Rosario en Abril 6 de 2017

María Virgen

Mis hijitos y mis hijitas muy buenas noches soy María Virgen madre de Dios y madre vuestra reciban mis niños amados, todos ustedes presentes y en la distancia mi bendición, y la bendición de Dios Padre Todopoderoso.

Ustedes saben mis hijos que siempre festejamos la vida. Festejamos la vida en medio de la muerte, en medio de los desastres, para que puedan seguir entendiendo que cada muerte en el camino es una elección. Algunos deciden morir de unas formas duras, difíciles, en medio de situaciones donde esas muertes se vuelven una enseñanza para quienes viven; por un lado seguir viendo del valor de la vida en medio de la muerte, como se los explicaba y por otro lado también llamar a la reflexión sobre la importancia que hay del despertar de conciencia que significa poder vivir en paz con la naturaleza, que significa poder entender los llamados de la naturaleza.

Han escuchado ustedes mis hijos que en los desastres que ha habido hay anuncios, que en esos desastres de la naturaleza ellas siempre habla antes para mostrarles que pueden tomar decisiones y anunciarles que pueden proteger su vida.

Hoy quiero mis hijos que oren no solamente por aquellos que han muerto en medio del dolor, de los ataques que hay en el mundo, de los que mueren en medio de las revueltas en los países en crisis, de los que están muriendo en esos atentados o de los que han muerto con estos desastres de la naturaleza, sino también que oren porque haya una conciencia social, una conciencia de los dirigentes sobre la responsabilidad que tienen, sobre la protección del ecosistema, la reeducación del ser humanohacia el respeto de la naturaleza y hacia el convivir en ella en paz.

Hoy hablen ustedes mis hijos desde sus casas con la Madre Tierra y pídanle perdón a la Tierra, pídale perdón no solamente por su propia inconsciencia sobre el olvido que hay en momentos de la importancia que tiene convivir en un planeta con recursos y que todo viene de ella, sino que también pidan perdón a la Tierra por todas aquellas personas que siendo ustedes parte de una humanidad han podido de alguna manera hacer que prevalezcan sus propios intereses sobre los intereses comunitarios y de los intereses de la Tierra también.

Cuidar la Tierra mis hijos significa cuidarse a ustedes mismos como raza no solamente en sus generaciones actuales y en las futuras; es el momento que empiecen a entender que pueden vivir en esa armonía con la Tierra sin destruirla, sin talar árboles, sin desviar ríos, sin tapar esas fuentes hídricas que hay en forma natural en esta Tierra, oren mis hijos por esa conciencia y confíen en que el hombre puede vivir en unas condiciones en que esa convivencia con la Tierra no haga que tengan que disminuir la población, sino que en esa sabiduría de Dios la población pueda crecer en armonía que es lo que Dios quiere.

Reciban niños mi deseo profundo que ustedes puedan mejorarse porque muchas veces toda esa tristeza de ver gente sufrir también los lleva en su ser a acongojarse y a sentir la impotencia de no poder hacer nada; hay muchas formas de ayudar como les hemos dicho, las formas que vienen que ustedes puedan ser partícipes con algo de llevar, llevar recursos o comida, pero también entender que hay una importancia inmensa sobre orar, orar por los que se han ido y todavía no saben que están muertos y que de alguna manera necesitan de sus oraciones para entender ese camino de ascensión y saber que pueden seguir su camino hacia Dios. Igualmente oren por aquellas familias que han quedado, por los heridos que han quedado, por todas aquellas personas que no solamente se alimentan de los recursos que ustedes mandan sino de la esperanza de la oración que los lleva a sentir que la vida vale la pena y que si quedaron vivos es porque todavía hay una ilusión y una razón para seguir en este mundo y aprender.

Reciban mi Manto Sagrado mis niños para que lo porten siempre, lo porten en todo lugar e igualmente para que puedan entregarlo a aquellas personas que viven mortificadas en la vida; les entregamos el Espíritu Santo de Dios lleno de luz, de amor, de protección, de alegría de vivir, porque hoy entienden que estas oraciones en su casa, en su hogar establecen toda una cúpula de protección para que aunque haya cosas difíciles afuera no los toque, no les haga daño, no les mortifique la vida. Desciende desde la voluntad de Dios y de mi Hijo la bendición de los alimentos que consumirán en esta noche para que a través de ellos se llenen de la conciencia de Dios en su vida. Reciban niños de mi corazón en la distancia y los presentes, mi bendición, la de Dios Padre Todopoderoso con mi amor y el amor de Dios yo soy María Virgen muy buenas noches mis hijos, hasta siempre.

