en
Unahistoriadeangelesparati.blogspot.com
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