Jesús de Nazaret

Buenas noches hermanos Jesús de Nazaret.

Hablaba en este momento mi Madre sobre esas situaciones colectivas de desastre y de muerte que parecería que son ajenas a las posibilidades del ser humano como si el ser humano no pudiera elegir sobre esas cosas sino que sencillamente fueran víctimas y que fuera la voluntad de Dios quitarle la vida a todas esas personas; pero miren, así como en esas historias hubo una cantidad de personas que murieron otras tantas estando en los mismos desastres y las  mismas situaciones salieron con vida y los que se fueron queridos hermanos no se fueron en forma arbitraria, se fueron porque ellos habían pedido esa muerteporque ellos lo habían decidido en su camino para volver al Padre y sentir que ya su misión estaba cumplida, algunos cumplen con la misión queridos hermanos igual con unos meses de vida que teniendo 100 años encima. Entonces vale la pena que hagan la reflexión para que no sientan pesar por los que mueren.

Los que mueren queridos hermanos tienen claro desde el orden espiritual que ya se acabó la vida y ustedes no están vivos y no les han pasado cosas difíciles o accidentes y los han superado por un milagro que no esté incorporado en su voluntad de vivir, porque de alguna manera es su espíritu que está eligiendo seguir en este camino para aprender algo nuevo. Ahora, venimos a ustedes para ayudarles a que puedan seguir sintiendo que esa esperanza que se ilumina con las conversaciones que tenemos es también la oportunidad de asumir verdades, que ustedes puedan ir más allá de ustedes a encontrar cuáles son los obstáculos internos que tienen y puedan pedirnos la ayuda para superar esos obstáculos. A veces ustedes sienten que la voluntad de Dios es que Él no quiere y que esos problemas que están alrededor de ustedes son la voluntad de Dios para hacerlos más fuertes o para enredarles la vida, pero si bien hubo momentos en que esas situaciones fueron difíciles y también son dadas por Dios, igual que las cosas buenas, malas o regularesustedes pueden sentarse en este momento y sentir que ya fue suficiente, que ya aprendieron de esas cosas y pueden seguir adelante en un nuevo rumbo, nunca olviden queridos hermanos que lo que Dios realmente está buscando para sus hijos es un bienestar y créanme que el bienestar puede ser que una persona muera, como el bienestar puede ser que una persona viva y Dios sencillamente no establece qué es malo o qué es bueno en la vida de un ser humano porque para Dios todo es bueno; es tan bueno que un hijo viva en la Tierra porque Él la creó, como que Dios pueda recibirlos en su seno y se vayan a la Casa de Dios porque de allá vienen y también es bueno estar allá; entonces por qué no empezar a tener esa conciencia de a qué han venido y de cómo quieren llevar esta fiesta la vida o la quieren llevar queridos hermanos como la han visto durante un tiempo complicada, difícil o van a empezar a verla en paz y alegría.

Las cosas afuera no son buenas ni malas, depende de la actitud que ustedes le pongan, ustedes deciden si van a seguir sufriendo por las cosas que no están, por las cosas que siguen enredadas, o si se van a relajar y van a permitir que sea Dios quien se encargue de solucionar todas las cosas; se dan ustedes queridos hermanos que cuando deciden llevar la fiesta en paz y deciden estar en la vida en una condición más relajada, más tranquila finalmente las cosas más temprano que tarde se solucionan y llevar la fiesta en paz es dejar de atender a esos órdenes nefastos de afuera y esas condiciones sociales a los que les conviene que ustedes puedan estar mortificados y puedan estar mal.

Todos los días están aprendiendo a poner a Dios por encima de los seres humanos y poner a Dios por encima de los seres humanos es que ustedes dejen de deberle al banco sencillamente aunque tengan deudas porque no es al banco al que le deben sino que Dios se encargó de sus deudas porque finalmente Dios es el dueño de todo y no es que desprecien al banco y nos que desprecien las instituciones, es que sencillamente cuando ustedes llegan a un nivel donde ya no encuentran nada más que hacer endosan sus deudas, endosan sus enfermedades, endosan sus preocupaciones, endosan sus dificultades para que Dios se encargue, créanme que no solamente pueden estar en unas condiciones donde el banco les quiera quitar las cosas sino donde haya personas que les quieren quitar la vida y si esas personas quieren venir a cobrarse con su vida o cobrarse con la vida de un ser querido lo que ustedes deben, al acudir a la justicia divina de Dios a la justicia protectora nadie les podrá hacer daño por más que quieran hacerlo porque estarán bajo la custodia de Dios y cuando ustedes están bajo la custodia de Dios es algo similar guardadas las proporciones a cuando ustedes van a la embajada de un país a pedir asilo; esa esa embajada a donde ustedes acuden tiene la obligación de ampararlos y protegerlos. Entonces cuando ustedes acuden a Dios Él siendo ese embajador de ustedes y los protege y nos envía a nosotros siendo el dueño Dios a que como esos embajadores de Él, cuando ustedes piden nuestra ayuda intercedamos por ustedes y entremos en su custodia o más bien ustedes entren en la nuestra.

Entonces fíjense hermanos que la única forma en que ustedes puedan ser atrapados y dañados es en el momento en que ustedes se salen de la embajada y vuelven a las condiciones donde dejan que ese entorno social en el que vivieron o en el que viven sea el que tenga una autonomía sobre ustedes entonces no se salgan de la investidura de Dios y de esa embajada que significa decirle a esos que quieren venir a hacer presa de ti, que no lo van a hacer porque ustedes están con Dios,  porque ustedes le entregaron sus deudas a Dios, porque ustedes entregaron sus bienes a Dios, porque ustedes entregaron palabras más palabras menos su confianza a Dios y cada uno de ustedes aunque solamente lo reciten llegará un día no muy lejano a entender estas palabras y es que estando de la mano de Dios nada malo les pasa, por eso hoy los bendecimos queridos hermanos, venimos a protegerlos, venimos a llenarlos de alegría, de luz y esperanza, venimos a que entren en esta embajada donde las cosas se viven de una forma más tranquila y donde todos esos órdenes difíciles quedan afuera para ya no vivir más en las dificultades de la vida y que cuando ustedes vuelvan al mundo normal tengan una investidura lo suficientemente fuerte para que aunque estando movilizándose en un mundo riesgoso nadie les pueda hacer daño así estén en peligro.

Dios los bendiga queridos hermanos, les traemos el amor de Dios, traemos la bendición de sus días, de sus fines de semana, los preparamos para que puedan tener una bonita noche, para que puedan tener un bonito fin de semana, puedan tener una semana Santa de descanso y puedan sentir que tienen el derecho de descansar; háganse el propósito de no irse a la cama pensando en deudas, háganse el propósito de no irse a la cama pensando en penas, pensando en preocupaciones, pensando en angustias,atrévanse a dejarle todo eso que les mortifica a Dios para que Él se encargue y en ese nuevo día así como pueden depositar la noche a Dios con la confianza en que mañana habrá un nuevo día para ustedes poder depositar en Dios todas aquellas cosas que los está mortificando y todos los sueños que también los están haciendo sentir frustrados porque no se han podido realizar todavía, Dios los bendiga queridos hermanos en la paz de mi Padre para acompañarlos y protegerlos siempre Jesús de Nazaret.

Liú Meditación   “Muy buenas noches yo soy Liú, vamos a empezar a respirar profundo; se dan cuenta que a veces duele esa respiración o hay un cambio de presión por el cambio temperatura que hay afuera. Vamos a permitir que esa respiración se lleve todos los virus, todas las bacterias de su garganta, los depósitos que hay de virus y bacterias en coyunturas, que están depositados en las zonas calientes de su cuerpo, todas esas mutaciones celulares que están en el sistema linfático que están anexos a las zonas cálidas de su cuerpo, van a permitirse que ese sistema linfático se abra, en ese momento se dan la orden desde su mente que esta respiración lleve el suficiente oxígeno a través de su sangre a todo el sistema linfático …”